Cap. - 4 - Dolor.

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Han transcurrido siete días desde que la mujer escogió al cachorro Licántropo para experimentar, investigando los textos que encontró en la torre, logró una manera artificial de extraer por completo una de las energías dentro del cuerpo de un ser vivo, pero era imposible determinar cuál de las dos energías iba a obtener, o sí el sujeto sería capaz de sobrevivir a la extracción.

El aparato creado tenía forma de bastón con un cristal en el puño que se asemejaba a la punta de una lanza, fabricado con los procedimientos y materiales que el autor explicó detalladamente en su libro, pero con modificaciones hechas por ella.

La mujer se decidió a realizar su experimento en la habitación del altar buscando una reacción directa de la joya en el proceso, el Cachorro fue encadenado a la base del altar por un collar de plata que quemaba el pelo y piel de su cuello mientras se encontraba en su forma de lobo, mientras los insectos preparaban los materiales necesarios para el procedimiento.

-Bien cachorrito, esperemos que el décimo cuarto intento sea el bueno, -comentó ella a modo de burla-

Usando el bastón la mujer golpeó fuerte la cabeza del cachorro, éste se desplomó en el suelo del altar adoptando forma humana y quedando inconsciente.

El experimento comenzó, presionando la punta del bastón sobre la columna del cachorro la mujer activó el aparato, éste desprendió una fuerte corriente que iluminó todo el cuarto y empujó levemente las manos de la mujer hacia atrás mientras sujetaba el bastón con firmeza, la gran sacudida despertó al cachorro que se retorcía de dolor raspando el suelo con las garras intentando alejarse de ella.

- ¡quédate quieto! -gritaba la mujer, - ¡no dejaré qué lo arruines!

Clavando fuertemente el tacón de su zapato sobre el brazo derecho del cachorro la mujer luchaba para mantenerlo quieto, pero éste seguía sufriendo e intentaba desesperadamente quitársela de encima.

Aproximadamente un minuto después de comenzar, la espalda del cachorro sumido en dolor comenzaba a hincharse, su piel se quemaba gravemente en la superficie, varias venas comenzaron a estallar dando un grito desgarrador que resonó en las paredes de la habitación, el bastón extrajo un pequeño hilo brillante de la espalda del cachorro que fue absorbido por la punta terminando el proceso, dejándolo aturdido y en estado crítico, la mujer separó la punta del resto del aparato mientras la observaba detenidamente en su mano.

- ¡bueno!, no tengo la menor idea de cuál de las dos energías a las que se refería el libro puede ser ésta, pero la guardaré para estudiarla más tarde, ahora... *pat, pat*, ¿sigues vivo?

Habiendo terminado, la mujer picaba la cabeza del cachorro usando los dedos, pero éste seguía aturdido respirando erráticamente debido al fuerte maltrato, a pesar de ello continuaba vivo a duras penas mientras las horribles oleadas de dolor que sentía recorrían su cuerpo.

La punta con la energía extraída fue llevada a otra parte de la torre por los insectos, que también procedían a traer una punta extra y continuar para extraer la energía restante, la mujer descansaba tranquilamente sentada en la base del altar, disfrutando de una manzana que cortaba delicadamente con una navaja pequeña mientras el cachorro moribundo estaba tendido en el suelo frente a ella.

-sabes, la verdad me sorprende que sigas consiente luego de esto, -comentó la mujer mientras disfrutaba de su manzana, - supongo que tu especie es mucho más resistente de lo que pensaba, dime, ¿qué se siente estar sin una de tus "energías" ?, ¿puedes hablar?, eres casi tan inteligente como un humano, deberías poder.

Entre pequeños quejidos de dolor que daba el cachorro, logró articular sus labios para pronunciar una única palabra.

-Muérete...

Perro del InfiernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora