Capitulo 1.

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-Mamá, ¿Podemos ir de compras?, ya no hay leche para mi cereal de mañana- digo mientras me sirvo en mi plato de cereal, la que quedaba

Ella ni si quiera me voltio a ver, estaba maquillandose en el espejo que teníamos en la entrada
-¿Mamá?

Cerro su rímel y se sentó en la barra de la cocina junto a mi, mientras se tomaba su jugo de naranja
-No puedo Emily, salgo hasta las 10

-¿Que?, pero te acabas de ir de viaje?- bufé

Ella terminó su jugo antes de hablar y dejó en el fregadero el vaso de cristal
-Es lo que tengo que hacer para ganar dinero- tomo su bolsa y dejo 75 dólares en la barra
-Tendras que ir tu, y también te irás sola a la escuela, aún ni te cambias y yo tengo que irme- puse mis ojos en blanco y me subía mi habitación.
Empeze a vestirme, me puse unos jeans rotos que resaltaban mi enorme trasero, digo la vida no había sido tan mala conmigo, una playera negra y mi chaqueta de cuero, obviamente falso.
Me puse unos tenis, y me fui corriendo para la escuela, en el Seven de la esquina me compré un capuchino de la maquinita, cuando le intenté poner la tapa, el café se me voltio un poco y me quemé, sentí como alguien me acerco una toalla de papel

-Toma, con cuidado- me quede sin palabras cuando mire sus ojos azules, sus ojos eran los más lindos, un azul profundo y una pestañas largas, y abundantes, además sus cejas eran su marco perfecto

-Gracias- no pude evitar sonrrojarme

Me limpié el café, ya ni si quiera me dolía mi dedo, tape el café y cuando iba a pagar, me demoré buscando mi tarjetero en mi mochila, estaba como loca buscándolo

-¿Todo bien?- era el denuevo, estaba formado detrás de mi

-¡Si!, bueno, no, es que... no encuentro mi tarjetero

El me sonrió, puso su café negro al lado de donde había dejado el mío
-¿Puede cobrarme los dos?- cuando escuche eso levante mi cabeza de mi mochila

-¡Noo!- grite como loca, baje mi intensidad al darme cuenta que había gritado muy fuerte- Esta bien, no se preocupe

-Son 3 dólares- el asintio y después me entrego mi café

-¿Vas a la escuela?

Yo asentí ya sin aliento
-Vas tarde, faltan 5 para las ocho- dice mientras me da mi café, yo le di las gracias y salí corriendo.
Sin preguntarle su instagram, Emily eres una idota, te topaste con el hombre más guapo del mundo, y no fuiste capaz de hacer nada.

Corrí para la escuela desilusionada, y a la Vez feliz, por lo que había pasado

-¿Porque sonries tanto?- dice Anna mientras se sienta

-¿Que?, ¿Yo?

Ella sonrió
-Claro

-Es que... no te imaginas lo que me paso hoy

Comencé a contarle toda la locura que había vivido, pero la dejé a medias porque el timbre sonó y el maestro llegó poco segundos después.

Cuando acabo la clase, Anna y yo nos sentábamos en las gradas de la escuela, y terminaba de contarle lo que había pasado en la mañana
-Debiste pedirle su número- dice mientras come su fruta con Yogurt

-Eso pensé, pero tenía demasiada pena- tome una papá frita y la metí a mi boca

Anna comió su último melón con granola y Yogurt, para después guardar su toper en la mochila
-Quisiera ser como tú- murmure mientras veía como guardaba su toper
Ella me voltio a ver entre risas
-¿Por?

-Tienes tiempo para hacerte desayunos saludables- mire con desprecio mi bolsa de patatas

-Solo compra lo necesario, y todo lo haces rápido, te doy un consejo, pica la fruta en la noche- se colgó la mochila

Nos levantamos de las gradas y cuando íbamos para el salón, tiré la bolsa a la basura, aún tenía patatas
-Gracias a eso tienes ese trasero envidiable, no seas tan dura- dice entre risas mientras caminamos.

(...)

Después de comer me iba a ir al supermercado, esta vez estaba decidida a comer saludable, aunque sabia que sería duro, tome mi tarjetero, que había dejado en la barra, típico de mi, soy súper distraída, y salí de la casa, me tuve que regresar al ver que estaba lloviendo, y el Walmart estaba algo lejos, podía llegar caminando, pero necesitaba un maldito paraguas, regresé a a la casa y tomé el que estaba en la entrada, cuando estaba cerrando la casa, no podía creer quien estaba a punto de subirse a un auto café oscuro, era el tipo guapísimo de esta mañana, y era mi vecino, lo cual significaba que el me había escuchado ayer decir "Haay papii", estaba feliz, confundida, y asustada, o bueno avergonzada, por favor Emily, no tengas un ataque de ansiedad ahora mismo.

-¡Hola!- cerró la puerta de su carro y corrió a mi porche para no mojarse

Ok, Emily, actúa natural, el hombre más sexy del mundo estaba caminando hacia ti, solo actúa natural.
No pude decir ni una sola maldita palabra, solo le sonríe

-¿Esta tú madre en casa?- dice apenado
Denuevo no pude hablar, y solo negue con la cabeza, mientras tenía la maldita boca abierta

-Mmmm, es que, no tengo comida en el refrigerador, acabo de mudarme como puedes ver, solo tengo una manzana que compre de camino al trabajo- era la excusa perfecta para pasar tiempo con el, por favor Emily, di algo
-Supongo que tendré que investigar de otra parte, adiós- me sonrió y antes de que se fuera, no se de donde saque fuerzas

-¡Espera!- Emily, ¿Porque siempre gritas así?
-Lo siento, espera, yo iba para un Walmart, puedo mostrarte donde es

-Genial, y puedo traerte de regreso, creo que lloverá toda la tarde- Siiii papiii, Emily, controlarte

Yo asentí, le di mi paraguas para que nos cubriremos los dos y llegar a su auto, me abrió la puerta y después se fue para el otro lado, cuando entro dejo el paraguas en el asiento de atrás y antes de encender el auto me dio una media sonrisa.

Porfavor si estoy soñando, no me despierten nunca.

Pettle honeyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora