SOLO EN SUEÑOS

Cap19

Cap19

CELESTE//ANGELINA (su nuevo yo para ocultarse)

Un rugido por parte del estómago de Loki hace que me separe de sus labios. Aun no me creo la locura que acabamos de cometer. Todo el mundo cree que estoy muerta. Pero Loki no se ha ido, estamos juntos por fin. Por fin podemos estar juntos y ya sabe la verdad, aunque no ha sacado el tema, creo que lo está evitando.

-Tienes hambre?- sonrió intentando no reírme mientras sigo mirándole a los ojos.

- Sí, creo que ya es hora de cenar...-dice apoyando su frente en la mía.

-Mejor hago yo la cena... creo que nos sabes cocinar y no quiero arriesgarme a que lo intentes.- digo riendo a lo que el también ríe.

Me dirijo a lo cocina y comienzo a sacar los ingredientes para la cena, no puedo quitarme esta maldita sonrisa de la cara pero no puedo evitar estar feliz. Él se acerca y se apoya en la encimera para mirarme.

-Sabes que aún no hemos terminado verdad, el plan aún sigue en marcha...- y adiós sonrisa.- estas bien?- dice acercándose al percatarse de mi cambio de humor.

-No podemos solo, no sé, disfrutar del momento durante un tiempo, solo... aprovecharlo.-digo terminando de poner los macarrones en la hoya en la que los he puesto a hacer. Lo miro suplicante.

-Está bien...-me abraza y besa la cabeza.- no podemos esperar mucho o él nos encontrara a nosotros.- dice refiriéndose a Thanos.

-Shhh...-digo haciéndolo callar.- recuerda disfruta del momento...

-Me gustas más rubia...- no puedo evitar reír ante su inesperado comentario.

Estamos un rato así, no sé realmente cuanto, pero estamos en silencio y no es incómodo. Me separo para mirarle, y me doy cuenta de que debe de estar pensando algo porque evita mirarme.

-Loki...-intento que me mire, pero parece imposible. Respiro hondo.- quieres que hablemos?

-No sé si deberíamos...-ahora si me mira.- sabes que me has ocultado la verdad... y que de alguna forma somos hermanos...-lo interrumpo.

-Sabes que me da igual...-le beso la nariz.- solo no te lo dije porque pensaba igual que Thor.-alza una ceja confundido.- no quería que te lo dijera porque sabía que te enfadarías conmigo, y yo... no sabía cómo reaccionarias...-al escuchar el sonido del agua de los macarrones, me alejo para darles vueltas con la cuchara de madera.

-Ahora entiendo porque tanto abrazo con Thor...-dice con una punzada de... Celos?

-Celoso mi rey?- digo riendo mientras saco los macarrones de la hoya.

-Ahora ya no.-dice aguantándose la risa.- me gusta que me llames así. Y tú?.- pregunta apoyándose a mi lado en la encimera.

-Yo que?- hago como si no me enterara de lo que me pregunta. Les hecho la salsa a los macarrones.

-Vamos... sabes a que me refiero, tú has sentido celos?- me pregunta mientras saca los vasos y los cubiertos.

-Si...-digo bajito, pero igual lo escucha.

-De quién? Es decir, no me ha dado tiempo a seducir a nadie en el tiempo que llevo aquí.-dice sentándose en una de las sillas.

Suspiro y coloco los platos, mientras cenamos estamos en silencio, el me interroga con la mirada, sé que no le he contestado y él sabe que lo sé, solo espera a que responda. Como en silencio evitando mirarle.

Terminamos de cenar y recojo los platos y la mesa. Lo miro y él también me mira. Creo que va siendo hora de enseñárselo...

-Siéntate en el sillón... voy a enseñarte una cosa...- Duda pero se sienta igual, me acerco y me siento en sus piernas, me mira pícaro y yo niego con la cabeza.- no es eso...- le enseño mi mano para que vea que no tengo nada.- te vas a dormir... o algo así, por eso te he dicho que te sientes para que no te caigas...- miro su expresión tranquila esperando que lo entienda, solo asiente para que prosiga. Pongo mi mano en su nuca y acarició su pelo, puedo notar como se le erizan y no puedo evitar sonreír. Apoyo mi frente en su hombro porque yo también me dormiré.- Después podrás hacerme todas las preguntas que quieras y yo las contestare.

Hago que los dos nos durmamos y le empiezo a enseñar recuerdos suyos y en tercera persona para que entienda que yo podía verle además de en los sueños. Empiezo por los recuerdos más lejanos, su niñez en Asgard, algunos sueños nuestros en los que yo le decía cosas que habían pasado durante su día para decirle que no pasaba nada que aunque los amigos de Thor no jugaran con él, él podía hacer más cosas que luchar. Otros en los que si jugaba con su hermano.

Después, su adolescencia, yendo a clase, aprendiendo magia con su madre, Frigga. En la sala de los trofeos con Odín y Thor, cuando les dijo que los dos habían nacido para ser reyes. Todos sus royitos con las asgardianas desesperadas que no conseguían estar con Thor y se iban con él. Leyendo libros en la biblioteca, practicando hechizos, metiéndose en líos y culpando a Thor. El riéndose con sus bromas.

Y cuando empezó toda esta locura, el casi nombramiento como rey de Thor y como el lo saboteo para aplazarlo, el viaje a Jotunheim, cuando descubrió lo que era, en su forma jotun, la pelea con Odín, cuando fue nombrado rey, cuando visito a Thor en Midgard, cuando Frigga lo nombro rey, cuando casi mata a Thor, el intentando empuñar el martillo, el peleando con Thor en el puente con la intención de destruir Jotunheim, el cayendo por el puente y el grito de Thor diciéndole que no ,que no lo soltara, las lágrimas de Frigga y Thor esos días en los que lo creían muerto.

El con Thanos planeando destruir Midgard, toda la lucha de Nueva York y su estancia en SHIELD, cuando los dos se fueron, sus charlas con Odín hasta que fue encerrado, la pelea con Frigga, todas las veces que despertaba por pesadillas con Thanos, su frustración, como mataron a Frigga, su berrinche en la celda, como Thor y el peleaban contra Malekith, su muerte, el llanto de Thor, la lucha de Thor en Midgard contra Malekith, como Thor gano, como Thor le decía a Odín que no quería ser rey y como después de dejar que Thor saliera de la sala se dejaba ver por unos segundos.

Me despierto poco a poco, lo puedo escuchar sollozar, lo miro apenada y le limpio las lágrimas con mis manos, creo que se porque llora, por el reduerdo de su madre, por Frigga. Espero a que se calme mientras lo abrazo y el me sujeta con fuerza. Pasamos mucho rato así tanto que deja de llorar y sollozar y su respiración se tranquiliza, pero sigue escondido en mi pelo.