Muéstrame- NicoMaki

Capítulo 21

—¿Sucede algo con Maki?— inquirió Kasumi para confirmar que la razón por la que Nico estaba decaída era la pelirroja.

—Este...¡No! Quiero decir, no, no sucede nada con Maki, me equivoqué.— respondió con la voz un poco temblorosa, delatando su nerviosismo.

Kasumi entrecerró los ojos con incredulidad, algo estaba ocultando su amiga, y tenía que descubrirlo.

—¿Podrías decirlo sin sonar tan sospechosa?— replicó la menor en busca de una respuesta sincera.

—Este...creo que deberíamos pedir más limonada, empieza a hacer calor.— cambió de tema sin percatarse que sus mejillas se habían pintado de un llamativo color rojo.

Kasumi la observó fijamente mientras bebía ruidosamente la limonada por la pajilla de su vaso.—¿Te gusta Maki?— preguntó sin rodeos.

Nico comenzó a toser, a la vez que su rostro increíblemente se tornó aún más rojo que antes, Kasumi podía jurar que incluso sus oídos y parte de su cuello también se habían pintado de ese color, provocándole reír un poco por lo evidente que era la pelinegra.

—De verdad te gusta.— más que una pregunta sus palabras parecían más una afirmación.

—No, no, no. Maki es sólo mi mejor amiga, no lo malinterpretes.— refutó Nico agitando sus manos de una manera exagerada.

—Vamos, sólo sé honesta conmigo, eres muy evidente.— la peligris apoyó su rostro en una de sus manos mientras le sonreía con picardía a la mayor.

—Ella no me gusta.— volvió a negar Nico.

—¿Entonces?— inquirió elevando una ceja con escepticismo. 

—Sólo....— ¿De verdad estaba bien decirlo? Kasumi no parecía estar en contra de la idea hipoteca de que le gustara Maki, quizá si podía contarle....

—¿Sólo?— repitió en busca de hacer que Nico terminara de hablar.

—Sólo...nos acostamos una vez....— dijo en un tono de voz realmente bajo, aún así fue suficiente para que Kasumi la escuchara.

—¡¡¡Kyaaaaaa!!!— gritó de emoción comenzando a dar pequeñas patadas mientras se cubría el rostro, llamando la atención de las personas en el local.

—Baja la voz.— le pidió Nico sumamente avergonzada.

—¡Es que no puedo!— continuó con su momento de emoción para luego respirar hondo en busca de calmarse.

—¿Ya pasó?— preguntó Nico.

—Ya, ya,— asintió la menor con una mano en el pecho, mientras aún trataba de tranquilizarse.—Vas a hacer que me de un ataque al corazón.— acusó con una sonrisa.

—¿Perdón por eso?— inquirió sin saber muy bien si debía disculparse o no.

—Quiero...No,— se corrigió.—Necesito detalles.— exigió Kasumi.

—No hay mucho que contar.— tartamudeo un poco al hablar.

—Pasó algo con Maki que te tiene así de deprimida, eso no me parece que sea "no mucho que contar"— espetó Kasumi señalando acusadoramente a Nico.

Nico bajó la mirada y guardó silencio con una expresión un poco triste. Quería contarle a Kasumi lo que había pasado pero al mismo tiempo tenía miedo de decirlo en voz alta, no quería admitir nada aún. No estaba preparada para eso.

—Nico,— la llamó Kasumi con voz suave. Podía verlo, era fácil intuir los pensamientos de Nico, no quería forzarla a hablar, pero al mismo tiempo sentía que la mayor necesitaba hablar de lo sucedido. Quería que no se sintiera sola.—Puedes contarme lo que sea, no voy a juzgarte en lo absoluto, yo te apoyó sin importar que haya pasado.— le dijo con una mirada amable y comprensiva.