IN THE HEAVEN |BL|

Capítulo VII

Mi comisuras se curvaron.

*No es un poco pronto??*

*Me he informado y es absolutamente normal que se pueda llegar a adelantar*–Me escribió al rato.

*Puedes venir a verla mañana, si quieres.*–Respondió seguido al mensaje anterior.

Presio.

Me mordí el labio inferior mientras pensaba en una respuesta. Me quedé parado en la puerta de mi casa.

*De acuerdo. :P*

Quise borrar el mensaje al momento, ¿una carita? Genial ahora pensara que soy imbécil. Entré en casa y cerré la puerta, quizás demasiado fuerte por la frustración. Subí hasta mi habitación y me tiré en la cama. Me quedé observando el techo mientras relajaba mi respiración.

–Maldito Asher, haces que todo me parezca tan difícil. –Ya no podía seguir engañándome, podía hacer dos cosas, aceptar la realidad o aceptar la realidad, no había más opciones. Me gustaba, y eso era así. Tenía todo el poder de jugar conmigo a su antojo, porque mi corazón ya era suyo.

Actualización, Asher Parker, no eres mi problema, eres mi debilidad.

La habitación estaba oscura y corría algo de corriente por la ventana. Cerré los ojos y mientras el sueño se iba apoderando de mi; los párpados cada vez me pesaban más, y mi vista, que solo podía detectar una paleta de grises se iba volviendo borrosa.

Por suerte del destino o por alineación de los planetas la profesora de última hora faltó a clase sin dar motivos. Con lo que todos pudimos salir una hora antes.

Aunque no todo iba a ser de color de rosas, tuve que caminar hacia casa, y el trayecto no era por decirlo así... corto.

Tuve bastante tiempo para aclarar mis ideas, y sobre todo para tener un rato a solas, los cuales son más que necesarios para mi persona. Soy una persona solitaria en toda regla, disfruto de los momentos en los que no haya nadie para molestarme, así todo parece tan fácil... Iluso.

Eso no quiere decir que no necesite socializar, nada que ver. De hecho, creo que es una de las pocas cosas que aún me mantiene medianamente cuerdo.

Mi casa estaba totalmente vacía, cosa que ya era costumbre y decidí poner música para cambiar el ambiente. Pasé las horas muertas leyendo, bueno más bien, releyendo un libro de mi estantería, hasta que mi móvil sonó. Asher me había enviado una ubicación, supuse que de su casa.

Caminé acalorado por las calles hasta que me comencé a extrañar. El camino que estaba realizando me sonaba demasiado, pero no me paré y seguí caminando.

Me paré extrañado, según mi móvil había llegado a mi destino, pero me encontraba en frente de 1la cafetería de siempre.

*Ammm, te equivocaste de ubicación?*–le escribí confuso.

*No, vete a la puerta de al lado, te abriré.* –Me respondió al instante.

Mis neuronas hicieron un click. ¿Vivía sobre aquella cafetería? Elevé mi mirada de la pantalla y mis ojos se concentraron en una puerta color caoba que se encontraba justo al lado del gran ventanal de la cafetería. Me dirigí allí y me quedé parado frente aquella puerta.