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Era una agradable mañana, el cielo adornado con esponjosas nubes, el viento soplando haciendo danzar a las hojas de los árboles, niños disfrutando jugar en el parque central siendo héroes salvando a otros niños de "villanos".

En ello iban pasando dos Heroes admirados por todos, Dynamight y Deku, Alfa y Omega destinados, llevan siendo pareja desde que se graduaron en la U.A hace 7 años.

Su rutina siempre eran las mismas, Salir a hacer vigilancia y que todo esté en orden, comer un poco, unos que otros coqueteos de parte de cada uno y pequeñas molestias divertidas.

Izuku:
- Kacchan suficiente... Debemos seguir vigilando -comentó entre ligeras risitas y un tierno sonrojo adornando sus mejillas-

Bakugo:
- Sabes que te gusta que haga esto, Deku~ -sonrió de medio lado dando otro beso hacia la nuca del pecoso-

Un estruendo los sacó de su burbuja, dirigiendo sus miradas hacia un edificio que estaba siendo destruido por unos Villanos. Los dos, fueron al lugar con rapidez para sacar a los civiles y protegerlos, Deku, hizo una rápida llamada y luego fue apartando a las personas que más cerca estaban.

Bakugo perseguía a los Villanos siendo impulsado por sus explosiones, hasta que logró capturar a uno, luego al otro junto al último. Los había dejado inconscientes para que no forcejeen y escapen, por otro lado, Izuku estaba sacando con rapidez a los civiles del edificio que estaba derrumbándose.

Estaba por ir a ayudar a su Alfa cuando escuchó un llanto pequeño, era un niño aún dentro del aquel lugar, sin dudar fue corriendo.

Corriendo por todo el lugar siguiendo el llanto, su Omega estaba desesperado en encontrar a ese pequeño y sacarlo del lugar para que esté a salvo.

Cuando lo encontró, lo cargó en sus brazos llevándoselo a la salida, trozos de techo cayendo, polvo por todas partes, golpes tras golpes para poder escapar del lugar.

A lo lejos logró divisar la salida, apresuró su andar, cubriendo al niño en sus brazos para que no sufra daño alguno... A punto de salir, cayó un trozo de roca grande cerca de ellos haciendo que caiga al suelo aún protegiendo al niño.

"Esto es malo... Se está derrumbando todo"

Sacudió su cabeza sacando ese pensamiento, se levantó como pudo cargando de nuevo al niño.

Izuku:
- ¿No te hiciste daño? -preguntó preocupado-

Niño:
- mh mh... - negó asustado, aferrándose al pecho del pecoso-

Volvió a correr a la salida, cuando por fin salió el edificio se derrumbó por completo pero... Una gran pieza del mismo iba a caer justo encima del peli-verde quien quedó paralizado ante lo que veía.

Bakugo:
- ¡DEKU! -gritó alterado el Alfa-

El mencionado, cerró con fuerza sus ojos, abrazando al pequeño como si eso lo protegiera, se escuchó el gran impacto seguido de una gran ola de humo impidiendo la vista de todos ante la escena.

El Alfa, abrió los ojos viendo en la misma dirección, su pecho se contrajo al no poder ver nada y que tal vez su Omega haya sido aplastado.

El humo se fue disolviendo con el viendo y un gran alivio lo inundó al ver una gran pared de hielo cubriendo a su destinado.

Todoroki:
- Justo a tiempo. -comentó en un ligero suspiro de alivio-

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Después de un largo día de arduo trabajo, cada quien fue a su hogar. Aunque el pecoso no se iba a salvar de su castigo por haberse quedado quieto y no haber avanzado a tiempo.

Llegaron a su casa, el primero en ducharse fue Bakugo, pues no quería que Izuku apestara a nitroglicerina aunque al menor no le importaba mucho.

Aprovecho en preparar la cena, en mitad de cocina, recibió una llamada de parte del bicolor sobre un informe de los Villanos que vencieron, aprovecho para agradecerle por haberlo salvado.

Media hora después, Bakugo salió e Izuku entró a tomar una rápida ducha, el mayor fue a preparar la mesa para ambos cenar tranquilos.

"Ver a esas familias felices, niños jugando y esas tiernas risas..."

Una suave sonrisa se dibujó en los labios del menor, pues se imaginaba como seria tener una familia con su destinado. Al salir ya todo cambiado de ropa, fue a la cocina donde se encontró a Bakugo esperándolo.

Se sentaron frente a frente.

Izuku:
- Buen provecho -sonrió dulcemente empezando a comer, acto mismo hizo el mayor-

Era una cena tranquila, un silencio agradable, el cantar de los grillos hizo el ambiente relajante, el soplido del viento haciéndose presente en la fría noche.

Izuku:
- Kacchan... umh... -el mencionado lo miró y pudo sentir los ligeros nervios de este, pues las feromonas se hicieron presentes- A Kacchan le... ¿Gustaría tener una familia?

Un sonrojo adornó aquellas mejillas pecosas, esmeralda y rubí se encontraron, el peli-cenizo hace tiempo quería formar una familia, pero no quería apresurar a su amado ni presionarlo en ese tema.

Bakugo:
- Si. Pero, ¿Te sientes listo? -arqueó una ceja viéndolo-

El peli-verde asintió con ligera pena terminando de comer, entre ambos se ayudaron a lavar y acomodar las cosas en sus lugares.

Hasta que de repente, Izuku fue acorralado por su Alfa, un ligero chillido se escapó de la boca del pecoso y miró aquellos ojos rojos.

Izuku:
- Kac-Kacch... -no concluyó ya que lo tomó de sorpresa, un beso-

Sorprendido y sonrojado, correspondió ese dulce beso mientras sentía el dulce olor de su Alfa que le encantaba, el beso empezó a subir de tono y en medio de ello, Bakugo cargó al oji-esmeralda de sus piernas para llevarlo a la habitación.

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Kon'nichiwa! Este es mi primera historia de BNHA y del Ship BakuDeku, espero les guste. Esta historia será corta, aviso.

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