XXXIX. Explícame.

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Marihela

Me quedo en la cama acostada con las ganas picando mi piel. Resopló enojada y miro la puerta por dónde se marchó. Me cruzo de brazos y me siento de golpe. Inhalo y siento el leve olor a coco que se siente. Últimamente estamos tanto tiempo juntos que su olor está plasmado en mi cuarto. En mi cama y a decir verdad, no podría gustarme más. Instintivamente veo la biblioteca que me regalo cuando cumplimos un mes de novios. Sonrío viendo la estantería junto a los libros que me regaló. Sabe que mis escritoras favoritas son Jamie McGuire y Tillie Cole. Me regaló la saga completa de los Hades Hangmen y la saga de los Maddox junto a otros libros de Jamie McGuire. Casi me da un ataque cardíaco. Los libros no son baratos y el me regaló dieciocho libros junto la estantería. Quería morir. Yo le había comprado una estupidez junto a lo que él me regaló. ¿Cómo podía comparar unos anillos compartidos con todo lo que me compro?

Veo el anillo en mi mano y sonrío. Agradecí que le fascinará los anillos. El mío tiene impreso un rayito. Quería acordarme de él cada vez que lo viera. Por su lado el de él tiene un libro cerrado con el grabado de una manzana mordida en su portada. La representación la entendió rápido. Pecado. Y el libro fue algo que quise añadir por mi cuenta.

Sonrío como idiota y me levanto. Dicha sonrisa desaparece cuando me doy cuenta que debo estar enojada ahorita. Salgo del cuarto y veo a Valentina viendo la puerta principal casi con la misma indignación que yo debería tener.

–Te dejo con ganas... eso no sé hace.

–Me voy a tener que comprar un Juancho... –Suspiro –Pero el mío se va a llamar Thomas.

Se empieza a reír mientras caminamos al mueble.

–¿Cuánto crees que Rebecka tarde en presentarnos a su novio?

–Ni idea –Me encojo de hombros –Aunque tal vez solo sea un polvo y por eso no lo presenta... ¿Sera Arturo?

Lo piensa.

–En realdad puede ser... Después que él desapareció fue que ella se fue y desde ese día empezaron sus huidas y excusas.

Por alguna razón solo me viene una persona a la mente...

–¿Y si es Dominick? –Me mira como si estuviera diciendo una estupidez –Piénsalo... Él estaba ahí

–Estas loca... La falta de acción te afecto el cerebro... ¿Cómo va a ser Dominick si no se toleran?

El recuerdo de cuando nos conocimos en el Bar... Las actitudes de ella, las palabras de el

"Hay cosas que no se olvidan"

–Tal vez por eso... Sabes perfectamente que sus familias no se llevan y además Dominick y Dylan no son los mejores amigos... ¿Y si por eso lo ocultan? Pueden fingir que se llevan mal y ya... Vamos a ser sinceras en que no desconfiarías de ellos nunca... –Niega –Si puede ser...

–No –Niega –Yo creo que te hace falta un Thomas y ya... Cómprate uno y deja de inventar.

Quisiera decir que se me va a ir de la cabeza, pero me siguen viniendo partes de cuando nos conocimos...

"...Debo admitir que tienes el carácter que me gusta, pero no"

Como Rebecka se puso cuando me coqueteo... La sonrisa de él cuando ella se le puso en frente...

Cuando estaba en el Gimnasio...

"¿Cómo que? ¿El pasado?"

"Lamentablemente el pasado no se puede cambiar pero... El futuro se puede modificar"

Serendipia #1 [Completa✓] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora