Capítulo 2.

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"Hay mucha gente. Resulta sencillo olvidar lo lleno de personas que está el mundo, abarrotado, y cada una de ellas es susceptible de ser imaginada y, por lo tanto, de imaginarla mal."

Cuando vez feliz a alguien que lo merece y amas, a ti también tendría que darte algún tipo alegría sobre ella, aunque sea un poco. Verla feliz, por fin verlos bien en persona y no en fotos de revistas o internet es algo valioso. Lo que ella tanto anhelo y espero por fin lo tiene y sin ningún tipo de problema. ¿Pero existe la envidia sobre ello? Yo creo que mucha gente la tiene, ya sea por su cuerpo y belleza o suerte, también mucha gente que ni los conoce lo hace, ya sea con el uso del prejuicio, solo por fotos, posteos, aclaraciones o simplemente tweets, o lo que sea. Por mi parte los celos o la envidia no tienen sentido, pero somos humanos, todos los tenemos. Y aunque no lo admita o demuestre, siempre va estar ese algo, esa envidia por ella. Por su vida.

--¡Ven aquí!--gritó Sarah corriendo escaleras abajo con Harry huyendo de ella.

--¿Cómo no se cayeron?--murmure indignada viendo como correteaban sin problemas y recordaba el hecho de hace dos días.

Harry vino corriendo hacia mí. Lo miré extrañada.

--Sarah...

Las cejas rubias de mi hermana se fruncieron en disgusto--¡Harry no me quiere prestar su acondicionador!--lloriqueo y los mire neutra.

--Harry, no seas mezquino y préstale el acondicionador--ordené desanimada.

--No pedo...--protestó tomándome por los hombros y zarandeándome exageradamente.

--Voy a lamentar esto--susurre--Sarah, usa el mío--cedí entre dientes.

Los ojos oscuros de Sarah eran de inexplicables felicidad--¿El que usas para el alisado?

Asentí y miré a Harry, estaba sonriente--Me debes mil...nunca le daría mi reconstructor capilar.

Mi pie dolió un poco por el movimiento brusco de querer levantarme, pero puedo caminar...algo.

--Gracias—sonrió.

--Acércate--ordené, y él lo hizo. Cuando ya estaba demasiado cerca--¡Te cortaré un rizo! ¡Era mi acondicionador! ¡Y me quedaba poco!--proteste pegándole en su pecho, con mis manos. Él rio tomando mis muñecas con solo una de sus manos. Oh my god, Harry Styles me está tocando.

Vi a Katlyn bajar de las escaleras, me separé de él, soltándome de su agarre y puse mis brazos en mi cara.

--¡Mi reconstructor!--lloriqueé--¡Si no fuera para tanto te cortaría el pene!--volví a amenazar. Los novios hicieron una mueca de desagrado.

Luego de decidir que era bastante sufrimiento, me encamine cojeando a la cocina, en la que estaba Sarah preparándose un té. A veces pienso que solo lo toma por Harry.

--¿Qué comeremos?--Preguntó mientras revolvía su infusión.

--No lo sé--dije pensativa.

--Pollo con... ¿verduras?"--comentó Katlyn entrando a la cocina--¿Mmmh?

Asentí.

--Llámame cuando este--Pidió Sarah marchándose.

Revise la nevera, y saque algo de lo que necesitaba.

Suspiré. Mi vista se dirigió a Kaltyn. Su cabeza estaba sostenida en una de sus manos.

--No recuerdo la última vez que mamá hizo el almuerzo--observé buscando la tabla de cortar.

Small Details |H.S| ✘ EditandoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora