𝐂𝐀𝐋𝐋 𝐎𝐅 𝐒𝐈𝐋𝐄𝐍𝐂𝐄 (Irene Y Tú)

°35°

Todos ya se habían reunido en aquella oficina, sólo estaban esperando a que ________ llegara. Seulgi y Taeyong se lanzaban un par de miradas. Estaban nerviosos, Sehun casi no prestaba atención a su alrededor. La puerta de la oficina se abrió, dejando ver a una chica alta y delgada, muy elegante y con la cara enojada. Sin duda era ________. Los tres centraron su vista en aquella chica. Esta sólo les dio una sonrisa amplia.

_______: Bienvenidos. (Estiró su mano para estrechar las manos de cada uno de ellos). Por favor, siéntense.

Todos los presentes en aquella oficina habían tomado asiento. El ambiente era bastante tenso, pero tenían que dejar de lado las diferencias, o al menos eso creía _______ quien miraba a cada uno de ellos. Sobre todo a Seulgi. Ninguno de ellos se había atrevido a romper aquel silencio en la oficina. Hasta que Taeyong decidió hablar.

Taeyong: Bueno, yo... ¿Conoce a Taeyeon, cierto? (En su voz se notaba el nerviosismo del chico, a lo cual _______ asintió con una sonrisa). Bien, ella nos dijo que te había dicho la verdad. Nosotros somos los que trabajan junto con ella. Sólo seguíamos órdenes. (Desvió la vista hacia sus dos amigos)

________: ¿Así qué son ustedes? (Juntó sus manos soltando un suspiro).

Por otro lado, Sehun estaba demasiado nervioso. Su hermana estaba frente a sus ojos. Las manos del azabache temblaban demasiado. Fue Seulgi quien tomó las manos del contrario dándole una pequeña sonrisa. ________ vio aquella interacción y volvió su atención hacia Taeyong. Sehun estaba apunto de explotar, estaba a nada de confesar que él era su medio hermano. Pero la mirada de Taeyong lo pudo evitar.

Taeyong: Verá, realmente no teníamos otra opción. Taeyeon y su novio nos convencieron de unirnos a ti y decirte todo lo que sabemos. Taeyeon decidió tomar toda responsabilidad sobre estas acciones y renunció al trabajo. Ella quedó en llamarnos, pero no lo hizo. Estamos algo preocupados a decir verdad. (Rascó su mejilla mientras soltaba un suspiro).

Seulgi: No nos odies por favor, simplemente no teníamos otras opciones.

Los tres presentes hicieron una reverencia ante ________. Esta sólo las miró con atención y sonrió un poco. Los entendía, no tenía motivos para odiarlos o hacerles algo malo como buscar venganza contra ellos. ________ tomó la mano de cada uno de ellos por algunos segundos y se reincorporó a su asiento.

________: No se preocupen, los entiendo. Sólo estaban siguiendo órdenes de alguien más. De seguro ustedes ni saben quién soy.

Taeyong: Es verdad...bueno. Hay algo más. (Miró de reojo a Sehun quien mantenía la vista fija en los zapatos de ________).

________: ¿Sí? Dime.

No estaban seguros sí decirlo o no, pero si no lo hacían y se enteraban por alguien más o por otro lado. Las cosas podrían malinterpretarse. Así que Sehun afirmó con la cabeza ante las miradas de Seulgi y Taeyong. Era hora de que ella supiera la verdad.

Sehun: _______, soy tu medio hermano menor. (Mencionó con seguridad, la mirada de ________ cambió por completo. Estaba demasiado seria). Yo, la verdad al principio no creía nada. Al igual que tú, me quedé con esa expresión la primera vez que me enteré. Nuestro padre fue un rebelde, tanto que terminó bajo tierra. ¿No? (Soltó una leve risa tratando de romper aquella tensión).

________: ¿Qué estás diciendo? ¿Eh? No tiene sentido. Sí así fuera, lo sabría. Mientes...¿Acaso quieres mi fortuna? Bien, te daré dinero si así quieres. Pero no inventes algo así. (La voz de ________ se entrecortaba y se escuchaba temblorosa. Sin duda era una enorme sorpresa para ella).

Sehun: No necesito dinero, bueno sí pero quiero ganármelo de buena manera. Oye, en verdad no gano nada mintiendo. (Se levantó de su asiento para dirigirse hacia donde su media hermana se encontraba). Vayamos a hacernos una prueba de ADN. Quizá sea muy difícil ya que nuestro padre ya no está.

________: Eso no tiene ningún sentido. (Desvió la mirada).

Seulgi: Creo que deberían tratar de hablar a solas. Nosotros los vamos a dejar por un momento. (Hizo una leve reverencia).

Taeyong: Lamentamos los inconvenientes, pero como dijo Seulgi. Ustedes deben tratar de hablar. Sabemos que es un tema difícil. Por lo tanto, nos vamos.

________: No, quédense. No hay nada de que hablar. Entiendo, luego veo esto con él. Pero díganme. ¿A qué vinieron realmente? (Los mira de reojo. No parecía molesta del todo, sólo había demasiada confusión en su expresión).

Mientras los cuatro se sentaban a platicar en aquella oficina. Por otro lado se encontraba Jennie junto con aquél hombre cruel. La chica no tenía expresión alguna en el rostro, pero eso no indicaba que no estuviera sintiendo miedo. Había asesinado a Taeyeon. Algo que en cierto punto no se creía capaz de hacer. Pero era su vida o la de ella. Jennie y Taeyeon aunque no se llevaban bien, no había motivos para hacerse daño del todo. Jennie se encontraba en aquella enorme habitación, observando el paisaje a través de la enorme ventana que estaba frente a ella. No entendía que es lo que quería aquél hombre. ¿Dinero? Lo dudaba demasiado, ese hombre era más que millonario. ¿Sólo asesinaba por diversión? Probablemente esa es la respuesta que tiene.

X: Vaya, te luciste. ¿Tanto odiabas a Taeyeon? (Una fuerte carcajada invadió aquella enorme habitación).

Jennie: La odiaba pero no había motivos para quitarle la vida. He cometido un grave error pero no hay marcha atrás. ¿O sí? (Sus palabras eran frías, sólo miró aquél hombre sin expresión alguna).

X: Ugh, otra persona sensible. Pero en fin, mira jovencita. En cierto punto estás correcto, no hay vuelta atrás. (Se paró detrás de ella sacando una pequeña foto de los bolsillos de su saco). Este chico. Park Chanyeol.

Jennie: ¿Qué tiene? (Miró de reojo la foto y frunció un poco el ceño. ¿Qué debía hacer ahora? ¿Qué le podría pedir a ella en ese momento? ¿Asesinar a aquél chico?). Es lindo, ¿por qué me muestra esto? ¿Está interesado en él? Omo...¿Usted es gay? (Se llevó sus manos a su rostro para soltar una leve carcajada).

X: Haces un chiste más, y te arranco los dedos. Pero como sea, quiero que lo mates. De la manera más cruel posible, y si no lo haces. (Se acercó un poco más a ella mientras sacaba una pequeña navaja de su bolsillo).

Aquél tipo la sujetó con fuerza y presionó un poco la punta filosa de aquella navaja en el cuello de Jennie. La chica había entrado en pánico. ¿Iba a morir en ese momento o sólo le estaban jugando una broma demasiado pesada? Aquél hombre jaló un poco la navaja, haciendo un leve corte en el cuello de Jennie. No era una herida mortal, pero era una prueba de lo que el hombre era capaz de hacer para obtener lo que quisiera.

Jennie: ¡Está bien! ¡Lo haré! ¡Acabaré con él! Pero suéltame por favor, me lastimas. (Algunas lágrimas recorrieron las mejillas de la chica, estaba demasiado asustada en ese momento. Quería huir pero ese hombre era astuto y la iba a encontrar tarde o temprano. Y cuando lo haga, la mataría).

X: Vaya, ¿Estás llorando? Awww, la asesina tiene sentimientos. (Llevó una de sus manos a los cabellos de Jennie para despeinarla). Te vas en unas horas a Seúl, prepárate. Te compramos un arma, digo. Por si requieres estos medios.

Aquél hombre había abandonado la enorme habitación. Jennie por su parte al ver que ya no había nadie con ella, se sentó en el suelo y comenzó a llorar con todas sus fuerzas. Había cometido un grave error y ahora está pagando las consecuencias de sus actos. Para ella no había otra salida, tenía que hacerlo, ella es un ser humano. También quiere vivir su vida. Tenía que dejar de lado sus sentimientos y seguir las órdenes de aquél hombre. Y su tortura apenas estaba comenzando.