Capítulo 4
Cuando me aparté nuevamente mire fijamente a mi alrededor y de verdad no comprendía nada, así que decidí preguntar:
-Nate que lugar es este?- dije al fin cayendo en cuando de dónde estábamos.
-Aquí vengo cuando estoy sólo, cuando estoy deprimido-dijo algo rígido y tenso.
-No sabía que solías sentirte así- dije un poco apenada por el y viendo que yo era exactamente así, un poco cerrada y llena de dolor.-No soy lo que crees Jane, quisiera estar contigo pero solo te jodere con mis putos problemas- dijo agarrando su cabello de manera desesperante.
-Creo saber como eres, conozco a la gente como tú- me miró rápidamente y abrió sus ojos de una manera inusual.
-A que te refieres en gente "como tú"- reí.
-Que busca la forma de escapar para poder dejar de sufrir- dije con seguridad, era la primera primera conversación me sentía que teníamos algo en común, mi miró detallandome.
-Quiero fumar - abrí mis ojos y le lancé una mirada penetrante.
-Fumas? Odio que fumen- mi tono fue desagradable algo cortante y frustrado-No me interesa si no te gusta, lo hago y punto- dijo sin censura, tragué profundo y callé, pero luego volví y abrí la boca y dije:
-Y por qué lo haces?- no debía meterme pero quería saber alguna razón, no importa si es mínima.
-Son cosas que es mejor no decir Jane, no quiero que te alejes de mí, pero joder sé que solo lastimare lo poco que tenemos aún así tenías que saber como soy..- dijo algo desanimado.
-Tranquilo Nate, te entiendo, no soy quien para juzgarte, respeto tu decisión, cuentas conmigo- dije de la mejor manera, él mostró una sonrisa que me gustó.
-Gracias, nunca pensé que lo entenderías- lo abracé, no se por que lo hice, fue algo totalmente involuntario.Apenada me aparté, mis mejillas se encendieron y miré al suelo, él me alzó la cabeza y me sonrió, me miró de una manera que caía a sus pies, estaba tan cerca y rogaba que sus labios tocarán los míos, miraba sus labios y sus ojos, esos que me tenían intimidada por completo.
-Por qué te apartas?, me gustó eso, nadie lo había hecho por mí- dijo mirándome fijamente, decidí quedarme callada y alejarme, me levanté y me acerqué a los miles de cigarros tirados en el suelo. El lugar era un pequeño cuarto con vista a un amplio y hermoso jardín, las paredes estaban pintadas con graffiti de todos los colores, había un sencillo sofá negro en una esquina, y un reproductor de música al otro lado, el ambiente daba algo de pena, pero me gustaba, volví a mirar los cigarrillos y sentí como él llegó de la nada y me dijo al oído:
-Por qué me huyes?, dijiste que no te ponía nerviosa no?- se río en mi oído, no voltee, le hablé mirando hacía los cigarros.
-No puedo Nate, esto es mucho para mí- dije un poco desanimada, él sólo se quedo ahí, quieto, sentía su respiración en mi cuello, mi corazón latía tan fuerte que creó que él lo puede escuchar, no podía estar relajada.
-Por qué dices esto?. -Sólo no quiero sufrir y terminar ilusionada, necesito enfocarme en mí- se acercó más a mi oído y dijo:
-No sería capaz de hacerle daño a la persona que estoy a punto de besar por segunda vez- me quede estática, no sabía que pensar y mucho menos cómo reaccionar.
-Por qué tan seguro?- dije seriamente, trate de no demostrar pánico.
Desperté alterada, Dios! Estaba soñando con él, por qué siempre tengo que pensar en él!? Grité para mis adentros, analicé el sueño, y me di cuenta que soñé con todo lo que la anterior noche me había contando, Nate y habíamos dicho nuestros problemas, él se preocupó por mí y yo por él, pero Dios, fue tan intenso! Soñé que me besaba, de verdad quería tanto esto?.
Me levanté de mi cama rápidamente, caminé hacia el cuarto de baño, abrí la regadera y decidí entrar a bañarme, no sabía que pasaba, mientras las gotas caían por mi cuerpo recordé cada parte del sueño y mi corazón se aceleraba, pensaba en lo perfecto que era su cabello, en su mirada penetrante, Jane él te tiene controlada.
Salí de la ducha y me miré al espejo, mis ojos brillaban más de lo normal, era extraño todo lo que estaba pasando, giré rápidamente, llegué a mi habitación, me cambié para meterme de nuevo entre las sábanas, agarré mi móvil y me quedé revisando las notificaciones, me llegó un mensaje de Nate, decía "Buenos días nena, como amaneces?" y recordé que no él no sabía nada, que todo había sido un sueño, que yo jamás le había dicho que me nos viéramos. Por un momento me tranquilicé, fue lo mejor que me pudo haber pasado, -nunca debes decirle lo que sientes- dijo mi subconsciente, respondí al minuto "hola buenos días, bien y tu?" mentí, me sentía algo desanimada, sentía ganas de estar con él pero no, él no sabía nada y no demostraba algo que me dijera que gusta de mi, aveces era cortante y no quería saber de mí, luego era cariñoso. -segura que estas bien?- dijo Nate, por qué él me dice esto? Acaso ha notado que estoy mal? Ni siquiera me está viendo, no le respondí, necesitaba enfocarme en lo que era mejor para mí, estar con un chico que es cortante y cariñoso a la vez luego de haber terminado mal una relación no me convenía, debía olvidarlo, era lo mejor.
Salí a la cocina a buscar algo de comer, estaba hambrienta. Como de costumbre, no había nadie en mi casa, siempre me quedaba sola, me senté en el comedor a mirar mi plato de cereal, pero mi mente enseguida trajo la imagen de Nate, no podía olvidarlo, se me haría imposible, pero lo tenía que hacer, él no me demuestra nada, no puedo permitir que me ilusione.

ESTÁS LEYENDO
Focus.
RomanceSinopsis Todo comenzó en una fiesta, su protagonista Jane Ross, esta destinada a que su vida amorosa cambie, conoce a Nate Boots, un chico peligroso y atractivo que logra despertar la llama del amor en ella y desde ahí todo cambia, decide ablandar s...