Quiero saber lo que es el amor

Capítulo 7 2/2

Para cuando Derek terminó de hablar Stiles tenía sus mejillas bañadas en lágrimas, de las que no fue consciente hasta que Derek comenzó a borrarlas con sus pulgares. Quién se asustó un poco cuando vio las primeras lágrimas caer, pero se dio cuenta del brillo en los ojos miel y rápidamente supo que no eran de tristeza, sino que de felicidad. Esto lo impulsó a seguir hablando sin darse cuenta que el mismo tenía sus ojos brillosos mientras miraba al castaño de forma expectante.

-Oh, Derek- Fue todo lo que pudo decir Stiles lo que puso al alfa algo nervioso- Yo ... yo no....

-Por favor no me apartes- Lo corto con desesperación Derek- Déjame intentar llegar a tu corazón, te lo ruego, déjame enamorarte- Suplico el mayor sorprendiendo y enterneciendo al humano.

-Derek...- Volvió a llamarlo Stiles pero el moreno estaba tan compenetrado que siguió hablando.

- Lo que más quiero es que podamos pasar el resto de nuestras vidas juntos, porque no soportaría que te alejes de mí, o que te enamores de alguien más, por favor dame una oportunidad para ...

-¡Derek!- Dijo esta vez un poco más alto captando la atención del hombre- Tu no necesitas una oportunidad para enamorarme- Sonrió ampliamente- Porque ya estoy enamorado de ti...- Confesó el castaño sonrojándose demasiado- Llevo tanto tiempo enamorado de ti, que ya no recuerdo no estarlo...

La sonrisa que se formó en la cara de Derek nunca había sido tan grande, no recordaba haberse sentido tan feliz en años. Con Stiles allí frente a él con una sonrisa igual de grande, confesándole que correspondía sus sentimientos, no pudo evitar lanzarse hacia adelante atrapado aquellos labios que tanto anhelaba besar. La sensación de los suaves labios de Stiles contra los suyos le supo a gloria, sobre todo cuando el castaño correspondió el beso, eran tan dulces y cálidos.

Para Stiles todo fue muy rápido, primero vio como Derek se acercaba y luego sintió los labios de este presionando los suyos. Se sorprendió, pero rápidamente se dejó llevar, no había besado a muchas personas, pero podría decir que nunca había sentido tantas emociones y sentimientos a través de un beso. Los labios de Derek moviéndose al compás de los suyos le transmitían no sólo amor, sino que una tranquilidad y una paz infinita, además de mucha, mucha felicidad. Porque allí frente a el besandolo con devoción estaba el hombre que había amado profundamente durante tanto tiempo, aquel que había anhelado que correspondiera sus más intensos sentimientos. Ese hombre lobo tan fuerte y entrañable ante su mirada, que pensó que nunca lo vería como más que un humano, un simple humano que formaba parte de su manada de seres sobrenaturales, le estaba brindando aquello que se había resignado a nunca recibir, Amor.

Se besaron con afán hasta que comenzaron a quedarse sin aire, y entonces terminaron el beso para tomar una gran bocanada de aire, pero ninguno fue capaz de separarse totalmente. Se encontraron uniendo sus frentes, con los ojos aun cerrados sintiendo como la respiración irregular del otro chocaba contra sus labios. Se quedaron así disfrutando del momento, aferrándose el uno al otro como si su vida dependiera de ello, aunque quizás si fuera así. Pensando en todo lo que les esperaba por delante, cosas buenas, no pudo evitar pensar Stiles, al fin cosas buenas.

Luego de ese beso a Derek no le quedaba ninguna duda de que Stiles era su alma gemela, su soulmate, su compañero destinado, su otra mitad. La sensación cálida y vibrante que sentía al estar alrededor de Stiles no la había sentido antes, pero cuando unió sus labios con los del castaño se sintió como fuegos artificiales, no unos pocos, no no, fue como las celebraciones del el 4 de julio y Año Nuevo juntas. Todo a su alrededor se apagó y solo eran Stiles y él, pero sobretodo Stiles, Stiles, Stiles, Stiles. El cuerpo cálido de Stiles contra su pecho, los dulces y carnosos labios de Stiles, las suaves manos de Stiles que acariciaban su cuello, dejando en su piel una sensación cálida que esperaba estuviera acompañado del dulce, fresco y embriagador aroma característico de Stiles.
Aquel que tanto amaba y que le gustaría llevar todo el día sobre su cuerpo, así como, a pesar de parecer egoísta, deseaba dejar su aroma impregnado en el castaño para que todos supieran que ellos se pertenecen el uno al otro y que nadie mas tenia derecho a acercarse de esa forma a él, su castaño, su compañero. No pudo evitar aspirar profundo en busca de aquel aroma que le resultaba tan adictivo, pero entonces solo pudo detectar el vestigio que este había dejado en el ambiente, en su ropa, en el sofá. Pero ya no estaba, entonces recordó el brazalete que ocultaba aquella fragancia que amaba, abrió sus ojos y se separó lentamente de Stiles, para tener una vista de todo su rostro, esta acción hizo que el castaño también abriera sus ojos y lo mirara, por lo que se decidió a hablar.