Saga Rápidos y Furiosos. [ Y Mark Wahlberg]

~ 14. Brasil. ~

Supimos por boca de viejos contactos que Vince se fue a vivir a Brasil, logré contactarlo tiempo después de dejar EUA y me aseguró que nos podía recibir en su hogar.

Fue así que llegamos a Brasil por la noche. Mark y yo nos turnábamos para manejar, hasta que finalmente llegamos por la noche con Vince. Estacionamos el auto y él nos recibió.

-Jessy!... -me saludó con un gran abrazo.

-Hola Vince... -acepté muy feliz aquel gesto. -Cuánto tiempo sin verte... -le digo después de separarnos.

-Sí... es increíble... Mark, viejo, también es muy bueno encontrarte de nuevo, me alegra que estén bien... vengan, pasen, pasen... -nos recibe en su casa. -Ella es mi esposa Rosa... -nos presenta muy feliz. -Y nuestro hijo Nico... que está dormido pero mañana lo conocerán... -nos dice emocionado.

-Es un placer... -le digo a Rosa en portugués.

-Seguro deben estar cansados... su habitación ya está lista, vengan... -nos dice a Mark y a mí y nos guía entonces a un cómodo cuarto.

-Muchas gracias... -le agradece Mark y ella se va.

-Gracias Vince, que gusto verte tan bien y que maravillosa noticia que hayas formado una familia... -le digo feliz, viendo a un hombre cambiado.

-Buenas noches... - dijo al final y nos deja a solas.

Nos acomodamos en la cama y dejamos que el sueño nos invadiera poco a poco.

[[[Al día siguiente... ]]]

Despertamos a buena hora de la mañana, nos reunimos con Vince y su familia en el comedor y desayunamos juntos. Pude conocer al pequeño Nico y después él y su madre fueron a comprar unas cosas de despensa, me ofrecí a acompañarla así que le ayudé con las bolsas de mandado mientras ella escogía la comida y cuidaba a su pequeño. A la tarde regresamos a casa y entonces nos topamos con que Mía y Brian acababan de llegar.

-Jessy!... - me saludó Brian.

-Hola... Que gusto volverlos a ver!... - le digo cuando nos abrazamos y luego hago lo mismo con Mía. A ella la meso un poco mientras la abrazo. - Los extrañé mucho... - admito.

-También nosotros a ustedes... - responde Mía.

-Y Dom?... - pregunta Brian a Mark.

-Aún no llega... - responde levemente.

-Cuándo fue la última vez que hablaron con él?... - preguntó esta vez Mía mientras nos adentrábamos a la casa.

-Hace unos días, dijo que ya venía para acá pero que estaba en Ecuador, así que... - le explicó honesta a Mía.

-Bueno, llegará pronto... - responde leve Brian.

-Tienen hambre?... - les pregunto.

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Mía y Brian se sentaron a comer como salvajes, me pregunté cuánto tiempo llevaban sin comer pero no le di muchas vueltas al asunto. Al terminar ayudamos Mia y yo con los trastes hasta que el pequeño Nico se quejó de sueño, Rosa lo fue a acostar y Mia la acompañó, yo me quedé con los hombres en la mesa que estaban tomando una cerveza.

-Que lindo niño tienes... -le digo a Vince sonriente.

-Gracias... -bebe de su cerveza y repito su gesto con la cerveza de Mark. Me encontraba recargada en él mientras rodeaba levemente mi cintura con un brazo y la otra sostenía su bebida.

-Por qué Río Vince?...-le pregunta de repente Brian.

-Porque gracias a ti todo se fue al caño en Los Ángeles para mí... -admite él totalmente serio. -Terminé recorriendo toda Sudamérica, cayendo cada vez más bajo... -nos mira levemente a Mark y a mí. Sólo escuchábamos atentos a su historia. -Hubiera seguido así de no ser por Rosa... -dice finalmente.