MENTES RETORCIDAS [Yeonbin]

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——Mañana mismo me hago hacer mi camiseta de #TeamYeosang, lo juro.

——Te amo, pero a veces de verdad me pregunto cómo naciste tan idiota -——dijo Soobin.

Beomgyu entornó los ojos dando una suave risilla.

——Te quejas de que no me emociono cuando me cuentas las cosas, pero cuando lo hago, también te quejas, ¿quién te entiende?

——Deja de burlarte de mí ——se quejó con un adorable puchero adornando sus labios ——. Justo ahora me estoy arrepintiendo.

——¿De contarme o de no saber poner límites?

——Ambos ——bufó.

——Mira, como el mejor amigo que soy, te voy a decir las cosas claras ——Calló un momento para mirar atentamente a Bin en lo que lo señalaba con su índice ——. Aprovecha la oportunidad y quédatelo ——dijo como si lo que salió de sus labios fuera la mejor maravilla de mundo.

——¿Ah? ——preguntó el menor con una mueca disgustada ——¿De qué estamos hablando?

——De tu preciado hyung ——contestó con obviedad.

——¿Cómo que quedármelo? Eres idiota, ¿no? ——Exhaló sin paciencia ——Primero que nada, no hables de él como si fuera un juguete o un premio. Segundo, puede que me guste un poco, pero no es nada a comparación de lo que siento por Ye-

——"Yiinjin hying" ——remedó con fastidio ——. Ya sé, maldita sea ——Beomgyu resopló entendiendo que ese pequeño idiota enamorado era imposible ——¿Sabes? Mejor no hablemos más del cabeza avatar porque estoy de buen humor y me gustaría permanecer así hasta irme a casa, gracias.

Soobin asintió con lentitud, suspirando del estrés por no saber que hacer. Cada vez era más difícil hablar con Beomgyu sobre lo que lo hacía feliz o no. Sabía que su mejor amigo tenía buenas intenciones, pero el que solo se molestara o lo criticara cada vez que intentaba contarle sobre ellos o pedía consejo, Soobin en realidad solo terminaba sintiéndose tonto, culpable y un poco más incomprendido por el mundo.

Había sido una semana complicada para Soobin.

Él ni siquiera lo había pensado a fondo, pero podía sentirlo todos los días, y joder, como lo odiaba, como odiaba sentirse agobiado apenas abría los ojos por las mañanas, como odiaba tener que comer incluso cuando extrañamente todo el día se sentía inapetente, como odiaba tener que estar trasnochándose por tareas que él mismo había decidido posponer por la falta de ganas y motivación de todo, como odiaba sentirse tan apagado todo el jodido tiempo.

Él sabía que se sentía de la mierda y que tal vez estuviese depresivo, pero no quería cuestionarlo demasiado porque si no, sería real, y no podía serlo. 

No sabía exactamente cuál era la razón de ese estrangulante y repentino vacío en su pecho; si era el exceso de tareas, si era el estar comparándose constantemente con absolutamente todos últimamente, incluso Gyu, si era el hecho de que sentía que había perdido a su mejor amigo por la falta de confianza, tal vez era ese sentimiento de culpa de haber jodido la amistad inocente que tenía con Yeosang a pesar de que no hubiera cambiado nada desde aquel bizarro día, quizá era porque sentía que había perdido a su hermano, quizás era porque Soobin siempre quería cosas que sabía que jamás podría obtener, quizás era porque se sentía más solo que nunca por tener que guardárselo todo, ya no sintiéndose cómodo compartiéndolo con quienes solía contar, quizás era porque se sentía una basura insuficiente.