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Alfa y Omega estaban en una cafetería artesanal, disfrutando de la variedad de cafés que ofrecía el establecimiento.

-¿Te gusta ese café con leche?- Preguntó Draken observando a Takashi a su lado.

-Me parece muy rico el sabor, hace tiempo no había probado este tipo de bebidas.- Contestó el omega.

Ambos tomaban su café en silencio, que era muy relajante para ambos, distraerse de la bulla de sus amigos y familia, simplemente los dos compartiendo momentos de calidad juntos. Aunque estaban muy tranquilos ,Ken estaba nervioso de lo que le iba a pedir a Mitsuya.

Su relación tenía la duración de casi 6 años, el 18 de noviembre era su aniversario oficial. Ryūguji tomó la mano de su pareja con delicadeza acariciando un poco la mano con su pulgar. Mitsuya le sonrió, teniendo un pequeño sonrojo en sus mejillas.

-Te amo- Susurró al contrario.- Después de lo que sucedió con Emma pensé que me costaría encontrar el amor. Me alegra que...esa nueva oportunidad para amar sea contigo. - Ken se veía algo inquieto y eso era intrigante para el peli morado.

-A mi también me alegra poder estar contigo porque te amo...-Sonrió Mitsuya.- ¿sucede algo? Te veo algo nervioso.

-Yo...

-¿Tú...?

-Yo quisiera que me dejaras marcarte, quiero ser tu alfa y que tu seas mi Omega.- Habló Ryūguji, sentía que un peso se le iba de los hombros, sus mejillas ardían.

Takashi se quedó sin habla, sus pómulos comenzaron a hacerse rojos por tal propuesta. Sabía que el lazo era algo muy importante, además de ser un gran paso en una relación, tenía nervios.

-No te voy a obligar a aceptar -Comentó Draken al ver que no había respuesta.-, porque también es tu decisión unirte a mi. Si no deseas que haya un lazo no hay problema podemos seguir como hemos estado todo este tiempo...-El alfa comenzaba a Hablar de más por los nervios del momento.

-No, sí quiero crear un lazo contigo, Ken.

Con esas simples palabras el alfa interno de Draken saltó de la alegría, el Omega interno de Mitsuya estaba igual de feliz.

"Celebraron" terminando sus cafés.

Un mes después Mitsuya lucia una marca en su cuello, muchos los felicitaron por ese gran paso en la relación. Junto con esa marca la promesa de amarse hasta que la muerte los separara.

[...]

Ken no sabía como todo sucedió, fue demasiado rápido todos los acontecimientos. Desde su llegada a casa  y su ida al hospital con Takashi.

Era algo desesperante no poder tener información desde hace 4 horas, ¿Qué pudo suceder? ¿Qué desencadenó todo esto?, en la mañana su esposo estaba feliz con muchos ánimos y ahora estaba en el hospital por malparir* donde su vida corría peligro y la de su bebé también, no sabía cuánto tiempo pudo estar encerrado en ese estado, todo era muy estresante.

-Señor -Una enfermera tocó su hombro.- Le sugeriría que por favor controle sus feromonas, esta incomodando a los demás pacientes, se que puede estar triste pero por favor trate de estar tranquilo.

-Sí, discúlpeme...-Draken suspiró, no ganaba nada poniéndose triste en ese momento,  debía estar alerta para cualquier cosa.

-¡Ken-chin! ¿Cómo sigue Mitsuya?- Preguntó Mikey mientras se acercaba con Takemichi.

-No hay ninguna novedad por el momento...

Takemichi se acercó a Draken y lo abrazó en forma de apoyo moral, no sabía que decir así que prefería hacerle saber que estaba para él.

30 minutos pasaron para que un doctor saliera, llamando a la familia de Takashi Ryūguji. Draken, Manjiro y Takemichi se acercaron al hombre, todos deseando buenas noticias.

-El señor Ryūguji está estable, logramos detener el sangrado interno y externo, la bebé está en excelentes condiciones para ser ochomesina. Tengo dos noticias importantes. La primera es que para lograr ayudar al paciente tuvimos que extraer su utero omega, así que no podrá tener más hijos. La segunda es que tal vez el paciente rechace a la bebé, que su Omega interno no la reconozca como su cachorro, pero todo eso se puede arreglar con terapia psicológica, no aseguro que su omega tenga la conexión al 100% pero al menos querrá a la niña. Dicho esto, me retiro una enfermera les avisará cuando pueden verlo a él y a la bebé.

Draken estaba feliz de no haber perdido a Takashi y que bebé este bien, no le importaba si ya no podían tener más hijos lo único que le importaba era que estaba bien su esposo. Y por otra parte estaba triste del rechazo que podría presentar el Omega hacia su bebé.

Pero a Ken no le importaba los obstáculos, mientras logré estar como familia con su esposo e hija.

Porque los quería a ambos...
















Malparir: En este mundo omegaverse que manejo este término se usa cuando un Omega en cinta entra en labor de parto por el estrés de alguna situación, lo que genera el malparir es que la bolsa  donde se encuentra el bebé dañe el interior del utero, la mayor parte de omegas que sufren de eso no pueden tener hijos otra vez, aún si conservan su utero omega, para tener un ejemplo 1 de cada 100 omegas que malparieron(conservando su utero)pudieron embarazarse otra vez.

Gracia por leer.

Dulce Amor [DrakeMitsu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora