Dulce Amor [DrakeMitsu]

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"El amor se construye, una familia debe tener una buena base para no caer al primer problema"

                               -????

Takashi terminaba de peinar los cabellos largos de su mayor hija, Ken dibujaba junto a Ash. Toda la familia estaba en la sala, donde la calefacción los calentaba ese frío día de otoño.

El ambiente era sereno, la música que sonaba de la radio era un acompañante. Muchos pensarían que era aburrido estar en casa pero para la familia Ryūguji-Mitsuya era lo mejor del tiempo. Podían estar todos unidos jugando, conversando,viendo alguna película o cocinar en familia. Ken y Takashi amaban pasar tiempo con sus menores hijos, no era algo que ponían hacer con mucha frecuencia ya que sus trabajos consumían una parte importante del día, y sus hijos iban ya a la escuela y jardín, donde también pasaban mucho tiempo.

Así que apreciaban mucho esos momentos familiares, sin tener que correr contra el reloj.

-Papi. - Llamó Ash dejando de pintar.

-Dime, corazón. -Respondió Takashi, amarrando la trenza de su hija.

-Te hice un dibujo.- Dijo sonriente el menor y se levantó para ir a mostrarle a sus papi.

El peli-lila miró el dibujo y sonrió, aunque no estaba bien hecho era hermoso,  por el cariño y empeño que su hijo había puesto en el, y eso lo hacía hermoso.  Agarró el dibujo observando de más cerca.

-Me encanta, Ash, lo voy a poner en un cuadro en mi habitación. -Dijo Takashi.

-¡Papá, a papi si le gustó mi dibujo! - Dijo emocionado el menor hacía Ken.

-¡Ash, a mi también hazme un dibujo!- Dijo Emma levantándose del lado de su papi y yendo con Ash a la mesa a dibujar.

Ken se acercó a su esposo y se sentó junto a él. Ambos mayores se agarraron de la mano, viendo a sus hijos reírse y hablar  mientras dibujaban. Takashi suspiró esbozando una sonrisa y Ken miró a su pareja.

-¿Sucede algo? -Preguntó Ken.

-Me gustaría que nunca crecieran pero es imposible, los años pasan, ellos crecen y forman su propia línea de vida.

-¿Te gustaría tener otro bebé?- Preguntó Draken con curiosidad, había estado pensando hace tiempo la posibilidad de adoptar a otro niño, pero nunca había podido plantear el tema a Takashi.

-¿Crees que podamos? Emma tiene 12 años está por entrar a la adolescencia, Ash tiene 6 años y está comenzando a descubrir más el mundo, el bien y el mal y debemos estar para ambos para poder guiarlos. - Habló Mitsuya viendo a su esposo.

-Pudimos con la llegada de Ash a nuestras vidas, podemos con otro niño. Pero también es tu decisión, no te voy a presionar. -Sonrió Ken.

-Gracias, Lo pensaré. - Mitsuya dio un beso en la mejilla a su pareja, levantándose y yendo con sus hijos.

Draken imitó las acciones de su esposo amado.

-¡Papás! Ash dice si podemos hornear galletas. -Emma informó sonriente.

-Es que dijeron que los tíos iban a venir, y a Eiji le gusta las galletas.- Dijo tímido el niño rubio.

-Entonces hay que ponernos en marcha, vayan a lavarse las manos y los esperamos en la cocina.

Ambos menores fueron a lavarse las manos mientras la pareja iba a la cocina a sacar los ingredientes necesarios y utensilios también.

- Parece que a Ash le agrada mucho Eiji. - Comentó Ken.

-Sí, se llevan muy bien, parece que se conocieran de hace mucho tiempo.

Su platica fue interrumpida por los dos menores que llegaron corriendo, fueron subidos a una silla cada uno para que alcancen bien la encimera.

Ken y Ash hacían galletas de chocolate.

Takashi y Emma hacían galletas de naraja. 

El cocinar se les hizo muy divertido a los niños, que estaban llenos de harina en sus ropas y cara. Los adultos comenzaron a limpiar a los niños para que pudieran ir a jugar mientras se hacian las galletas. Los niños se fueron y la pareja quedó a solas.

Terminaban de limpiar los utensilios que habían usado cuando la alarma del horno sonó y lo apagaron, dejando que las galletas se enfriaran en la mesa de la cocina.

-Mmm, Tenemos que comprar más ropa y unos cuantos juguetes más. - Comentó Mitsuya viendo a Ken.

-Pero si ayer les compramos ropa y juguetes a los niños.- Dijo Ken algo confundido.

-Eso es de ellos, debemos comprar ropa y juguetes para el otro niño o niña que vamos  a tener ,¿No?

Y todo tuvo sentido para Ken que alzó a Mitsuya sorniendo.

-¿En serio?

-Muuy en serio, vamos a adoptar a otro niño o niña. - Dijo Mitsuya siendo bajado por Ryūguji.

-¿Va a ver otro hermanito? -Preguntó Emma, curisosa, que estaba junto a Ash.

-Sí, ¿Les gusta la idea? - Preguntó Ken.

-¡Siii! -Dijeron ambos.

-Habrá otra persona con quien jugar.- Habló Emma.

La pareja sonrió.

La familia iba a crecer.