Capítulo 29

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Helena despertó aturdida, una pequeña gota de agua caía en su frente conforme pasaban los minutos, abrió sus ojos con molestia y se percato de que estaba en una celda

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Helena despertó aturdida, una pequeña gota de agua caía en su frente conforme pasaban los minutos, abrió sus ojos con molestia y se percato de que estaba en una celda.

—Al fin despiertas -una grave voz llegó hasta sus oídos, miró a todos lados y en una esquina vio a una mujer de cabellos blancos que tapaba su rostro, la voz volvió a llamarla— puedes agradecer me luego, te he salvado de Zeus.

—¿Salvación? Ya sufrí por su culpa -escupio con rabia.

—¿Y acaso no quieres venganza?

—¿Venganza? -susurro ella.

—Si, Venganza, tu me ayudas, yo te ayudo. -Helena lo miró sin entender. —Preguntaras quién soy y por qué de esto.

—Exactamente.

—Soy Cronos, Helena y quiero vengarme contra Zeus.

—¿Y de que serviría yo?

—Permite me contarte una historia -el se dejó ver, Helena tembló levemente pero tomó valor y se acercó a las barras de la celda, Cronos estaba en huesos y su rostro era escalofriante.

>> Hace siglos nació una pequeña niña fruto del dolor... su padre violo a su madre en dos ocasiones y la esposa de este maldijo a la pequeña inocente.

Helena lo vio sin entender, pero siguió repasando sus palabras.

—La diosa maldijo a la niña, la cuál tenía el poder de lanzar maldiciones y la cual podía acabar con los dioses si se lo proponía, Helena, Zeus violo a tu madre y Hera te maldijo antes de nacer. -la rubia abrió sus ojos con sorpresa — pero yo no diría que Hera te dio una maldición, tu desgracia reside en la locura de tu padre, Hera sólo te dio aquello para acabar con el.

—¿Mi padre?

—Si, no tuve suerte con ninguno...

—¿Quién es mi madre? -Cronos le sonrió siniestramente.

—Leto te escondió por años y te mantuvo siendo una bebé, pero Zeus la busco por todos lados y tuvo que salir, te entrego a Hefesto... supongo que tratar de evitar la desgracia te acercó más más ella.

—¿Leto? -susurro.

Podía recordar las veces que  Lego la visito y le regalo buenos consejos.

Tal vez pudo evitar aquello quedándose bajo el cuidado de su madre, pero prefirió dejarla con personas desconocidas.

—Helena, ¿me ayudaras en esto? Zeus merece morir por lo que te hizo -Helena lo miro.

—Si -pronunció soltando una escandalosa risa— quiero matarlo, merece sufrir por todo lo que me hizo.

—Elección correcta.

—¿Que debo hacer? -Cronos sonrió y comenzó a contarle su plan.
























La Diosa De La Maldición © Donde viven las historias. Descúbrelo ahora