1 mes después.
El hermoso vestido blanco con cadenas de oro, hacia resaltar su figura, sus piernas largas estaban cubiertas por una hermosas sandalias de oro, su cabello había sido recogido de forma perfecta por las ninfas, una hermosa corona de oro (también) fue puesta de forma delicada en su cabeza, las ninfas iban y venían con joyas, perfumes y aceites para ella.Miró su reflejo en el espejo y pudo jugar que la bendición de Afrodita ese día estaba saliendo a la luz, pero su triste mirada arruinaba el paisaje, se sentía infeliz, rota, vacía. Un mes lejos de su hermano Hefesto, un mes recibiendo amenazas de Afrodita, soportando las insinuaciones de Zeus, pero se sentía protegida gracias a los gemelos, Phobos y Deimos habían comenzando a llamarla mamá, cosa que la sorprendió mucho.
—mamá la cena esta lista- la voz rasposa de Deimos la sacó de su lectura.
—¿cómo dijiste? -lo vio sonrojarse.
—eso estuvo mal
—sonó muy bien -sonrió con ternura y le hizo señas para que se acercará.
— nunca llame mamá a nadie, y creí que podía hacerlo contigo, eres muy amable y cariñosa con nosotros, evitas que Ares nos regañe, ¿puedo hacer lo? -los ojos de cachorrito que le dio el dios del terror le encogió el corazón y con una enorme sonrisa asintió.
— si puedes, tu y tu hermano -el sorpresivo abrazo del terror la hizo sonreír más y desde ese día los tres se habían unido más.
—¿Lista mamá? - Helena sonrió al verlos a ambos vestidos para la ocasión.
—Si mis niños -se acercó a ambos y se enrollo en sus brazos — No la verdad no, no deseo pasar toda una vida atada a su padre.
—Lo sabemos, aún podemos huir -dijo Phobos con una sonrisa.
—Sabes que no puedo, este brazalete me une a la bestia.
—Al menos nos tienes a nosotros. -Deimos beso su mejilla y los tres salieron directo al salón principal.
Hera había decorado todo lo mejor posible, todos los dioses habían asistido a tal evento, no todos los días el Príncipe heredero se casaba, Helena miró nerviosa a todos lados y fingió una sonrisa al ver la cara seria de Hera.
Su corazón se entristecio al no ver a Hefesto ahí, deseaba ver a su hermano, a lo único que le recordaba que alguna vez estuvo viva.
Al llegar al altar miró a Ares, este sonreía tan grande que la rubia temió que su rostro se trabara.
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La Diosa De La Maldición ©
Fiksi PenggemarSerás la diosa de la mala suerte y te irá mal en todo lo que desees. #1 en Olympus. #1 en Olimpo #1 en Hades #1 diosesdelolimpo #1 en dioses #1 en inframundo Hermosa portada por a @aphorie Prohibido todo tipo de copias y/o adaptaciones sin mi permi...