Azul agua

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El azabache escribía tranquilamente con sus plumones lo que estaba escrito en el pizarrón, necesitaba su plumón azul agua purificada con sabor a chicle, buscó en su estuche y frunció sus cejas al no verlo. Gruño al recordar quien tenia dicho plumón.

-¡Wang Yibo, dame ahora mismo mi plumón azul agua purificada con sabor a chicle! -gritó, todo el grupo se quedo en silencio mirando al pálido, hasta el profesor dejó su chisme con el profesor de historia para mirarlo.

-Primeramente, querido Zhan. El agua no tiene color, y segundo, ¡Perdóname! ¡Juro que lo tenia aquí pero no lo encuentro! -comenzó a sollozar temiendo por su vida ¿Y quien no? La mirada del pálido era como ver directamente los ojos del señor del infierno, más con su ojo tembloroso y la vena de su cuello sobre saliendo. 

-Pss, Yibo, amigo-llamó Cheng a su lado. -Fue un placer conocerte.

-¡Mira, estúpido! -se paró  de su asiento y lo apuntó con su  pálido dedo. -¡Te pasé que perdieras mi plumón verde pasto de Peppa pig edición brillitos con olor a uvas silvestres, pero este no, ¿sabes lo jodidamente difícil encontrar ese plumón?! ¡Claro que no! ¡Te la pasas por la vida perdiendo mis poderosísimos plumones desde primaria! -enojado y con la llama del coraje estaba dispuesto a golpear a ese estúpido si no fuera por el futbolista del grupo, Liu Haikuan, quien lo tomó de los hombros con sus fuertes brazos evitando aquella pelea. -¡Suéltame pendejo, apestas bien culero! -este se separo he hizo que Zhan volviera a tomar asiento. -¡Esto aún no se acaba, ¿Me oíste, pendejo?! -gruño.

-Agradecido con el de arriba. -susurró Cheng abrazando al castaño, este con un puchero seguía anotando los apuntes.

-Bueno chicos, sigan con lo suyo, ya no hay nada que ver. -habló por primera vez en aquella hora el profesor.

-Viejo pendejo, ¿por que no se metió en la pelea? ¡Pudiste haber muerto! - se quejo el castaño. -por suerte Haikuan se apareció en el momento indicado. -suspiro. -¿ves? Por eso lo amo. -sonrió, miró como su castaño amigo ponía los ojos en blanco.

-Cállate y pásame los apuntes de matemáticas. -susurró el castaño pensando en cómo solucionaría el enojo de Xiao Zhan.

Zhan caminaba dando enormes pisotones y gruñía, a su lado Haikuan, su primo, le decía que no se debía de enojar por esos plumones, que igual en cualquier papelería podía encontrarlos

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Zhan caminaba dando enormes pisotones y gruñía, a su lado Haikuan, su primo, le decía que no se debía de enojar por esos plumones, que igual en cualquier papelería podía encontrarlos.

-¡Es que no entiendes,  Kuan! Ese color de plumón se vendió aquí en menos de un día y solo eran dos estuches! ¡Además es un color muy raro de conseguir! -alegaba, Haikuan rodó los ojos, no entendía la obsesión de su primo por esos plumones.

-Todos tus plumones son raros, por ejemplo. -le quitó el plumón que tenia en la mano. -¿Rosa atardecer en el campo con olor a tabaco? ¿Qué es esto? -Zhan gruño arrebatándole el plumón.

-Es un color muy común, ¿sabes? Hasta la profesora de matemáticas lo tiene. -gruño. -¿No tienes que ir a un partido o algo así?

-¡Cierto! -le devolvió la mochila y le dio un rápido abrazo. -Adiós, zhanie, nos vemos luego, le dices al profe que fui al entrenamiento. -se despidió y luego salió corriendo.

-No, ahora se jode por insultar mis poderosísimos plumones. -gruño por milésima vez en el día.

-¡Zhan! -escucho como alguien le llamaba a sus espaldas, se giró y miro con su ceño fruncido al castaño ahora frente a él. -Ten. -le extendió una bolsita negra con una tierna sonrisa, el pálido con duda la tomó, miró brevemente al azabache y abrió la bolsa, sus pequeños ojos se abrieron, en esa bolsa habían cómo un chingo de plumones azul agua purificada con sabor a chicle.

-¿Cómo...? -apenas pudo pronunciar esa palabra.

-Tengo contactos. -le sonrió y guiño el ojo, le revolvió con su grande mano los cabellos azabaches del pálido y se fue dejando a un Zhan en shock, es que, wey no mames, ¿Dónde  consiguió los plumones? ¿Asalto una papelería de parís o que?

¡Devuélveme mis plumones, Yibo! / 𝐅𝐢𝐧𝐚𝐥𝐢𝐳𝐚𝐝𝐚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora