𝘩𝘢𝘪𝘬𝘺𝘶𝘶 • 𝘰𝘯𝘦 𝘴𝘩𝘰𝘵𝘴.

30 • Oikawa Tooru •

𝑜𝑛𝑙𝑦 𝑦𝑜𝑢

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Entonces, ¿hace cuanto están juntos?- Sugawara preguntó luego de tomar un sorbo de su bebida.

-Tres meses.- Respondiste.

Todo el instituto acababa de enterarse de tu casi secreta relación con el capitán del Aoba Johsai y ahora tus amigos te estaban interrogando.

-¿¡Tres meses!?- Tanaka y Nishinoya dijeron a la vez, una clara mueca de indignación se formó en sus rostros.

-¿Tres meses y no nos dijiste nada? ¿Ni si quiera a mi? ¡Tu mejor amigo!- Suga estaba igual de indignado.

-Lo siento, debí decírselos.- Estabas avergonzada por toda la situación, y aun más al recordar la escena que monto Oikawa hace unos segundos.

-Bueno esta bien, tampoco era tu obligación contarlo.- Daichi tocó tu hombro y sonrio amablemente sacando su instinto paternal.- Aún así me gustaría saber como paso.

-¿Recuerdan el partido de práctica que tuvieron contra el Aoba?- Asintieron.- Bueno, Kiyoko me pidió si podía quedarme yo a ayudar ya que ella tenia algo urgente que hacer. El punto es que, no se como ni cuando, pero, terminamos solos en la cancha.

-¿Y lo hicieron?- Interrumpió Nishinoya.

-Que imbecil eres, no se como aún somos amigos.- Golpeaste despacio su frente- Hablamos, solo eso. Lo cual fue sorprendente porque no creí que fuera de esa manera, supongo que esperaba que fuera engreído o algo parecido. A partir de ese momento mágicamente comencé a encontrármelo en muchos lugares... luego me entere que no era casualidad y el me estaba buscando.

-Eso es un poco acosador.- Tsukishima acababa de unirse a la conversación junto con los otros chicos de primero. Al final todo el equipo estaba allí.

-¿Si verdad?- Le diste la razón al rubio.- Y también un poco tierno, viniendo de él.

-¿Y el escándalo que hizo el gran rey por qué fue?- Preguntó con curiosidad el pelinaranja.

-Por esto.- Enseñaste tu teléfono. Treinta llamadas perdidas y más de cien mensajes suyos sin responde.- No le respondió porque estaba en clase, creyó que lo estaba ignorando y ya no quería estar con él.

-Para ser tan popular entre las chicas es bastante inseguro.- Agregó Sugawara.

Ibas a responder a lo que tu amigo había dicho pero la repentina aparición de Oikawa te detuvo.

-Si fuera de este colegio me hubiesen expulsado, pero en cuanto vieron quien era me dejaron ir.- Explicó con su típico tono de superioridad.- ¿Vamos?- Preguntó estirando su mano hasta tu lugar.

-Claro.- Tomaste tu mochila y te despediste de los chicos.- ¿Es necesario que caminemos de la mano?

-Por supuesto.- Respondió.- Quiero que sepan que eres mi chica. Además, no confío que estés con Tobio-chan, si confío ti pero en el...

-¿Estas bromeando? ¿Kageyama?- Comenzaste a reír con solo imaginarte un escenario en que Kageyama quisiera insinuarse.- Creo que lo único que hay en su mente es volleyball y ganarle a Hinata a toda costa.

-No lo se... también hay otros chicos y chicas que seguro quieren estar contigo.- El agarre de su mano se intensificó y ahí fue cuando pudiste entender lo que sucedía. Inseguridades.

-Hey, mira esto.- Levantaste tu mano a la altura de sus ojos. Los anillos que cubrían tus dedos relucian con el, y sobre todo resaltaba aquel lugar faltante en donde no había ninguno de ellos.- ¿Sabes lo mucho que me gusta usar anillos verdad?

-Claro, si te los olvidas te pones de mal humor todo el día.- Dijo.- ¿Por qué?

-¿Ves este lugar vacío?- Asintió.- Lo estoy reservando para ti. Algún día, y estoy segura que va a pasar porque no pienso dejarte ir, ahí estará nuestro anillo de matrimonio. Solo para ti.

El rosa de sus mejillas y el brillo de sus ojos junto con la brisa que movía su cabello creaban un escenario precioso, casi tanto como el.

-¿Solo para mi?- Preguntó mientras acariciaba tu mejilla.

-Solo para ti.