𝘩𝘢𝘪𝘬𝘺𝘶𝘶 • 𝘰𝘯𝘦 𝘴𝘩𝘰𝘵𝘴.

18 • Aone Takanobe •

𝑠𝑤𝑒𝑒𝑡 𝑘𝑖𝑠𝑠

⁺˚*･༓☾ To: NathalyPerezGuerrero ☽༓･*˚⁺

Tu novio en general siempre había sido callado y poco extrovertido. Nunca lo habías oído decir más de dos oraciones, y la mayoría de sus conversaciones era tu contando una historia enredando te miles de veces al hablar y cambiando de tema cada dos segundos, pero a el le encantaba oírte.

El como se conocieron no era muy interesante, simplemente te viniste como mánager al club de volleyball y ahí lo viste por primera vez.

Siempre te pareció atractivo y algo misterioso, nunca habían hablado demasiado en los meses que compartían club así que cuando se te acerco con sus mejillas algo sonrojas mientras sus amigos le daban apoyo moral desde atrás y se declaró con una carta demasiado tierna había hecho que sintieras esa sensación en el estomago que llaman "mariposas".

Ya llevaban unos cuatro meses de relación, todo marchaba bien y perfecto. Cada día descubrías algo nuevo de el, era realmente una caja de sorpresas, esto hacía que te enamorarás cada día más.

Todos los viernes hacían "noche de pijamada" pasaban toda la noche hablando, comiendo, jugando algún que otro juego de mesa y veían películas. Hoy era viernes y no sería la excepción.

Estabas frente a el, ambos sentados en la cama, con sus pijamas puestos mientras le colocabas una mascarilla en su rostro. Tomabas el pincel y pasabas delicadamente el producto por su rostro mientras le contabas sobre el pésimo día que habías tenido, indigna y algo enojada relatabas como un profesor había anulado tu trabajo por simplemente hablar de un tema que a el no le gusto.

Seguías con tu historia descargando todo el odio que le tenías en ese preciso momento a aquel profesor, tu rostro estaba muy cerca del suyo ya que querías que todo su cara quede bien cubierta. Cuando estabas a punto de soltar un par de insultos más te detuvieron sus labios dejando un corto beso, ya que eso no era muy propio de el estabas un poco confundida.

-Oh ¿Y eso porque fue?-

-Para que ya no estes tan enfadada. ¿Sirvió?- Preguntó inocente esperando atento a tu respuesta.

-Si, mucho.

Lo abrazaste procurando no ensuciar la ropa con el producto que acababa de colocar, y este correspondió abrazandote por la cintura. Tu corazón latía fuerte por su gestó en querer quitarte el enojo de una manera tan dulce, el realmente era demasiado tierno contigo.

-Tal vez podrías darme más besos para terminar de una linda manera este día.- Le dijiste con tus mejillas algo rojas ya que aun todo era muy reciente entre ustedes.

-Los que necesites.- Fue directo, sin temblor en su voz, pero calido para ti.

Te separaste de su cuerpo uniendo otra vez sus labios en un tierno beso, de los tantos que se dieron esa noche.