La Biblioteca

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Klaus se acercó a Dimitry bobeando y sonriendo de lado.
-No vas a presentarme con mi alma gemela? - esas palabras hicieron que Dimitry observara a su hermano sin saber que decirle.

-Tu... Acabas de decir lo que creo que acabas de decir? O es que ya me he tomado unas copas de más? - dijo riendo burlón.

-Venga, preséntame. Así también podrás hablarle a tu omega y no verlo como si fuera una presa. - le mostró una gran sonrisa a su hermano y cuando Dimitry se disponía a caminar, Alexey giró llamando a Klaus para presentarlo..
El alfa había perdido la oportunidad.

-Ey Klaus ven aquí, te presento a los chicos. - Klaus miró a Dimitry alzando sus hombros y frunciendo su boca. Se dio media vuelta y caminó hasta ellos.

-Buenas tardes, es un placer.-

-Klaus Dietrich, ellos son Sasha y Nicolai, chicos él es nuestro hermano de otra sangre. - ladeó la cabeza señalado a Kalus.

-Es un gusto conocerlos y feliz cumpleaños para ti encanto.- el alfa había girado un poco para ver a Nico directamente a los ojos, era hermoso.

-El gusto es nuestro.- ambos omegas habían hablado a la vez, haciendo reverencias con sus cabezas.
Los alfas se rieron cómplices y les pidieron al igual que Katt, que no lo hicieran.
Esta noche eran amigos y familia compartiendo un momento juntos.
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Franc y Katt se habían idos hacia un rato ya.
Alek, Nico y Sash habían ido a recorrer algunos lugares que Alek amaba de aquella casa, dejando a los alfas viendo un partido de fútbol americano en el televisor...

Unos minutos después Sasha se había quedado varado sólo en una inmensa biblioteca, el sitio más hermoso que sin dudas tenía esa mansión, era aquél lugar.

El omega estaba observando atento cada rincón de la enorme habitación, los sofás, los cuadros de arte, y algunas cuantas fotografías, dos en particular llamaron su atención.

La primera eran claramente los Sokolov, los dos pequeños alfas de niños, sus padres y abuelos.
La fotografía tenía el nombre de cada uno de ellos.
Estaban en un bosque, posiblemente de campamento, y se podían observar las hermosas sonrisas que tenían cada uno de ellos en sus rostros. Simplemente era un hermoso recuerdo.

La segunda foto, era en Italia.
Allí estaban de nuevo los Sokolov pero también habían otras personas, según decía en la escritura, los D'angelo.
Sasha se sorprendió al ver que allí había un hombre muy parecido al que unos años atrás podría haberle dicho que era su padre, pero que hacía con los Sokolov? Quién era el otro hombre embarazado a su lado, tal vez...su verdadera madre?.
Cómo era posible todo esto?.

Sasha necesitaba respuestas, jamás había vuelto a ver a ese hombre, aunque se había ido con la promesa de regresar cunado Sasha hubiera encontrado su destino.
Algo que él omega simplemente tomó como barbaridades, era un pequeño que había logrado huir a este país después de haber atravesado un infierno con su familia y sin ella, y luego un hombre se aparecía diciéndole que era su padre, que tenía un futuro prometedor y un destino que encontrar?.
Dios! era simplemente una locura, o al menos lo era hasta este día...

Había tomado la foto en sus manos sin darse cuenta realmente de ello.
Un ruido se sintió detrás de él así que volteó rápidamente por el susto y se sorprendió al ver a  Klaus y Dimitry parados en la puerta, con bebidas y cigarrillos en sus manos...

-Tu que haces aquí? Y por qué estás sosteniendo eso? - preguntó Klaus visiblemente sorprendido de haberse encontrado allí al omega y por supuesto de que tuviera en sus manos particularmente esa foto.

Sasha miró rápidamente a Dimitry que lo observaba con el ceño fruncido.
-Yo... Lo lamento. Alek nos estaba dando un recorrido y simplemente me detuve aquí. - hizo un gesto con ojos y manos para señalar la habitación.

-Te gusta aquí? - tanto Sasha como Klaus voltearon a hacia Dimitry que ahora se adentraba más a la habitación y más se acercaba cuidadosamente a Sasha.

-mmh.. si, es...un lugar que me trajo paz solo con verlo... Lamento haberme entrometido y...lamento haber sacado esto de su lugar. -
Dijo el omega volteando y dejando la foto colgada donde estaba.

-Conoces a alguien allí?.- preguntó Dimitry expectante. El omega había volteado a verlo y ahora lo tenía mucho más cerca, sentía que su omega interior le estaba pidiendo a gritos que al menos rozara sin querer su cuerpo.

-Yo...no lo sé. - apartó su mirada del alfa y miró en dirección a Klaus.
-Ahí hay unas personas, los D'angelo. Ese hombre me recordó a alguien que conocí cuando recién llegué a Moscú... - dijo señalando está vez la fotografía y al hombre.
-Claramente no puede ser él, solo me recordó a esa persona. No creo que alguien como él o como ustedes tuvieran algo que ver con gente...tan común y menos con aquella edad. - dijo sin más el omega y se disponía a irse pero Klaus habló.

-Mmh... bueno si te gustan la historias... creo que te podría gustar conocer la historia de los D'angelo.- había dicho un astuto Klaus.
-Si gustas, no tomará más de unos minutos. - le indicó con un gesto para que tomara asiento.

Sasha lo dudó un segundo, miró a Dimitry que lo observaba atento desde uno de los sillones de la sala. Su omega deseaba permanecer allí para ver a su alfa y escucharlo decir cualquier cosa que sacara por la boca...
Al final se sentó y decidió escuchar lo que podrían tener para decirle esos alfas, no podía mentirse, el hombre de la foto realmente se parecía al de su recuerdo.
Qué probabilidades habrían de que ambos fueran las mismas personas?

Klaus le preguntó si deseaba beber algo, y terminó aceptando una vaso de whisky al igual que su alfa.
Dimitry por su parte, estaba sentado a escasos metros de él y sólo se había levantado para encender el cigarrillo de su omega..
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Desde que Sasha había llegado no dejaba de sentir esa corriente entre sus dedos y su cuerpo cada que veía al alfa, y lo mismo le estaba pasando a Dimitry, solo que el alfa se había estado sintiendo así desde hacía más tiempo y con mucha más insistencia por parte de su alfa interior.

Con decir que su único pensamiento desde que llegó (vestido esos pantalones azules apretados, esa remera floreada que dejaba ver su pecho y brazos tatuados y esas botas de taco bajos que tanto estilizaban sus piernas y culo), era sacarlo de allí y tenerlo en su cama gritando por él toda la maldita noche.

Bueno... al parecer no era el único que pensaba lo mismo.. La tensión y la electricidad que sentía el omega se sentía a leguas entre ellos.
Sasha lo deseaba, y Dimitry lo deseaba aún más...
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Los tres se sentaron dentro de la habitación fumando y bebiendo, y en pocos minutos Sasha se enteraría de algunas cosas curiosas de quienes probablemente eran sus padres...





(1189 palabras)

>>Holis!! Qué tan malo fue el capítulo? 🤔 🤔 🤔

Caminando entre las sombrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora