Un Destello de paz | [TERMINADA] |

Capitulo 23

Wyatt

Desperté con el cuerpo completamente adolorido, observando el lugar, me encontraba en una habitación de hospital, miré mis manos y tenia puesta la intravenosa, un maldito suero que detestaba por lo lento que caía, me hacía desesperar.

Mirando a mi costado se encontraba ¿Emma?, con sorpresa la observe unos segundos para asegurarme de que realmente era ella, y así fue, estaba ahí dormida en el sofá al lado de la camilla, cubierta por una manta como la que tenia yo en la camilla.

Antes de que pudiera decir algo Dorian entro en la habitación junto a una bandeja de comida.

– ¡Hey! Al fin despertaste – dijo animado, dejando frente a mi la bandeja de comida sobre una de esas mesitas de madera, para el desayuno en la cama.

– ¿Qué hace Emma aquí? – articulé como pude, con la voz ronca, me quemaba la garganta, necesitaba agua.

– Ha estado aquí desde ayer en la noche – me tendió una botella de agua y la bebi toda, estaba sediento.

– Creí que gastarías la misma broma de la última vez que quede inconsciente en el hospital – me observo decepcionado de sí mismo.

– Tienes razón, la pude haber hecho de nuevo y decir que lleva visitándote años – comenzó a reír y en seguida se quedo callado, camino hasta mí y antes de que hablara, caí en cuenta que yo jamás le dije quién era Emma –deberíamos de...

– Espera – lo interrumpí – ¿Cómo conoces a Emma? – cuestioné confuso.

– En primer lugar, tú ya hablabas de tu querida compañera interesante y bueno, lo segundo es que el día anterior a tu huida intenté contactarte y no respondías, fui a tu departamento y ella llego ahí, así que de ahí nos mantuvimos en contacto, estuviste 3 días desaparecido – aclaro y mas dudas entraron en mi cabeza.

– ¿Qué tanto sabe ella de mí? Dime que no le has contado acerca de todos los malditos rumores que hay sobre mi... – lo mire serio y el negó, justo cuando iba a cambiar el tema Emma despertó.

– ¿Qué rumores no se sobre ti? – froto su rostro cansado y yo observe a Dorian sin respuesta, esperando me ayudara a formular una excusa, y así fue.

– Emma, yo te explico – se acerco a ella y se sentó a su lado, aquello me hizo sentir extraño, algo en mi me hacia pensar en decirle aléjate de ella, pero no lo hice y él continuo – Wyatt suele meterse en problemas con el primero que se le ponga en cara y lo contradiga, como ya deberías saber, pues total ha golpeado a algunas personas y se ha generado enemigos, fin.

Tu amigo es tan patético... ¿Cómo demonios lo dejas inventar excusas?

Tal cual una excusa no es, en el pasado golpee a muchas personas, aunque no fue por lo que él dijo, esta bien la excusa para ella.

Emma solo asintió no muy convencida, y se levantó estirándose, para después caminar hasta mi y robar uno de mis bocadillos de la bandeja.

– Oye, eso es mío – la mire fingiendo estar indignado.

– Sabes que, quédatelo, sabe asqueroso – hizo un par de muecas y llevo el resto al cesto de basura.

– Bueno, ahora ni los quiero probar – aleje la bandeja y Dorian la llevo a una mesa a mi costado.

– Iré por comida decente entonces, ¿Quieren algo en especial? – mire a Emma esperando dijera algo, pero al verla pensar demasiado, hable yo.

– Un emparedado de crema de avellana y un mate, ¿Emma? – me miro.