Se suponía que después de ser tan mala persona en la vida, llegaría el momento de pagar por mis malas actitudes, pero no sabía que el KARMA, iba ser tan hija de put* conmigo, que de salir de la vida común ahora este en el infierno junto a LA BESTIA...
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Escape
Aun no puedo creer que me haya comprometido con Carlo, pero al ver el gran anillo reposando en mi mano, no hay duda de ello. Es real.
La fiesta fue hace un mes, he continuado con mis terapias psicológicas y voy mejorando cada vez más, según lo que dice la psicóloga. Todavía no me siento del todo bien, pero si más tranquila, también eh contado con el apoyo de Carlo, que desde el día que nos comprometimos cambio radicalmente su forma de ser conmigo.
Es más atento y amable aun me cuesta decir algunas palabras o solo lo dice en susurro, pero supongo que por algo se empieza.
Sonrío ante la imagen que aparece en frente mío, es una foto de Carlo y yo juntos, la noche de la fiesta de compromiso donde, varios fotógrafos nos abordaron a la hora de la salida. Muchas fotos salieron espantosas pero esta que está en el portarretrato es perfecta. Carlo odia las fotos, recuerdo que se día le dijo a uno de ellos:
"Toma rápido esa estúpida foto que no tengo tiempo".
Dejo el portarretrato en su lugar y tomo el libro que saque del librero. Orgullo y prejuicio. Recién lo empezare a leer. Camino hacia el jardín, Carlo se fue a trabajar y por lo que me dijo no volverá durante el día, tenía muchas reuniones.
Me siento en frente de la piscina, en una de las tumbonas, el calor esta algo fuerte pero es tolerable. Comienzo a leer el libro y quedo embelesada con los primeros capítulos. Me encanta este libro. Me levanto para ir por un vaso de limonada, dejo el libro sobre la tumbona y voy hacia la cocina.
—Betty. –saludo cuando entro
—Señorita ¿Desea algo?
—Oh, no te preocupes... solo una limonada, pero lo hago yo. –digo y me acerco a la refrigeradora, saco la jarra y lo vierto en un vaso.
Me despido y camino hacia el lado de la piscina nuevamente. A lo lejos veo flotando algo dentro de la piscina me acerco más y Joder.
Es el libro que estaba leyendo.
Pero...
Pero ¿Qué pasó?
El libro, no puede ser.
Miro alrededor pero no hay nadie, dejo el vaso sobre la pequeña mesita, un sonido de la parte de los arbustos se hace presente, comienzo a caminar hacia ese lado.
La casa está muy protegida así que no creo, que haya alguien desconocido. Camino hasta llegar hay de pronto una mano tapa mi boca impidiendo que grite. De pronto siento como me empuja al suelo, caigo de rodillas. Volteo y veo a la mujer de aquel día, la prima de Carlo.
— ¿Qué te pasa estás loca? –pregunto con la intención de levantarme, pero ella es más rápida y se sube sobre mí, comienza a jalarme del cabello, trato de defenderme, pero tiene demasiada fuerza.
