"LA CASA ROSADA" (1)

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Rey estaba en una carrera contra relog para llegar a la casa rosada a tiempo. Él seguía saltando casa por casa; hasta que llegó a la última. En esa instancia solo le quedaba cruzar la calle, por lo tanto, eso fue lo que hizo. Cruzó su última reja y finalmente puso un pie en la acera. Lo primero que observó fue decenares de móviles de la A.P.P.A y fuerzas públicas dirigiéndose al lado contrario del que Rey se dirigía. Nadie lo reconoció por su excesivo pelo en la cara y cabeza. Solamente un móvil se dignó a hablarle.

-Por favor, abandoné la zona. Estamos a punto de entrar en combate con el enemigo -Le dice -.

Rey salió extrañado pero contento porque no lo descubrieron. Él siguió con su viaje, solo que esta vez decidió emprender una caminata rápida. No quería levantar sospechas. Rey caminó en el lado contrario de las patrullas y grandes camiones.

-¡Cuidado! -Grita un oficial -.

Inmediatamente Rey se volteó. Ráfagas de balas se expandieron en las calles y principalmente en los oficiales. Los edificios de al rededor estaban infestados de Anfibios. Rey logró identificar alguno que otro por la máscara. Instantáneamente echó a correr. La vida de muchos oficiales estaba en juego y él lo sabía, pero en esos momentos; su vida era más valiosa. Rey corrió sobre la gran avenida, él nunca miró para atrás; pero, se daba una inmensa idea de lo sucedido. Sin mencionar el semejante caos que Rey tenía a sus espaldas, todo iba marchando bastante bien. No había nadie en las calles, "seguramente evacuaron a todos" pensó.
Luego de 10 cuadras corriendo a un paso semi leve; Rey decidió descansar un poco. Sus piernas estaban arruinadas. Su descanso fue caminar, así lograba matar tiempo muerto.

El Disparo De ReyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora