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La llamada de Michael y Sergio finalizó. La policía estaba en camino. Mientras tanto, Rey debía buscar una manera de desaparecer del lugar. Su búsqueda de Sapo debía ser rápida. A él no le importaba el golpe de Estado en sí. A él no le importaba que haya demasiada aglomeración de personas. La verdadera preocupación y el verdadero problema giraba en: "¿Cómo encontrar a Sapo?" Esas preguntas serán respondidas más tarde. Ese lugar no era el adecuado para pensar.

-Marla... Gracias por todo, pero me tengo que ir. Tengo que seguir solo. Necesito seguir solo -Comenta Rey triste -.

Él no quería irse, pero habían muchas preguntas que la policía iba a hacer, y Rey no estaba en condiciones de contestarlas.

-Es una verdadera lástima -Responde Marla-. Argentina se volvió un lugar frío y hostil, va ¿Cuando no fue así? Pero ahora peor que nunca.

Marla acercó su mano a la mejilla del joven mientras su mirada estaba fijada en sus ojos.

-Por favor, cuídate -Dice Marla -.

-Vos también -Responde Rey -.

Se dan un corto pero apasionado abrazo para finalmente despedirse. Rey comenzó a retirarse por la puerta trasera de la casa. Dió un vistazo previo a Marla. No quería separarse de sus bellos ojos. Ella estaba ubicada perfectamente en el centro de la puerta, por lo tanto las ventanas principales lograban enfocar a la calle. Los vidrios plasmaron un gran imprevisto. Decenas de personas enmascaradas y armadas apuntaron con la boca de sus rifles a la casa. Inmediatamente Rey descifró sus personalidades. Todos tenían una máscara de Kevin Spacey y unas ak-47, típico de Anfibios: Rey se agachó desesperadamente, mientras a su vez le advirtió a Marla.

-¡Ey!

Marla, Michael y Sergio miraron a sus espaldas continuamente. La única que logró hacer cuerpo a tierra fue Marla. El Padrino y Michael ni lo intentaron. Solamente permanecían parados. Sergio y Rey se miraron por última vez. Los gatillos fueron apretados y las balas salieron disparadas a una velocidad inimaginable. Los cuerpos de Michael y Sergio fueron baleados. Manchones de sangre pintaron las paredes y muebles. Ante la desesperación del momento, Marla solo atinó a llorar, Rey no estaba muy lejos de hacerlo. Las balas se detuvieron y los cuerpos muertos de Michael y Sergio cayeron al suelo como bolsas de papa

-¡Marla! ¡¿Estás bien?!

Su respuesta fue un poco tardía, Rey ya comenzó a preocuparse.

-¡Sí! ¡Intacta!

Rey dió un gran suspiro, y a través de una esquina dió un pequeño vistazo a la calle. Anfibios se subió a los móviles con el que llegaron y dieron una retirada. Rey agarró su 9mm que se encontraba en el piso y prosiguió a "perseguirlos". Él también salió a la calle, pero fue demasiado tarde. Anfibios ya se habían marchado. La cabeza y la mirada de Rey dió un giro de 180°. En el fondo se distinguían las patrullas de policía. Rey pensó: "sí la llamada a la policía fue real, ¿Anfibios como supo dónde estábamos y a quien matar? Antes de los uniformados lleguen a su casa, Rey entró a la misma y fue directo al teléfono.

-¿Puedo levantarme? -Pregunta Marla -.

-Yo estoy de pie y sigo vivo. Por algo será -Responde Rey -.

Marla se levanta lentamente del suelo, sale a la calle y ve a las patrullas.

-¡Ahí está! Hijos de puta -Expresa Rey -.

-¿Que pasó? -Pregunta Marla preocupada -.

-Había una especie de chip en la parte inferior del teléfono. Seguramente es un mini micrófono. Anfibios lo habrá puesto por si esto pasaba, eventualmente Michael y Sergio iban a morir.

-De todas formas no iban a hablar -Dice Marla -.

Rey ignoró sus palabras, principalmente porque acababa de morir su Padrino. Ni el sarcasmo ni la realidad podía reflejar con claridad la escena. Rey parpadeó 5 veces y prosiguió con su tramo. La 9mm que trae encima solamente constaba de 3 balas. Tenía que hacer que lo valga.

-Rey -Marla lo llama, se la notaba deprimida -.

Rey se dió vuelta y miró a Marla. Él estaba esperando otro sermón.

-¿Por qué querés hacer esto solo? Todos estamos acá por un bien mayor.

Rey no la dejó terminar. Su ira explotó al punto que le dió un contundente cachetazo en la cara a su compañera.

-Manipularon y usaron a mí tío a su propio beneficio, asesinaron a mí hermano, me desterraron de mis orígenes, me manipularon cuando era niño. Mí único propósito de vida es asesinar a los 4 Sapos y a todos sus sucesores. Me da igual morir, por lo menos a un Anfibio mataré.

Rey clavó su mirada con la de Marla, ella por otro lado lo miró con enojo; acompañado de su mano derecha acariciando su mejilla, el golpe le dolió mucho.

-Los voy a matar a todos -Dice Rey -.

Finalmente agarró sus pertenencias y suministros que dejó en el sótano y comenzó a saltar las gradas del patio trasero, casa por casa. Su destino era la casa rosada. Justamente ese día el presidente daba una conferencia de paz y unión. Marla le comentó por llamada; que su ex división planificó unas semanas antes la seguridad del encargado del país. Esto debido a que el gobierno organizó un mensaje para el pueblo desde hace 1 mes. Seguramente allí este: Joel, Carla, Sandro y (por ahí) Marla, y las otras divisiones de la A.P.P.A. Que Rey pase desapercibido será un verdadero reto.

El Disparo De ReyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora