Capítulo 14

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Hola! Espero que todo os esté yendo bien, y si hoy no os lo han dicho, eres suficiente.

GRACE

He estado tres días intentando contactar con Oliver y no he obtenido respuesta.

No quise llamar a sus padres aún teniendo el número de ambos porque tampoco creía necesario preocuparme tanto. Está claro que cada uno tiene su vida y que vamos por caminos diferentes que de alguna forma se juntan en pequeños tramos, pero eso no significa que deba estar detrás de él constantemente.

No quiero que piense que soy una pesada.

Lo que más me llama la atención es que siempre contesta a mis mensajes, da igual la hora, siempre encuentra un rato libre para hablar conmigo, sobre todo por las noches que es cuando mejor me lo paso con sus segundas intenciones y las risas que me saca a pesar de la distancia.

—¿Crees que le haya pasado algo? —Kate camina a mi lado, bebiendo un batido que hemos comprado hace nada.

Hemos pasado gran parte de la tarde juntas. Las clases no nos dieron mucho tiempo así que hemos querido disfrutar un poco antes de volver a casa a estudiar para los exámenes finales.

—No tengo ni idea, pero no es habitual en él, Kate. Sé que suena estúpido pero creo que me está evitando —comento en voz alta y realmente no suena estúpido—. Vaya, quizás esté en lo cierto.

—¿Qué? Claro que no. Gracie, Oliver ha estado contigo desde que le conociste, exceptuando algunos momentos, pero dudo mucho que te esté evitando cuando intenta acercarse a ti cada que puede.

—¿Tal vez se ha aburrido? —jugueteo con mis dedos mientras nos paramos en un semáforo.

—Dudo que se aburra contigo, tienes demasiadas cosas que mostrarle al resto —sonrío y pasa su brazo por mis hombros, acercándome a ella—. Ya verás que ha estado muy ocupado y casi no ha tenido tiempo.

Estos días Kate está siendo un gran apoyo. Bueno, siempre lo ha sido, solo que con esto de Oliver y problemas familiares tenerla a mi lado me ha dado la fuerza suficiente para no darme por vencida.

Kate solo sabe que se pelean y nunca sabrá nada respecto al asunto de mi padre. No me veo capaz de confesárselo aún siendo mi mejor amiga.

Y es que mis padres han vuelto a pelearse, nada nuevo, pero hace semanas no sucedía y tenía la esperanza de que hubiesen dejado de lado las diferencias para ser felices.

Ninguno lo es y me da rabia como se destruyen.

Si no quieres a la persona y los problemas crecen, déjalo. Es posible que sea la persona correcta en el momento equivocado y luego de un tiempo todo sea mejor; es posible que sea la persona incorrecta en el mejor momento de tu vida, pero por miedo a estar sola no le dejes atrás.

Todos somos suficientes, no dependemos de nadie, solo de nosotros mismos. Y sí, hay personas que nos ayudan a sanar, pero debemos aprender a sanar por nuestra propia cuenta para así poder querer de la mejor forma posible.

—¿Y tú con Tom qué tal? —pregunto y suelta un largo suspiro.

Cruzamos al otro lado de la calle.

—Podría ser mejor. Me llevó a casa el día que te fuiste con Oliver y me trató muy bien. Estuve a nada de dar el primer paso de no haber sido por su teléfono. Además, tampoco estaba tan cercano como otras veces.

—Mira, si no te hace caso, olvídate de él aún siendo difícil. Sé que encontrás a alguien que te quiera de la misma forma que quieres tú. Es cuestión de tiempo.

Destinada A Olvidarte Donde viven las historias. Descúbrelo ahora