Demasiado brillante → kiribaku

Capítulo 10

Las cosas volvieron rápidamente a la normalidad, aunque Kirishima tendría que acostumbrarse por un tiempo al hecho de tener un yeso en su pierna.

Pero en general las cosas no habían cambiado demasiado, y ese era el mayor problema para Katsuki.

Que a pesar de estar saliendo románticamente con Eijirō, las cosas seguían casi iguales. Ni siquiera habían vuelto a darse un beso.

Sus sesiones de estudio eran las mismas, y en la escuela no ocurría algo demasiado especial.

Y este tenía un plan. Tener una cita con Kirishima.

¿Pero que se necesita para una cita? Dinero.

¿Como lo conseguiría? Trabajando.

Y al ser menor de edad no tenía muchas opciones, básicamente término trabajando de ayudante en una tienda de ropa.

Realmente ni le gustaba la ropa que vendían, hasta alguien como él tenía más estilo.

Pero fue la única que aceptó su solicitud a pesar de ser menor de edad.

— Tengamos una cita — Habló cortando el silencio en que Kirishima completaba unos ejercicios de matemáticas que Bakugou le había puesto.

— ¡¿E-En serio?! — Kirishima parecía emocionado y sus mejillas se veían rojas, eso causó una linda sonrisa en el rostro orgulloso del cenizo.

— Obviamente tonto, ¿Te parece el sábado de la siguiente semana?

— ¿¿Tanto?? — Quejaba — ¿Por que no puede ser este sábado?

— Por que para ese día aún no recibiré mi paga semanal — Golpeó su frente y burló.

— ¿Paga semanal? — Pareciera que ni notó aquel golpecito.

— Empece a trabajar

— ¡¿En serio?! ¡¿Donde?! — Parecía emocionado y curioso.

Solo recibió otro golpecito en su frente.

— No te diré — Katsuki sonrió egocéntrico — Por que sé que eres capaz de irme a ver todos los días allá

Kirishima solo se sonrojo, admitiendo que era la pura verdad. Pero vamos, ¿Quien no quiere ver a su novio haciendo algo como trabajar?

Tal vez no mucha gente pero Kirishima quería.

Solo quejó y ambos rieron, luego continuaron con su tutoría.

☆☆☆

Durante los siguientes días Bakugou después de dar tutoría saldría corriendo a tomar el autobús para llegar a su trabajo.

La tienda estaba dentro de un centro comercial un poco grande, y aún así por alguna razón no había tanta gente en la tienda.

Y aunque él no era fan de atender a los demás –ya que su trabajo se basaba en ayudar a encontrar tallas y ayudar a los clientes– todo valdría la pena.

De solo pensar salir en una cita como Kirishima hacía que se forme una pequeña sonrisa en su rostro.

La verdad es que el no sabía muy bien que se hacía en una cita, así que estaba emocionado y ciertamente muy nervioso.

— ¿Sucede algo Bakugou? — Preguntó una chica que trabajaba con él.

Su nombre era Tsuyu, de lo que tenía entendido estubo en la misma que “el inútil de Deku” cuando estaban en primer año.