Demasiado brillante → kiribaku

Capítulo 16

Hacía frío, mucho frío. Sentía como sus manos se congelaban, era de madrugada, era normal ese viento helado.

Pero Eijirō no quería moverse de ese parque, no sabía exactamente qué hacer.

Su teléfono sonó, miró de reojo y era su madre.

Suspiró e intentando sonar lo mejor posible para no preocuparla y contestó.

— Hola ma-

— ¡¿DONDE ESTÁS?! — Eijirō se sobre exaltó, no esperaba un grito de su madre.

— E-En casa

— ¡No me mientas Eijirō! — El mencionado no sabía que estaba pasando — ¡Tu padre me dijo que te fuiste de la casa y hasta ahora no vuelves! ¡¿No ves la hora que es?!

El chico revisó y eran las 5 de la mañana, okay tal vez durmió bastante en ese parque.

— B-Bueno...

— ¡Estoy regresando a casa, llegó en una hora y más te vale estar en casa!— Colgó.

Eijirō solo se quedó un momento acostado y miraba el cielo que aún estaba un poco oscuro.

Lentamente se levantó y camino por las casi vacías calles por la hora. Caminó y caminó, con dolor de cabeza pero decidió no pensar en ello y solo seguir.

Hasta que llegó. Ciertamente no quería entrar pero, ¿Qué más podía hacer?

Aún no veía el auto de su madre así que estaba salvado, pero de su padre no lo estaba.

— Agh... — Quejó. Tomó un gran suspiro y abrió la puerta.

Ahí estaba su padre, con un rostro nada agradable.

— ¿Donde carajos estabas?

El pelirrojo solo rodó la mirada y se sentó en un sillón de su hogar.

— Respondeme — Demandó el adulto.

— Estoy cansado y me duele la cabeza, dejame, ¿quieres? — Solo cerró sus ojos un poco molesto.

— No me importa — Su padre estaba aún más irritado — ¿Crees que lo que hiciste estuvo bien?

— La siguiente vez volveré temprano, ¿si?

— No me refiero a eso — Su padre lo miro directamente a los ojos — Me refiero a las mariconadas que hiciste con ese idiota

— ¡No te refieras a Katsuki de esa manera! — Se levantó de su asiento, acercándose al hombre con una expresión molesta e irritada por el comentario del adulto — ¡No te atrevas a tratarlo de ese modo!

— ¡Si no fuera por ese idiota serias normal! — El hombre también se levantó — Me da asco que seas mi hijo — Hizo un ruido de disgusto.

— ¡Entonces vete si tanto asco te doy! - Señalo la puerta — ¡Tenme el asco que quieras pero nunca te atrevas a tratar a mi novio de esa manera!

— ¡¿Si quiera te escuchas Eijirō?! — Levantó su mano izquierda y agarró la cabeza de su hijo, y con su otra mano le goleó un ojo. Después de ello lo empujó y el pelirrojo se terminó golpeando su cabeza con el mismo sillón de antes — ¡¿Novio?! ¡¿Acaso eso te suena normal?!

No respondió nada, eso irritó aún más a su padre. Quien molesto y aprovechando la debilidad de su hijo le proporcionó un golpe en el estómago.

— Ugh...— Fue lo único que pudo soltar Eijirō.

— ¡Me largo de aquí! — El hombre tomó sus maletas y sin importarle su hijo se fue. No sin antes decirle algo más — Te preferiría muerto antes que verte con un hombre