Decidiste Dejarme (DD 1) (Nueva Versión)

Capítulo 39: De vuelta a la rutina.

(Agosto 2019)
Las vacaciones se hicieron cortas y largas a la vez. Cortas porque solo fue una semana, largas porque cada momento que pasaba con Àlex era provocarme a mí misma. Pero apenas pude dormir en mi habitación. Y en la piscina... Era imposible no mirarle.

Y si le sumamos que Marc se fue de Mojácar a Madrid directamente y a mí me tocó estar una semana sola en casa con Àlex. Puff. No vi la hora de que volvieran los GP.

Y por fin se han ido a Brno los dos. Yo me he quedado en casa. No me apetecía irme dos semanas fuera de nuevo. Les esperaré aquí con Stich y Shira. No tengo nada importante que hacer. Todavía no he encontrado trabajo (porque qué Marc o Àlex me aprovechen a la mínima no es un trabajo) y alguien tiene que ocuparse de estos dos. Dejárselos siempre a Roser no es plan. Que vayan a Brno y a Austria y hagan su trabajo mientras yo me ocupo de estos dos amores. Bueno, y así no estoy pegada a Àlex todo el día también. Que empieza a afectarme a la cabeza estar todo el día cerca suyo sin poder lanzarme a sus brazos como me gustaría.

Me siento en el sofá con el desayuno en la mesita del salón a ver el FP1 con dos compañeros muy especiales. Stich y Shira no se me separan en todo el día. Aunque no les dejo en casa todo el día. Veré los FP1 y luego les sacaré a dar un paseo. Pero primero necesito desayunar y coger energías. Sino no voy a llegar ni a la vuelta de la esquina con nadie.

Una vez he desayunado y he visto los dos FP1, el de MotoGP y el de Moto2. Y veo que Marc ha quedado 1° y Àlex 19°, le mando un WhatsApp a este último y luego salgo con los dos perros.

El paseo con los dos pequeños de la casa me ayuda a despejarme. Y a no estar todo el día en el sofá o en la cama pensando en cosas que no debería, ya de paso. Me sienta tan bien que cuando llego a casa y miro la hora me asusto. En qué momento se ha ido la mañana. Ya es casi la hora de comer.

Me doy una ducha rápida y cuando terminó y me visto, bajo al salón y veo a cachos el FP2 de MotoGP mientras me preparo algo. Lo veo tan cachos que no me entero de que ha acabado hasta que veo la tabla de tiempos. Marc ha quedado 2°.

Al FP2 al que sí atiendo, aunque sea comiendo ya, es al de Moto2. Quiero ver si Àlex consigue mejorar el tiempo de esta mañana. Lo de llegar de las vacaciones como líder del Mundial puede afectarle y no quiero que vaya a echar por tierra todo el trabajo de los últimos 5 GP. Bueno, de este medio Mundial, pero más en concreto las 5 últimas, que ha hecho 4 victorias y por poco no hubo la 5ª con la caída a dos vueltas del final en Assen. Que no se cayó él, lo tiraron... Pero bueno no vale de nada darle más vueltas a eso. No podemos dar marcha atrás y evitar la caída.

Me calmo bastante cuando veo que Àlex acaba 7° el FP2. No es primero, pero son 12 puestos mejor que en el FP1. Además él también estar más tranquilo con este resultado. Lo conozco mejor que a mí misma y sé que esta mañana no debió estar muy tranquilo tras esa posición.

Paso la tarde haciendo el tonto. Mirando las redes. Y escuchando música. Y cuando estoy buscando las correas para sacar a Stich y Shira de nuevo suena el teléfono. Miro rápido la pantalla para ver si es importante o puede esperar a que vuelva del paseo, y me encuentro con que es Àlex. Así que me siento en el sofá y suelto las correas. Antes no he podido hablar con él, así que no quiero hacerle esperar. Quizás tenga algo importante que contarme.

-¡Buenas tardes, Pistolas!
-Estás de buen humor.
-Sí. ¿Por qué no iba a estarlo?
-Te he dejado en visto esta mañana.
-Tampoco es importante. Llegué a casa justo a tiempo de ver a cachos el FP2 de MotoGP. Se me fue un poco el tiempo con esos dos en la calle.
-Gracias por mandarme el mensaje. La verdad es que estaba algo alterado en ese momento.
-Me lo imaginaba. Te conozco bastante bien, Àlex.
-Sí. Me conoces bien. Ojalá estuvieras aquí.
-Estoy mejor aquí, Àlex. Allí solo me aburro y molesto. E iban a ser dos semanas seguidas. Quita, quita. Ya bastante fue ir de Assen a Sachsenring y de allí a Mojácar.
-Bueno, si no quieres venir no te puedo obligar.

Hago una pausa pensando, y luego sigo. No es que no quiera ir... Es que no soporto estar a su lado sabiendo que no quiere nada conmigo.

-Me encanta ir, Àlex. Me encanta estar contigo en cualquier parte. Pero siento que molesto todo el tiempo.
-¿Cómo vas a molestar? Además, así tendría fisio personal.
-¡Yo no soy tu fisio! Oye, dile a Marc que voy haciendo las maletas. Eso de que me tengáis de esclava como forma de pagar el alquiler no me está gustando mucho.
-No te vayas, boba. Sabes que puedes negarte todo lo que quieras. No necesitamos que nos des ni nos hagas nada.
-Yaa, pero siento que sobro. Y estoy de gorrona.
-No estás de gorrona.
-No estoy aportando nada. ¿Tú cómo llamas a eso?
-De eso ya me estoy encargando yo, no te preocupes.
-¿Qué tú, que?
-Oye que se corta...

Y lo siguiente que escucho es el pip-pip-pip de la llamada acabada. ¿Le he entendido bien? ¿Le está pagando a Marc de su propio bolsillo para los gastos que yo haga al mes? Yo lo mato.

El sábado fue mejor para ambos. Sobre todo para Àlex que consiguió la Pole tras quedar 9° en el FP3. Marc en cambio quedó 1° en todas las pruebas del día, FP3, FP4 y Q2.

Y el domingo fue una mañana de nervios y de atracones en el sofá para mí. Pero al final del día valió la pena con creces. 5ª victoria de Àlex en los últimos 6 GP, y victoria también para Marc. Otro doblete Márquez de esos que me gustan tanto. La adrenalina todavía me corría por las venas cuando llamaron más tarde y nos volvimos locos por teléfono. Incluso Stich y Shira se volvieron locos ladrándoles.