39. guilt.

793 115 59
                                    

| culpa.

DEREK SALIÓ corriendo detrás del kanima tan pronto como salió de su estupefacción de la revelación de su identidad, el trío de chicos siguiéndolo en el auto de Stiles mientras que Allison se quedó con Lydia para tranquilizarla y llevarla a casa

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

DEREK SALIÓ corriendo detrás del kanima tan pronto como salió de su estupefacción de la revelación de su identidad, el trío de chicos siguiéndolo en el auto de Stiles mientras que Allison se quedó con Lydia para tranquilizarla y llevarla a casa.

Stiles detuvo el auto bruscamente en cuanto divisó gracias a las luces delanteras unas pinchas que le impedían el paso, girando la cabeza a la derecha para mirar a los chicos que iban con él.

— ¿Ahora qué hacemos? —preguntó al aire, mirando después al frente al percatarse de que ambos habían bajado ya del auto y saltado la malla metálica, dejándolo atrás.

Jackson sentía que su corazón saldría de su garganta al escuchar el sonido de disparos y siseos, preocupado por su hermana, siguiendo todos los ruidos hasta ver al kanima frente al viejo que ahora dirigía la escuela. Scott se lanzó contra la escamosa criatura para alejarla de él, deteniéndose para mirar al anciano mientras que él apresuró aún más el paso, intentando alcanzarle.

Kanima o no, ella era su hermana, y Derek había jurado matar a quienquiera que fuera el kanima, así que tenía que encontrarla antes de que él pudiera hacerle algo. Scott lo alcanzó pronto, manteniéndose junto a él incluso cuando comenzó a andar más rápido al perder de vista al kanima, llegando hasta el callejón junto a un club.

Stiles los asustó al tocar sus hombros, alzando las manos en señal de paz cuando notó las expresiones espantadas de ambos.

—Lo siento —se disculpó avergonzado—. ¿Vieron a donde se fue?

Jackson negó con la cabeza.

—La perdí.

— ¿Qué? ¿Perdiste el rastro olfativo? ¿Y tú? —le preguntó a Scott.

—Creo que no tiene olor —contestó el moreno.

— ¿Adónde habrá ido?

—A matar a alguien.

—Bueno, eso explica las garras, los colmillos y todo eso. Dios mío. Ahora todo tiene sentido —comentó sarcásticamente, ganándose una mala mirada de ambos—. ¿Qué? Oigan, vamos. Soy 66 kilos de piel blanca y huesos frágiles, ¿de acuerdo? El sarcasmo es mi única defensa.

—Sólo ayúdanos a encontrar esa cosa —masculló Scott.

—No es una cosa —gruñó Jackson—, es Abby.

Scott asintió en un suspiro, luciendo derrotado.

—Sí, lo sé.

— ¿Cómo pasó la prueba de Derek? —preguntó Stiles en voz alta.

—No tengo ni idea —le contestó Jackson.

—Tal vez es excluyente —sugirió, respondiéndose a sí mismo—. Derek dijo que a una serpiente nunca la envenena su propio veneno. ¿Cuándo el kanima deja de serlo? —le preguntó al par frente a él al notar que no parecían estarle entendiendo.

hopeless | #1 | teen wolfDonde viven las historias. Descúbrelo ahora