miro el bosque oscuro solamente iluminado por la luz de la luna, no había nada extraño sin embargo lo observaba como si de pronto saldría una amenaza, observó el capitán de turno y espero a que me de los últimos reportes de la noche
-señor, los lobos ya terminaron el recorrido, no hay amenazas cercanas.
-está bien- murmuró girando levemente mi cabeza para verlo- ¿y lo otro?
-La señorita Arlet no ha salido de la manada, se mantuvo rodeada de las ninfas
asiento en silencio, no esperaba que Arlet comience a planear algo o salir a buscar al idiota, sabia que ella no me diría nada relacionado con Draco, por el momento no todo lo que yo quiero saber...
me despido de mis hombres y camino para mi casa, me daría una ducha e iría a ver a la pelirroja que no pude observar desde la tarde, al entrar a mi casa enciendo las luces y camino a mi habitación, al abrir la puerta pude observar que la ventana estaba abierta y la ventisca de la noche se hacía notar, al encender la luz, observó un cuerpo a mi lado recostado en la pared, retrocedo al llevarme un susto, no había notado su presencia, la risa de Arlet se hace notar y pongo los ojos en blanco
-¿te asustaste?- ella ríe aun - debiste ver tu cara ¿es la cara que pones cuando se te acerca alguien?
-muy gracioso - digo intentando no reírme
ella se sienta en la cama aun sonriendo
-bueno al menos dime que te asustaste un poquitito- dice ella
-a mi nada me asusta- habló acercándose a ella, Arlet se aleja de mí en un movimiento rápido
- olvídalo, estoy molesta contigo
-¿conmigo...qué hice esta vez?
- pensé que ya dejarías de mandarme a los guardias para que me vigilen- se cruza de brazo- ¿tan poca confianza me tienes?
aprieto los labios al ver su cara de pobre santa, suelto un suspiro y me acerco a ella, la encierro entre mis brazos y miro su rostro y su pequeñas pecas
-por mas caritas que me hagas te dejaré a los guardias- le dejo un beso en la punta de su nariz, me separo de ella y la escucho bufar mientras se tira en la cama
entró a la ducha rápidamente, escucho como Arlet hace algunos pequeños ruidos en la habitación, no le doy importancia intento cuidarme lo mas rápido cuando tomó el shampoo observó la puerta del baño y la pelirroja observando desde ahí, arqueo la ceja en su dirección y ella sonríe, despacio se endereza y se quita cada prenda de la parte de arriba dejándome verla solo en corpiño y pantalones, sonrió incitando
-¿crees que sería bueno que nos bañemos juntos?-dice ella- hay que ahorrar - ella se quita los pantalones
-apoyo la emoción- digo abriendo la mampara y tomándola rápidamente
La apoye contra la pared y mientras seguía besándola recorro con mis manos su espalda y quito su brasier, ella baja sus labios a mi cuello dejando pequeños besos y uno que otros. El vapor del agua caliente nos envuelve por completo, mientras nuestros cuerpos desnudos mojados se entrelazan bajo el chorro de la ducha: soy feliz de disfrutar de sus caricias, de sus suaves arañazos en mis espaldas, de sus besos tiernos mordiscos me deshago de su ropa interior y mi mano baja, tocó su clítoris, sonrió al escuchar un pequeño jadeo la hago dar vuelta y que se apoyara con las manos en la pared, me agaché detrás de ella y empecé a pasarle mi lengua por encima de la espalda, mientras el agua le caía por encima. Baje mi boca hasta su culo, le abrí los cachetes y empecé a pasarle mi lengua desde el principio de su vagina, mientras ella gemía y se iba retorciendo le jugueteaba con mi lengua, uno de mis dedos fue a su clítoris, y empezó a jugar con él. Ella empezaba a disfrutar y gemía cada vez más rápido
me reincorporo y de una embestida entro en ella Aprieto sus nalgas mojadas, Ella se comienza a mover más rápido, aumento la velocidad y la intensidad, se escucha el movimiento, la tomo de las caderas y le muevo a mi ritmo Seguimos aumentando el ritmo se inclina más hacia adelante, yo me nuevo más duro, más rápido, siento como aprieta se inclina más hacia adelante, llevo una mano a sus tetas y jugueteo con el pezón y con la otra le doy un par de nalgadas en un movimiento rápido cambio de posición la levantó agarrándola de las nalgas, entrelaza sus piernas alrededor de mi cintura sintiéndolo todo dentro, comienzo a subir y bajar, en un mar de gemidos ella me besa con pasión su lengua juega con la mía. Sus manos jalando mi cabello
Me muevo en círculos mientras la penetro, siento como aprieta más.me muevo más rápido, siento como se contrae.
-demonios... voy...- habla mientras un gemido se le escapa
siento como se corre mientras jadea, junto a ella termino me muevo más lento y voy sacándola la veo suspirar mientras me abraza y yo la beso
...
al salir de la ducha le colocó una remera mia a Arlet y pongo a lavar su ropa interior vuelvo a cargarla mientras ella se enreda y mete su rostro en el hueco de mi cuello nos acostamos en la cama y dejo que se acomode en mi pecho como de costumbre
- bien si vamos a seguir por este camino entonces debemos conocernos - habla Arlet, dejo de acariciar la zona donde estaba mi mano y la miro
-¿que quieres saber?- preguntó
-No lo sé... que te gusta lo que no te gusta, tu color favorito algo que sea de ti - se sienta sobre mi mientras me explica
-¿como el juego de las preguntas?- hablo mientras la observo con mi remera, ella asiente acomodándose uno de sus mechones detrás de la oreja
- así es, tu me dices algo de ti y yo te digo algo de mi-
- me gusta- hablo mientras meto mis manos por debajo de la remera y toco su espalda baja - las damas primero
-me gustan las frutillas- sonríe como una niña
sonrió junto a ella y recuerdo que la semana que viene comenzaban las temporadas de aquella fruta
-tengo sesenta años - ella arquea la ceja
- mil seiscientos - murmura ella, quitó mi sonrisa y la observó sorprendido
- y yo pensaba que me conservaba bien- ella ríe y se encoge de hombros - quítame la duda ¿no envejecen los dragones?-
ella hace una mueca al escuchar mi pregunta
-em... si, pero es complicado.- dice ella- sinceramente no sabría explicarlo -
- bien...sigo yo pero no te burles - le señaló con el dedo - odio a los perros, o algún animal que tenga pelo
ella me mira y aprieta sus labios intentando no reírse sin embargo le pellizco suavemente y ella estalla fuertemente aun sobre mi
-eres... un lobo... y tienes pelo por favor
-te dije que no te burles- la tumbó en la cama y quedó entre sus piernas mientras ella intenta calmar su risa- alguna vez viste un pelo en esta casa
era un maniático de la limpieza eso no lo podía negar y soy bastante quisquilloso en algunos temas.
-me gusta la naturaleza, aunque soy un dragón de fuego y siempre me acostumbré a estar cerca de un volcán
- mi palabra favorita es adiós - le digo
-¿adiós?- me mira curiosa - ¿por qué?
me encojo de hombros, si tenía un significado para mi pero no pensaba decirle por el momento era algo vergonzoso.
- es una palabra extraña, no lo sé, me gusta
cuando ella iba a hablar se escucha el timbre de la puerta principal, resopló molesto, Arlet me deja un beso en la mejilla mientras que yo tomo unos pantalones para poder abrir.
-ahora entiendo porque milo se molestaba cuando los interrumpía...- murmuró mientras bajo y escucho las voces de los trillizos y milo regañándolos
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Próximo capitulo viernes
espero que les guste y nos leemos prontito
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Se Mía +18
FantasyUn lobo mujeriego que podía tener a cualquiera. Egocéntrico, guapo y aclamado por las mujeres, nunca en su vida pensó que una mujer lo rechazara pero paso. Arlet una mujer reservada, de pocas palabras, muy pocos conocían su pasado, la que la conoce...