Obsession

3.

Esta noche...esta noche...esta noche...

Solo pensaba en lo que me pasaría esta noche, estaba realmente asustada. Cojo el teléfono de la mesa y marco a la policía.

[...]

-¿Cómo que no pueden hacer nada?- preguntaba al agente frente a mi puerta

-Si no llega a un mes, no es acoso. No podemos hacer nada.- vuelve al coche patrulla y se va.

¿Qué voy ha hacer yo ahora? Voy a jugarme la vida esta noche. Entro a casa y voy a la cocina, en la nevera hay otra nota. Me acerco y la leo. -No te asustes- ¿Que no me asuste encontrando notas como esta por mi casa? ¡Claro que no!

-¡Donde quiera que estés, déjame en paz!- grité, se oyó por toda la casa. Pero no obtuve respuesta.

A cada paso que doy me asusto, ¿qué me hará?

[...]

Veo la tele a las 22:34 p.m. comiendo palomitas y con una manta por encima. Suena el timbre y doy un salto del susto. Llegó la hora. Me levanto lentamente hacia la puerta y me pongo de puntillas para ver por la mirilla. No veo a nadie. Me doy la vuelta para ver la habitación entera, oscuridad y silencio.

Doy pasos lentos hacia el sofá y acaricio la tela amarillenta. Oigo un ruido de arriba y me doy la vuelta rápidamente. Camino hacia las escaleras y a cada paso que subo chirria la madera. Llego a mi habitación y en la cama hay esparcidos pétalos de rosa, hay un camino trazado por ellos que llegan al baño, que tiene la luz encendida. No se oye nada, sigo los pétalos y llego al baño, no hay nadie. Miro el espejo y hay un corazón dibujado con pintura rosa rodeando mi cara.

Bajo las escaleras de nuevo y la televisión esta apagada.

-¿Ho-hola?- me atrevo a preguntar. Pero sigo sin obtener respuesta. - ¿Hay alguien ahí?- Miro hacia todos lados sin ver nada. Me siento observada.

Después de eso no encontré nada más, me fuí a la cama y me dormí.

[...]

Nick POV's:

Creo que ya tuvo suficiente con lo de ayer, supongo que me pasé un poco. Sonrío y al momento me río de mi mismo. Una risa de satisfacción, no me arrepiento de nada de lo que le he hecho. Por mi parte creo que es algo bonito, a todad las chicas les gustan las sorpresas.

Aparco en el parking del restaurante y me bajo para ir a trabajar. Entro en la cocina y están todos mis compañeros trabajando, caminando de un lado a otro de la cocina y el fuego de la sartén llega hasta el techo. Cojo el primer pedido que encuentro y lo preparo rápidente. -Mesa 25-.

Voy hacia allí intentando mantener el equilibrio con la sopa em la bandeja bien alzada por encima del hombro. Busco la mesa 25 y la encuentro, la encuentro a ella... Ella, que me hace sentir mariposas ee el estómago cada vez que pienso en ella, me hace sentir pequeño al verla y me derrite al mirarme. Sus ojos fijados en la carta mientras avanzo hace sentirme único, ahora ella lo es tod...

- ¡Cuidado!- Una voz masculina me desconcentra y me caigo al suelo.

La sopa se cae también haciendo que se derrame en... en... ella. Oh, dios. Me levanto rápidamete, me sacudo el traje y cojo servilletas de la mesa para limpiar el desastre del suelo. Recojo todo y la miro. Se mira el vestido con el ceño fruncido, fija la vista en mí y me vuelvo a derretir.

- ¿Eres imbécil? ¡Mira lo que has hecho!- Me señalaba a su vestido lleno de sopa.

- Lo... Lo siento.- Me rasco la nuca con nerviosismo, no sé que decir. - L-la acompañaré al baño.- Se levanta y va en dirección al baño, y yo la sigo.

Abre la puerta del baño de mujeres y yo entro con ella, incómodo. Se mira en el espejo y bufa, le paso una toalla que había colgada y la coje molesta. Moja la toalla con agua un rato y frota contra su vestido.

- Es mejor absorver que frot...

-¿Te rees que no lo sé?- suspira- Cállate, tú has provocado esto.

-No he sido yo.

-¿Y quién ha sido entonces?- me mira y al momento siento un ardor en el vientre.

- Ha sido tu presencia, tu mirada, tus labios, tus ojos...- me acercaba y ella me miraba perpleja. - Solo contigo me siento débil, confuso. No me conoces ni yo tampoco a ti, pero el poco tiempo que he estado contigo ha sido suficiente como para sentir algo por tí.- tragó saliva y la boca la tenía entreabierta. Imposible de articular palabra. No se lo creía.

-¿Qué sientes por mí?- Se quedó paralizada diciendo cada palabra con mucho cuidado.

-No lo sé- Me acerco más a ella y pone sus manos en mi pecho. No se si lo hacía para que me alejara o para que me acercara mas a ella, no se resistía pero tampoco sabía si quería. Estaba paralizada, insegura, confusa. Se le veía en los ojos, brillantes y asimilando cada movimiento.

Me acerco a ella y rozo sus labios con los míos, no puedo besarla del todo porque me empuja lentamente hacia atrás y se aparta de mí. Me mira por última vez y se marcha hacia la puerta, para dejarme con las ganas. Querí besarla, y lo haré. Será mía.