I'm only of Daddy.

vingt

" do I make you feel like Christmas time?
put me in a party dress one time. "

Noah

Me levanté al rededor de las 10 am, lista para irme de este lugar, definitivamente el ambiente se siente más pesado cada segundo que sigo perdiendo aquí. Salí cautelosamente al baño para darme una ducha y posteriormente vestirme, una vez culminado esto tomé mi celular y respiré profundo. Espero que Alex no esté en casa.

Bajé las escaleras para desayunar algo, solo comí un sandwich de mermelada ya que si hacía algo más complejo me tardaría mucho tiempo, aparentemente Alex no estaba, me pregunto cuánto tiempo habrá pasado desde que se fue, que importa. Aproveché esto para llamar a Tristán.

—Buenos días ¿Mi regalo de cumpleaños es una llamada a las 11 am?—Mierda, olvidé comprarle un regalo, supongo que le diré que vayamos al centro comercial más tarde ya que yo también quiero comprar un vestido para la fiesta de hoy.
—Soy yo, una llamada de mi parte es el mejor regalo que puedes recibir corazón.—Reí ante mi comentario narcisista.—¿Estás ocupado? Él no está y ya empaqué todo, quiero aprovechar justo ahora para irme.
—No estoy ocupado, para ti jamás ¿No sabes a qué hora regresará?—Lo oí bostezar, se está despertando seguramente—¿Te molesta si voy en pijama? Es que cambiarme podría ser un contratiempo.
—No me molesta, pero trae algo de ropa para que te cambies en mi casa, iremos de compras después de la mudanza.—Caminé hasta la cocina y dejé el plato sucio allí, que lo lave él, no me importa.
—¿Me comprarás mi regalo?—Musité un "Mhm".—De acuerdo, en 20 estoy allí.—Colgó. Subí las escaleras de regreso a la habitación y bajé todas y cada una de las cosas que había empacado  hasta la sala de estar para que Tristán pudiera ayudarme a meterlas en el auto una vez que llegara.

Mientras terminaba con las últimas cosas escuché el claxon de un auto y asumí que era Tristán, chequeé por la ventana principal y lo vi caminar hacia la puerta de entrada, fui por las llaves y abrí la puerta—Hola.—Me dio un beso en la mejilla.—¿Cómo te sientes?
—Estoy bien, tranquilo. Creo que deberíamos apurarnos, probablemente llegue en unos 40 minutos.—Ambos entramos a la casa dejando la puerta abierta para sacar todo.
—Creo que tu novio es un patán, en serio.—Lo miré mal.—Perdón, ex novio.—Sonrió mientras me veía con burla.
—Dime algo que no sepa, ayer estuvo casi toda la noche tocando la puerta de la habitación de invitados para que lo dejara entrar—Suspiré frustrada.
—Que bueno que no lo dejaste entrar... ¿No lo dejaste entrar, cierto?
—Obvio que no Tristán, no seas tonto.—Reí.
—Estoy orgulloso. ¿Por dónde empezamos?
—La maleta roja grande, tiene el 70% de mi ropa y son mis prendas favoritas.

Nos dispusimos a llevar una a una todas las cosas que ocupaban la sala de estar y se encontraban en al menos 4 maletas de distintos tamaños, seguidas de algunas cajas con cosas pequeñas como decoraciones mías y otra que tenía accesorios. Una vez terminado esto, chequeé que no me faltara nada, dejé a Púa con sus cosas en la sala junto a una nota dónde le decía a Alex que no quería tener nada que viniera de él, incluso dejé la mayoría de regalos que me había dado anteriormente. Salí de la casa y dejé las llaves en una maceta donde solo él pondría unas llaves en caso de emergencia.

Me subí al auto con Tristán y nos fuimos de allí, en cierta parte me sentía algo mal porque aquél chico había formado una gran parte de mi vida, pero creo que debo dejar eso atrás, me hizo mucho daño y eso no lo puedo dejar pasar solo porque el amor que siento... O sentía.
—¿Estás bien?—Escuché hablar a Tristán sin quitar la vista del camino.
—Sí, solo me siento extraña, cuando empezamos a salir creí que las cosas nunca terminarían de esta forma, pero así fue, que extraño ¿no?
—Está bien si no te acostumbras aún, está bastante reciente, todo a su ritmo.—Desordenó mi cabello.
—Si haces eso una vez más te voy a golpear.
Lo escuché reír, Tristán es bastante lindo, pero por como se ha comportado no puedo verlo como más que un amigo que siempre está presente, me gusta nuestra amistad, creo que incluso podríamos llegar a ser amigos con derechos si lo quisiéramos y nada se arruinaría.