" Your love is holy. "
Alex
En este momento Noah está totalmente bajo mi dominio, no sé como pasé de sentirme como un completo idiota a jugar con su muy sensible vagina. Joder, como me encanta verla así, gimiendo mi nombre mientras me pide más. Soy un maldito pervertido, pero este maldito pervertido la ama como ningún otro idiota podrá hacerlo jamás.
— Daddy...—Oh nena, no sabes lo que acabas de hacer al decirme así.
Algo en mi interior se encendió, mi yo sádico y salvaje estaba deseando salir y llenar de placer a su gatita, como un buen Daddy que soy, lo haré.—¿Si gatita?—Dije sonando natural, si, lo dejaré salir en cuanto mi princesa ruegue por lo qué desea.
—Te necesito.—Unas palabras más y tus hermosas bragas de ositos van a terminar en alguna parte de la habitación, preciosa.
—¿Dónde me necesitas gatita?—Dije mientras mi mirada se conectaba con la suya. Parece que alguien quiere jugar.
—Dentro de mi.—Vamos, sólo pídelo de una maldita vez pequeña.—Por favor follame hasta que no pueda caminar.—Bingo.No dije nada y bajé hasta su cuello, apreté su trasero y la levanté un poco, la puse a horcajadas sobre mí de manera en que quedará sentada sobre mi, ya muy notable, erección.
La moví un poco para que viera el enorme problema que me había causado.—¿Sientes eso nena? Es el pene de tu Daddy, y está extremadamente duro y ansioso por entrar en tus pequeñas y apretadas partes de princesa.—Antes de que pudiera decir algo la besé, la cargué y ella enredó sus piernas en mis caderas; subí las escaleras y entramos a su habitación. La dejé sobre la cama y mientras me colocaba el condón pude notar como sus lindas bragas estaban un poco brillosas gracias a lo húmeda que estaba.
Me acerqué a ella y en un dos por tres las bragas estaban por ahí, honestamente no me importa, sin previo aviso entré en ella y la escuché gemir. Mierda.
—Daddy...— Tomó una de mis manos y la puso al rededor de su cuello mientras me miraba con una sonrisa. Empecemos con esto, la bestia acaba de salir y no se va a detener hasta hacer que la pequeña acabe.
Empecé a embestirla fuertemente, haciendo que gimiera cada vez más. Sus gemidos me hacían perder la cordura, aproveché que tenía su hermoso cuello en mi mano y con la otra le di una cachetada, no tan fuerte, claro. Todo parecía de color de rosa hasta que ella habló.—¿Eso es todo lo que tienes, Daddy?—Y se rió.
—Alguien se acaba de ganar un castigo.—Salí de ella y la volteé de manera en que su hermoso culo quedara a mi merced; procedí embestirla de nuevo mientras tomaba si cabello con una mano.—¿Te gusta verdad? Pequeña zorra. Mírate, tan inocente que te ves y te encanta que te folle mientras te tiro del cabello.—Sólo escuché varios gemidos en respuesta, fruncí el ceño y le di un azote con mi mano, que sonó bastante fuerte por cierto.—Responde gatita.—Noté como se veía un poco la marca de mi mano.
—Sí Daddy... Me gusta mucho que me folles mientras me tiras del cabello.—Dijo entre gemidos. Yo por mi parte tomé sus brazos y los puse juntos como si estuviese amarrada... Hasta que se me ocurrió una idea. Paré de follarla y me acerqué hasta unas gavetas, de estas saqué un pequeño vibrador y unas cuantas cuerdas. Hice que Noah se sentara y tomé sus manos para después amarrarlas de manera en que no se pudiera soltar, le pedí que se colocara en posición de perrito y encendí el vibrador mientras lo dejaba en (censura porque no encuentro una palabra para esto sin que suene muy "puerco"). Ella por su parte soltó un pequeño suspiro, yo sonreí de lado orgulloso de mi trabajo. Una vez terminado la penetré de nuevo y esta vez si no me iba detener, me movía cada vez más rápido y de vez en cuando daba unos dos o tres azotes con mi mano, luego la volteé haciendo que quedara boca arriba y seguí dando embestidas, hasta que sentí como su interior se hacía mas estrecho y yo sabía lo que eso significaba, ella estaba a punto de venirse, como el buen Daddy que soy, se lo permití.Sus lindos cobertores quedaron completamente mojados. Noté que ella me miraba con la respiración agitada, estaba un poco despeinada, sus mejillas estaban un tanto rojas y sus ojos se veían brillosos, sólo puedo decir que se veía hermosa; me acerqué a mi pantalón y tomé mi teléfono, de paso tomé un labial que había en su mesita de noche y escribí unas cuantas cosas en su cuerpo, aproveché la oportunidad para tomarle una linda foto a mi pequeña princesa. Y vaya que se ve hermosa.
Le desamarré las manos y la llevé cargada hacia el baño para que pudiese tomar una ducha, y después descansara un poco. Se lo merece.
Re sadico el pibe👌🏼
⭐️⭐️⭐️⭐️⭐️ 5 estrellas por eso

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I'm only of Daddy.
RomanceCuando menos te lo esperas la persona que consideras el amor de tu vida puede decepcionarte en cuestión de segundos; pero no todo es tan malo ¿cierto? Puedes ganar nuevas experiencias gracias a esto... Aunque, el pasado nunca queda del todo atrás.