❝checkmate❞ ━sunhak.

seventeen

CHECKMATE

—el príncipe se ve bastante animado, seguro es por eso — Sakura parecía bastante feliz al notar la actitud del moreno, yo alcé la ceja ante lo ultimo que dijo pero ella encogió sus hombros y yo tan solo me confundí ante su extraña actitud.

No dijimos mas y nos dedicamos a  observar desde la ventana de la gran cocina que daba al jardín a los caballeros nuevos practicar con cierto chico que era más que bueno a la hora de manejar la espada.

—al parecer durmió bien anoche — una sonrisa se formó en mi rostro al verlo combatir con una sonrisa en su rostro y escuchar sus carcajadas. 

Sin darme cuenta me encontraba suspirando por él y sakura quien se encargaba de preparar una masa rió bajito por lo que regresé a la realidad.

Intenté dejar de observar al chico por lo que decidí fijarme en los nuevos rostros y sin duda me sorprendí levemente al encontrarme con dos pares de ojos que me veían intensamente.

—Sakura...¿conoces al chico que está al lado del jefe de caballería? — ante mi pregunta la japonesa dejó de lado la masa y se dispuso a observar al chico, luego de unos segundos asintió y siguió con su trabajo.

—él entró a trabajar aquí antes que yo — mis ojos se abrieron en grande pues hasta hace poco lo había visto por primera vez —. Casi no habla con nadie, aplicó para la caballería, sin embargo he escuchado por ahí que el señor Juyeon le dijo que alguien débil como él jamás sería capaz de proteger al reino  — dejé de ver a través de la ventana y dirigí mi completa atención a la de cabello rosado.

—¿por qué sigue aquí entonces? — cuestioné y sakura se encogió de hombros.

—no sé bien cómo ocurrió pero creo que terminó quedándose para cuidar el calabozo — sakura parecía triste al contarme todo esto, tal vez lo era un poco pero yo no podía evitar sentirme incómodo con su mirada fija en mi.

—Entiendo... murmuré y me despedí de ella para dirigirme con sunwoo y tal vez observar mas de cerca a esas dos personas que no me daban buena espina.

Algo tramaban, estaba mas que seguro, después de todo no parecía simpatizarle a Juyeon y el sentimiento era mutuo. Era una persona tosca y arrogante que se jactaba de ser el más fuerte, él creía que podría derrotar a todos y ser el mejor de todo el reino y eso me correspondía a mi.

Saludaba con un movimiento de cabeza a los demás siervos que iban y venían con algunas herramientas y con la ropa llena de tierra, no quería formar lazos de amistad pero tampoco quería ser odiado, eso no me vendría nada bien.

—Oh, justo venía por usted — alcé mi vista y me sorprendí levemente al ver a ese chico frente a mi, su sonrisa no me gustaba para nada pues a pesar de ser perfecta me hacía sentir como si estuvieran a punto de atraparme —. el príncipe quiere verlo por allá, me han mandado por usted —se hizo a un lado y me indicó que pasara primero.

—Gracias — fue lo único que dije para empezar a caminar sintiendo su mirada quemando mi nuca.

mis manos habían empezado a sudar y mi labio inferior era mordido por mi debido a los nervios que sentía, ¿me habían descubierto y me iban a ejecutar ahí afuera? no era muy descabellada la idea para ser sinceros.

—¿se encuentra bien? — me sobresalté un poco al sentir su mano en mi hombro, voltee levemente y encontré su rostro bien cerca, tragué en seco y asentí despacio —. se ve pálido, ¿quiere que le diga a su majestad que se siente indispuesto? — en su tono de voz podía notar que realmente no estaba preocupado por mi. ¿qué fingía, qué quería ?

—estoy  bien — respondí y quité su mano de mi para seguir caminando lo más rápido posible.

No me agradaba para nada y haría lo que fuera para que se alejara de mi, y sabía bien quien me podía ayudar con eso, una sonrisa se posó en mi rostro al ver de nuevo a cierto moreno que se encontraba bebiendo agua.

—Su majestad — incliné mi cabeza y él sonrió saludándome con la mano por lo que me acerqué mas para poder hablar tranquilamente — hizo un excelente trabajo hoy, usted es el mejor —  era obvio que darle comentarios de este tipo lo hacían sentir bien y subían su ego.

—Lo sé, he mejorado mucho — dijo con grandeza y yo tan solo pude sonreír.

rápidamente se notaba quien de los dos era más apto para pelear, yo había dejado el entrenamiento de niño y cuando me hice pasar por pueblerino no podía practicar con algo efectivo así que se podría decir que en un duelo de espadas sería el perdedor; Por esa razón mi padre consideró que lo mejor sería tomarlo desprevenido y sin duda eso funcionaría.

—¿en qué piensas? — preguntó dándole su espada a uno de los caballeros, yo negué con la cabeza borrando todas las ideas locas.

—¿me necesitaba para algo? — él alzó su dedo como si hubiera recordado algo y asintió, se volteo hacía donde estaban los caballeros y todos le hicieron una reverencia cuando el dijo que dejaría la practica por hoy.

—Sígueme Ju, me ayudarás con unos pendientes — asentí y antes de seguirlo di una rápida mirada hacia los hombres que se formaban en fila, de nuevo esos dos pares  de ojos me veían fijamente por lo que decidí alejarme de ahí lo más rápido posible.

bien, ahora que estaríamos solos podría hacer que Sunwoo hiciera algo para alejar a ese chico de mi.

—¿en qué le puedo ayudar? — pregunté y él colocó sus dedos en sus labios.

— No digas nada, cierra tus ojos, tienes prohibido abrirlos — ladee mi cabeza e iba a decir algo cuando sus labios se juntaron con los míos en un beso rápido que me dejó sorprendido —¿qué te dije? — murmuró acariciando levemente mi mano, yo tan solo asentí un poco fuera de si y cerré mis ojos para dejarme guiar por él.

no escuchaba a nadie más por ahí por lo que supuse que él tenía algo que ver con eso. ¿qué haría? mi mente me quería hacer creer que iba a morir por ser un espía pero al sentir las caricias de sus dedos en el torso de mi mano me negaba a creer que algo así ocurriría.

Los nervios tan solo crecían y quería preguntar qué ocurría pero tenía miedo y todo este sentimiento aumentó cuando soltó mi mano y sentí como cubría mis ojos con una tela suave. "no quiero que hagas trampa" murmuró justo en mi oído y yo tragué en seco.

volvió a tomar mi mano y no tengo idea de por cuanto tiempo caminamos sin embargo se sintió eterno, sentía que todo el aire escapaba de mi y solo pude sentirme un poco tranquilo cuando él paró y yo choqué con su espalda.

—¿listo? — cuestionó, "si" murmuré, sin embargo no lo estaba.

Se colocó detrás de mi y con delicadeza empezó a desatar la fina tela de mi rostro.

—puedes abrirlos — obedecí pensando que fuera lo que fuera afrontaría la situación.

CHECKMATE

Holi <3 gracias por leer !!se viene lo bueno besties ojo que nos ponemos a llorar LOOOL

nos leemos pronto mwa