Robin Hood Book.

XV

No termino.

«Nunca te pude hablar»

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Pequeño Juan se maldijo una y otra vez como se le hizo costumbres en sus noches en vela, de esas en las que logras sentir el filo de la madrugada sin siquiera tocarlo.

¡Todo por ser un cobarde!

Tan bien que iba al comienzo, pero antes de empezar, terminó cuando no le pudo decir las tantas cosas que su corazón gritaba.

El nombre de la chica a la que nunca se le podía acercar como ella quería le sabían cómo una tasa de café amargo. Scarlett.

Ella se fue, dejándolo en esa ciudad, tan indefenso. No sabía dónde estaba y le dolía no poder buscarla.

¿Cuántas cosas no había hecho con Scarlett?
¿Cuántas canciones no bailaron por cobarde?
¿Cuántos besos se escaparon por nunca llegar a su boca?

Hubieron tantos momentos que se fueron como gotas de aguas, dejando de ser momentos por perder la oportunidad.

Quizás ya era hora de dejar de pensar en ella y creer que Scarlett regresaría a por él. Ojalá así fuera porque así no tendría que rogarle a Marian su ubicación ni que sus mejores amigos le dijeran que debía poner punto.

¡Pero dolía! ¡Habían tantas cosas que nunca hicieron!

Pero no podía contarlas, porque al final, no terminaría.