Broken Mirror (PAUSADA)

Capítulo 22

Narra Jack:

Después de dejarla de nuevo dentro de la habitación, me quité de encima todo pensamiento relacionado con ella. Fui directo a la cocina y empecé a hacerme la cena.

Mientras me la hacía, no paraba de pensar en el vídeo del pendrive. En aquel instante, la rabia volvió a apoderarse de mí e intenté relajarme.

Pero sabía perfectamente que, después de lo visto, no podía estar tranquilo.

"2 días antes..."

-¿La dejaste acostada?- me preguntó Mike cuando me ponía a cerrar despacio la puerta de la habitación.

-No. La dejé clavada en el techo para asegurarme de que no se mueva, no te jode...- contesté sarcástico.

La risa de Mike empezó a inundar en la sala, pero mi cara no tenía muchas ganas de reírse en aquel momento. Estaba demasiado estresado con el tema del pendrive, contando también lo del intento de suicidio de la chica.

-Está bien.- concluyó él poniéndose serio y sentándose en uno de los sillones.- ¿Pero qué ha pasado exactamente?

-Llegué de comprar, vi la nota, la busqué y la encontré con las venas cortadas. No es tan difícil de entender.

-Pero... ¿Por qué lo habrá hecho?

-Por mí. Antes de que pasara todo esto, me rogó que la dejara marchar. Después de haberle dicho que no, habrá decidido optar por suicidarse con tal de escapar de mí.

-No es normal que una de tus rehenes acabe haciendo eso.- dijo pensativo.

-Se cree lista, pero no lo es. Seguirá aquí hasta que la mate yo.- dije enfadado.- Es más: pienso matarla yo mismo después de que se recupere.

-Te seviría de utilidad. Gracias a ella tienes esa...- hizo una pausa intentando recordar lo que fuimos a buscar al edificio.- Esa cosa que necesitabas. Podría ayudarte en más.

-¿Después de lo de antes? Le dije que la dejaría libre si hacia el trabajo. Lo hizo, no la dejé ir y terminó así.- expliqué mientras apuntaba con la mirada hacia la habitación en donde se encontraba la chica.- ¿Crees que ella confiará en mí ahora? Estás muy equivocado, Mike...

-Pero, aún así, piénsalo. Si le explicaras la situación, a lo mejor...

-No voy a contarle muy putos problemas a una rehén.- dirigí mi mirada asesina hacia él- A ella le importa una mierda lo que me pase, y a mi me importa una mierda lo que le pase a ella.

-¿Has probado ser amable con ella?

-Ni lo he hecho ni lo haré.

-Cambia de actitud y verás que acabará accediendo a tus peticiones. Es lo que hago yo para que confie en mí por si acaso...

-¿Podemos cabiar de tema?.- le interrumpí.- No estás aquí para sermonearme.

Se quedó callado y mirando tristemente al suelo. Después de que me preguntara la razón por la que le llamé, cogí el pendrive, que aún permanecía encima de la mesa. Se lo mostré a Mike para que se hiciera una idea de lo que quería, pero creo que no llegó a comprenderlo del todo.

-¿Qué?- preguntó confuso.

-Necesito que lo metas en tu portátil. Quiero ver qué hay.

-Déjame verlo.- me pidió extendiendo la mano. Cuando se lo di, sus ojos se iluminaron. Mientras contemplaba el pendrive, continuaba hablando: Vaya... Es de una marca poco conocida...