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𖣘 ELLA 𖣘
❒ Omnisciente❒
30 Abril, 2007 ━━━━━━━━━━━━━━━━
Por las Ciudad de Tokio se puede decir que hay una gran, gran población, sin embargo, hubo alguna razón por la cual uno se topa con cierta o ciertas personas ¿no?. De un planeta gigantesco con millones de personas, ¿por qué ella?.
La mañana del inicio de semana laboral es bastante tediosa y fastidiosa, nadie cambiaría el hecho por más que fuera una misma rutina. Los lunes para ir a la escuela son los más costosos o al menos para la mayoría que tenía que estudiar.
El bicolor venía caminando y charlando con sus amigos por el largo y fastidioso pasillo, llevando una conversación común y trivial, aunque no pasaban desapercibidos ya que eran algo "populares". Tenían que ir a clases pero el hecho de no querer dejar de escuchar el gran chisme que se traían entre manos era mayor a una falta en la clase.
━━Entonces, pasaba qu-
Kazutora no pudo terminar de contar cuando lo único que pudo percibir fue el frío y duro suelo. Quienes estaban en ese momento viendo aquella escena vergonzosa para él, solo se quedaban callados, pues nadie se metía con él, y es que a pesar de ya ir en último año de Preparatoria, los indicios de su pasado se conocía entre los alumnos y profesores.
━━¡Maldita Aoi! ━━el chico sintió que el peso de su espalda se iba y a su vez escuchaba reclamos de una voz que ahora le resultaba demasiado chillona y molesta━━ ¡mira lo que ocasionaste burra! ¡lo tiré!.
« Sí, pero ni siquiera me ayuda a levantarme »Pensó con cansancio, un error lo comete cualquiera ¿no?. Al menos una disculpa. . .
━━¿Estás bien, Kazutora? ━━Baji le ayudó a levantarse, muchos ignoraron aquel "suceso" y volvieron a sus cosas, pero ellos tres y las dos chicas seguían ahí.
━━¡Perdón por tirarte, no era mi intención! ━━la castaña reverenció en dirección de Kazutora━━ ¿estás bien?.
Alzando la vista se acercó a él, este ya estaba algo hastiado y eso que solo fue eso y no más. Todavía le costaba regular sus emociones y acciones impulsivas, pero para su suerte estaba Baji y Chifuyu con él, así cuidaban que no hiciera o dijera algo por impulso.
