-¿Qué estás haciendo?
Me sobresalto al escuchar la voz de Victoria y volteo rápidamente.
-Mierda -murmuro.
-¿Qué ocurre?
Mi chica, quién cubre su cuerpo del frío con mi bata color azul, se acerca a mí y da un pequeño bostezo.
-Se supone que debía ser una sorpresa.
Victoria me mira por unos segundos, para luego comenzar a reír.
-¿Una sorpresa? -Vic sigue riendo y niega con la cabeza-. Ya me diste una buena sorpresa al no encontrarte a mi lado cuando desperté. Bebé, son las cuatro de la mañana, ¿qué haces acá?
-Bueno, yo... yo sólo quería terminar de... ya sabes, de hacer todo esto antes del nacimiento.
Me encojo de hombros y ella sonríe.
-¿Necesitas de mi ayuda?
-Bueno, yo estaba comenzando a pintar. Hagámoslo.
Dos horas más tardes, Victoria tenía la mitad de su cabello color celeste, al igual que toda su ropa. En sus pechos, se podía ver con claridad mis manos marcadas con la pintura, al igual que su trasero. Ella yacía en el suelo sólo con su ropa interior, mirándome como yo hacía todo el trabajo. Mis jeans estaban llenos de pintura, mi pecho al descubierto, tenía miles de corazones dibujados por mi chica y mi cabello era todo un desastre.
-Esto es fácil -murmura Vic comiendo una barra de chocolate.
-Es bastante fácil ver a un hombre sexy pintando sin remera, ya lo imagino.
-¡Oye! Llevo en mi cuerpo a un ser humano que pesa dos kilos, dame créditos.
Voleo y me acerco a ella, con el pincel lleno de pintura.
-Creo que te falta pintura -Acerco el pincel a su rostro y pinto con mucho cuidado su nariz-, ahí.
Vic abre su boca dramáticamente y se levanta del suelo, que por cierto, está cubierto de pintura. Benditas sean las cubiertas de plástico, o la alfombra sería un desastre.
-Las pagarás, Luciano.
La chica toma su pincel, le aplica pintura y se acerca peligrosamente a mí.
Sí, yo podría correr por todo el departamento, ella no puede correr, pero me parece sencillamente sexy ver a Vic queriendo pintarme, es por eso que no huyo.
-¿Me llamaste Luciano?, ¿eso quiere decir que puedo llamarte por tu segundo nombre? Que por cierto odias y yo no tenía idea.
-Maldito Connor -murmura ella.
Unos minutos después, la chica me tiene de espaldas en el suelo, ella está sentada en mi pecho, pintando todo mi rostro, más de lo que ya está.
-Besaría tu boca, pero no tengo interés en saber a qué sabe la pintura -dice riendo.
-¿Acaso es esto un nuevo estilo de pornografía?
Ambos, Vic y yo, volteamos nuestras cabezas para ver a Connor parado en el umbral de la puerta, a su lado Ben, parecía bastante divertido con nosotros.
-Deberías usar una camisa, amigo. Dos gays están deseando ser Victoria en estos momentos -murmura Ben riendo.
-¿Los despertamos? -pregunta Vic levantándose con dificultad. Connor y Ben de inmediato se acercan para ayudarla.
-No, el horario es diferente querida amiga, en estados unidos es casi medio día.
-Claro.
Connor y Ben duermen juntos en la habitación de invitados que tiene nuestro departamento, mientras que Tyler, Barbara, su hija y Andrew, tienen sus propias habitaciones en el hotel de Hank, dónde soy jefe.
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Hermanastros: ¡Escenas extras!
RomanceLuke cometió un grave error; enamorarse de su hermanastra. Pero, ¿es realmente un error? Le quitaron a Alice, hace unos años atrás, luego de la trágica muerte de su madre; Victoria Sanders. Su padre decide rehacer su vida y casarse con Helen Miller...