☕Capitulo 18☕

81 10 57
                                    

Este capitulo es mas largo de lo que acostumbro (que suelen ser 6 paginas word, mas este capitulo consta de 8 paginas aklsjakl) pero es que sentía que tenia que hacer algo mas por todo el tiempo que pasé si actualizar, por eso mismo espero lo disfruten <3

 El pelinegro estaba recostado en la camilla de su habitación, tenía un montón de tubos y algunas máquinas conectadas a él. Llevaba así desde que había salido de aquel espeluznante sótano, apenas recordaba el día que llego a ese lugar.

Sero apenas podía dormir, por lo que llevaba desde la madrugada a pesar del cansancio que tenía, las secuelas de lo sucedido lo perseguían y evitaban que pudiera descansar en paz, trato de volver a dormir cuando justo la puerta se abrió lentamente.

Eso lo confundió, usualmente, nadie de su alrededor abría tan lentamente la puerta, simplemente entraban y ya, pero de todos modos no le tomo mucha importancia hasta escuchar aquella voz que lo perseguía durante días y noches.

- Veo que estas mejor que antes, muchacho – comento Kirishima acercándose a la ventana de la habitación cerrando las persianas.

- ¡! – Sero trato de alzar la cabeza para ver al pelirrojo, más un dolor punzante le recorrió la espina dorsal, más el dolor no evito que tratara de llamar la atención de quien pase fuera de la habitación - ¡Mnmh! – empezó a moverse desesperado.

- Jajaja, sí...efectivamente estas más animado que antes...me alegro tanto – dijo sínicamente sentándose en la camilla y acariciando la mejilla izquierda de Sero con el dorso de la mano – he estado muy preocupado por ti.

- ¡UMNH! – Sero siguió moviéndose tratando de alejarse del toque del director.

- Debe dolerte mucho...pero pronto el dolor desaparecerá...me encargare de eso – sonrió sádicamente mientras sacaba una pequeña jeringa de su bolsillo – Una dosis y ya estarás bien; la medicina moderna es un verdadero milagro, ¿No? – mientras el director trataba de meter la jeringa en la vía Sero empezó a retorcerse con todas sus fuerzas – Oh, que simpático, pareces un pececillo, pero no te preocupes, quizás te conviertas en uno en tu próxima vida...

- ¡Mnmh! – siguió resistiéndose hasta que el director le clavo el codo en el estómago haciendo que el pelinegro perdiera el aire por un momento.

- No debiste meter las narices en mis asuntos, amigo... - el director acerco nuevamente la jeringa y abrió las vías de Sero cuando de pronto...

- ¡Detente ahora mismo hijo de puta! – grito enfurecido Katsuki entrando después de los dos oficiales de policía que habían derribado la puerta, dañando el seguro de paso – ¡Ese es el mal nacido! – indico cruzándose de brazos dándole paso al oficial pelinegro que había visto ya varias veces.

- Señor, tendré que pedirle que me acompañe – dijo con una voz monótona y aburrida.

- ¿De qué está hablando? No he hecho nada – dijo tranquilamente bajando la jeringa lentamente.

- Quizá puede empezar por explicarnos qué planeaba hacer con esa jeringa – dijo Shindo entrando en la habitación.

- ¿Esto? – cuestiono volviendo a levantar la jeringa y sonrió tranquilamente – ¡No es más que un suplemento de vitaminas!

- Ese color, esa consistencia y esa jeringa...esta falta de cuidado es indigna de ti – murmuro algo deprimido Shinso, pero pronto se recompuso – deberías haber escogido al menos una jeringa que engañe a la vista, cualquier novato sabría que, con esa cantidad que planeas inyectarle, lo matarás de inmediato.

Kaminari asomo la cabeza desde la puerta, sin entrar a la habitación, y justo en el momento en que cruzo miradas con el director simplemente sonrió y le saco la lengua y el dedo de en medio, tenía una curita en la nariz la cual seguía algo roja. Kirishima ante tantas cosas simplemente perdió un poco los estribos, elevando la voz en consecuencia.

⨯Él doctor manda⨯ ☣Bakugo rutas☣Donde viven las historias. Descúbrelo ahora