Araxa
Marta se recuperó muy rápido de su operación, decía que casi ni le dolía, bla bla bla, nunca le puse atención a su recuperación ni a la enfermedad que tenía.
Temo que empezaron las clases, aunque en el fondo estaba agradecida ya que no veía a la arpía de Marta medio día, algo es algo.
Tengo que decir que era buena en la escuela, mis notas no eran mediocres pero tampoco eran sobresalientes, eran normales diría yo.
Yo estudiaba a unos 20 minutos de mi casa no me quedaba muy lejos el instituto, estudiaba en la tarde, estudiaba de una y treinta de la tarde a seis de la tarde.
Ese año entre a tercero básico, el fin de los básicos y ya a prepararme para el siguiente año de carrera.
Dios no tenía aspiraciones para nada, lo único que me llamaba la atención era Derecho, pero Marta quiere obligarme a estudiar Magisterio aún ella sabiendo que no me gustan los niños pequeños, y creo que no me quedará de otra que estudiar eso ya que después de todo es quien paga mis estudios, no, perdón, me corrigió, es mi padre, pero mi padre hace lo que Marta dice.
Viernes 24 de febrero 2012
Carlos no estudiaba donde yo estudiaba, él estudiaba a una hora de donde yo lo hacía pero ese día el salió un poco antes por lo cual pasó por mí.
Debo aclarar que yo tenía hora para llegar a casa, yo tenía que estar en casa a las 6:30 y si no estaba a esa hora Marta iba a buscarme con un cinturón de Rodrigo.
Ya eran las 6:50 y yo aún no estaba en casa, me entretuve con Carlos comprando tacos y se nos fue la hora.
Para llegar a la casa de Rodrigo se pueden bajar por 5 calles diferentes, ya que esta estaba en el centro, así que con Carlos optamos por bajar por la segunda calle.
sin saber que Marta estaba esperándome en la primer calle.
Llego a la casa de Rodrigo, me despido de Carlos, el entra a su casa y yo a la de Rodrigo. Dejo mis cosas en mi habitación la cual está en la primer planta y me dirijo a la segunda.
-ya llegue-grito ya que no veo a nadie y me voy para la cocina, entro a esta y ahí esta Rodrigó comiendo.
Cuando me vio entrar, me miró por unos segundos para luego regresar su vista al plato de comida, no sin antes soltar una risa burlesca.
Me quedé pensando a que venía eso, pero no le puse importancia, estaba por agarrar un vaso con agua cuando entra Marta a la cocina echa una furia para irse sobre mí, me agarra el cabello enredándose lo en la mano para luego botarme al suelo y arrastrarme por toda la casa.
Esta loca
Cuando me termino de arrastrar vi que estábamos en la habitación que compartía con Rodrigo, me levanté arreglándome el cabello como si nada.
Para que ella luego me diera dos cachetadas, una en cada mejilla haciendo que sintiera la cara hinchada por la fuerza que usó.
-¿Pero que le pasa?-le grité después de que me diera esas cachetadas.
-Que qué me pasa, me pasa que ya son las 7 de la noche y vos no venias, tenías que ayudarme con la cena. De seguro que estabas por ahí arrinconada con un patojo mientras él te manoseaba-me gritó de igual forma.
Esa señora estaba loca, era la primera vez que llegaba tarde a casa para que hiciera eso.
-Yo no estaba con ningún patojo, ni mucho menos dejaría que cualquier hombre de mierda me manoseara, además, porque más manoseada por causa de Rodrigo yo ya no puedo estar-le grite explotando, no sé de dónde vino eso, no sé porque lo dije, quizá fue la rabia que me estaba consumiendo.
Su cara cambió por completo, la vi venir hacia mi dándome otras dos cachetadas para luego salir de la habitación, pensé que había terminado estaba por salir de La habitación cuando la vi entrar con Rodrigo.
Estaba tan furiosa que puedo jurar que si hubiera tenido algo para poder matarlos no duden que lo hubiera echo.
-Volve a decir lo que me dijiste-grito Marta-Pero decilo.
Y claro que no me iba a quedar callada.
-Que le dije a marta que a mí no me pueden manosear más de lo que ya estoy a causa de usted-le grité a Rodrigo haciendo que él se sorprendiera.
¿Tengo miedo? Claro, no se como es que aun sigo de pie.
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Lo que ustedes crearon {Editando}
KurzgeschichtenMi corazón sigue latiendo, pero por dentro me siento seca, sin vida, es como estar muerta en vida. Solo era una niña inocente, tierna, dulce y amable, sin embargo, eso no le importó y me destruyó. Y ellas al no creerme, al elegirlo a él por sobre mi...