CITY OF STARS. |RenMin|

42.

– hola, ¿les molesta si pasamos un rato en este lado de la playa? también alquilamos una cabaña pero ese lado se llenó de gente. – una pareja se acercó a ellos mientras jugaban en el agua, el chico que les habló había usado el coreano para comunicarse al darse cuenta de que ellos lo estaban hablando, ambos negaron lentamente observándolos con curiosidad. – soy park chanyeol y el es mi novio, byun baekhyun.

– un gusto, ¿cómo se llaman? – preguntó con curiosidad baekhyun, sonriendo de forma dulce para los dos.

– soy renjun y el es jaemin. – el chino asintió sosteniendo la mano de su novio entrelazando sus dedos mientras salían del agua, los dos mayores parecían muy amables y enamorados lo cual subió el ánimo del menor entre todos.

– parece que se están llevando bien..– baekhyun soltó una risita dándole un trago a su refresco, sentándose junto a renjun en el porche de la cabaña observando a jaemin y chanyeol jugando a las atrapadas por la arena y el agua riendo a carcajadas.

llevaban un par de horas ahí charlando, jugando tonterías y comiendo cosas que los mayores regalaron para que pudieran hacerse amigos con más facilidad. renjun sonrió ante la escena, le hacía bien ver a su novio así de animado ahora conociendo a gente nueva. como el chanbaek también estaba turisteando por la isla no dudaron en pasar sus días juntos visitando un montón de lugares e incluso compartiendo todo aquello que habían pasado meses atrás en una deliciosa cena preparada por chanyeol, era la primera vez que hablaban sobre aquello con alguien que no fuera parte de los afectados o el psicólogo.

– de hecho..cuando teníamos diecisiete escapamos de casa para poder estar juntos, nadie de nuestras familias quería apoyarnos luego de salir del closet así que tomamos esa decisión tan difícil. – chanyeol contó aquella experiencia todavía bastante tocado por haber escuchado esas duras y pesadas palabras salir de la boca del coreano menor, sin poder imaginarse realmente todo el dolor psicológico y el trauma mental que cargaban con ellos.

– la vida siempre nos dará más oportunidades, a pesar de todo nosotros jamás hemos pensado en separarnos, incluso en esas noches cuando apenas nos alcanzaba para comer y discutíamos por el mal humor que nos daban los estómagos vacíos..después de todo sigo creyendo que el amor es lo más importante qué hay y de solo verlos se nota lo enamorados que están el uno del otro, ya dejen todo eso atrás y vivan el hoy, no sabemos qué puede pasar mañana, ustedes más que nadie merecen tener sonrisas en sus rostros. – baekhyun había dejado que su boca hablara más rápido de lo que podía pensar, dejando salir todas aquellas frases que parecían apresuradas pero hicieron gran presión en las mentes y corazones de los menores.

eran consejos simples que ya todos les habían dado pero en ese momento tal vez necesitaban oírlos, volver a confiar en que si estaban juntos nada podría salir mal y aún si lo hacía, estarían el uno para otro cuidado sus espaldas porque se amaban.

no había renjun sin jaemin y no había jaemin sin renjun.

– yah, los hiciste llorar. – chanyeol le dió un suave zape a su novio acercándose a abrazar fuerte a los dos chicos con los ojos llorosos. – miren hacia adelante, valoren más que tienen a muchas personas deseándoles el bien y que están dispuestas a cuidarlos hasta las últimas instancias, hay mucha gente que los ama y eso es lo más valioso en este mundo. todo eso fue una tormenta que afortunadamente acabó y no volverá a ocurrir, vencieron al monstruo de sus pesadillas y de premio conservan su hermosa relación que si confían en mi..estoy seguro de que durará un montón de años más, hasta que estén abuelitos y tengan que ayudarse a rascarse donde no puedan llegar solos..

renjun fue el más rápido a reaccionar a sus palabras, asintiendo con rapidez a la par que soltaba pequeñas risitas y pasando sus manos por sus mejillas para secar sus lágrimas volviendo a prometerse a si mismo en ese momento el mejorar su vida, a ser feliz como nunca antes lo había sido dándole un fuerte abrazo a park chanyeol. jaemin estuvo un rato llorando en el cálido hombro de byun quien con toda su amabilidad lo consoló.
aquello no era pena ni compasión por las almas que sufrían, ellos sinceramente esperaban la recuperación y pronto alcance de la felicidad para esos dos pequeños que en la semana que llevaban conociéndose ya se habían convertido en capaz sus primeros amigos después de haber dejado todo atrás varios años antes.