Capítulo 20

24.4K 2.5K 895
                                    

C A P Í T U L O"20"

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.




C A P Í T U L O
"20"

━━━━━━༺ꕥ༻━━━━━━

E V A N I A

Ingresé en aquella fábrica abandonada, esto parecía ser un cliché del cual no quería ser parte pero me estaba viendo obligada en serlo.

No podía controlar el ritmo de mi corazón, ni los temblores de mis manos, intenté controlar mi respiración pero sentía que al aire me faltaba. Negué con la cabeza queriendo concentrarme, pisaba con cuidado por donde caminaba, no quería problema alguno, ingresé cada vez más y más a la fábrica que parecía que en cualquier momento se caería.

Presentía que hoy ocurriría una tragedia, no quería acabar con mi vida tan rápido. Sabía que tenía muchas cosas por hacer pero si esa era la salida para poder dejar de sufrir lo haría.

A cada paso que daba sentía miedo de que la fábrica cayera encima mío, continué caminando a través de la gran instancia hasta que pude visualizar algo en el fondo, reconocería esa cabellera chocolate con una mezcla de cobrizo, preferí no correr, sabía que era una trampa así que debía ser lo más astuta posible, continué caminando hasta quedar enfrente de Evan, estaba desmayado, había una gran pérdida de sangre y sentí miedo por mi hermano.

—Evan—me agaché quedando frente a él, lo moví un poco suavemente logrando llamar su atención, entreabrió los ojos y me miró sorprendido.

—E-Evania...—susurró mi nombre, parecía estar en otro mundo lo que me dolió bastante en el alma, acune su rostro entre mis manos y lo obligué a que me mirara—. Estás más hermosa, y-yo lamento haber s-sido un terrible h-hermano... pensé que así p-podría protegerte—sollozó—. F-Fui un idiota iluso.

Negué con la cabeza.

—Está bien—sonreí a medias—, jamás te he odiado, y se que tú también sufriste.

Recordé varias cosas que mi mente trató de olvidar.

Negó.

—No...

—Sé lo que te hacían—afirmé, él me miró con los ojos cristalizados—. Siempre supe lo de las amenazas, quise odiarte por no luchar por mí pero sabía que tú también cargabas con tu propio infierno, pero ahora estás aquí y yo sí trataré de protegernos a los dos.

—Ellos... quieren d-dañarte.—volvió a sollozar.

—Pero no lo harán.—afirme con seguridad, me miró temeroso.

Secrets and LiesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora