«Congeláremos el infierno si eso es lo que quieres, lo quemaremos y encenizaremos si así lo deseas, pero no nos pidas que te excluyamos de el, porque ese es el lugar al que perteneces y pertenecerás siempre, Evania.»
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
C A P Í T U L O "40"
━━━━━━༺ꕥ༻━━━━━━
E V A N I A
Había llegado finalmente el día de la reunión en donde acompañaría a Gadiel, ya me encontraba completamente lista y preparada para lo que se avecinaba, según tenía entendido era reunión del club G&U, y que yo era una invitada especial.
Me miré al espejo y miré a Marc, me daba un malestar en el estómago saber que se quedaría solo sin embargo no dije nada, observé cómo me sonrió y levantó uno de sus pulgares en señal de aprobación.
Ladeé la cabeza y guardé silencio, últimamente las cosas se habían hecho más confusas, tan solo dos días después de aquel juego no tuve tantos encuentros cercanos con algún Turcotte gracias a que se encontraban averiguando quién era la persona de la foto y quien había tirado la piedra contra la ventana que casi me da contra la cabeza.
Marc por su parte me había comentado que tenía varios sospechosos, me sentí aliviada al saber que yo no me encontraba entre ellos pero algo me decía que no era tan así... que en realidad sí me encontraba entre sus sospechosos solo que simplemente no me lo diría y eso era más que obvio.
—Estás hermosa.—aludió.
Sonreí contenta por su halago y me encamine a colocarme las botas negras que me daban hasta más arriba de las rodillas, al terminar removí un poco mi cabello y sin decir nada más, me despedí de Marc con un beso en la mejilla y un simple adiós.
Salí de la habitación y bajé las escaleras mirando a los lados, no encontré a ningún Turcotte por esos lares lo que se me hizo extraño. Gadiel horas antes me había dejado en claro que la reunión era a las ocho y media de la noche, y eran las ocho apenas.
Baje las escaleras llevándome la sorpresa de encontrar a Gadiel hablando con Zarah, parecían tener una conversación algo acalorada. Ella tenía una mano sobre el antebrazo de él sin embargo me sentí aliviada fue cuando él la apartó de inmediato.
—Gadiel volvamos a los viejos tiempos.—rogó ella.
Aparté la mirada y caminé hasta salir de aquella sala, se suponía que él estaría listo para mí.
Habían varias personas en la mansión entonces supuse que la reunión sería aquí por lo que me alivie por Marc; no se quedaría solo. Continué con mi camino hasta la piscina, me encontré a varias mujeres vestidas de cuero con joyería y demás cosas, algunos hombres también y algunos Turcotte a los cuales no les presté mucha atención.
