Percy Jackson, Campeón de los Dioses.

Acciones y consecuencias:

Capítulo 13:

Percy estaba en medio de la sala de guerra observando un inmenso mapa del campamento y sus alrededores, a su lado, estaba Charlie Beckendorf, líder de Hefesto, y Clarisse La Rue, líder de Ares.

"No sabemos por dónde podríamos recibir un ataque, las fronteras del campamento y la protección del árbol de Thalia podrían ser insuficientes." Clarisse expuso su punto señalando con el dedo la larga frontera que separaba el mundo mitológico del mortal.

"Estoy de acuerdo, debemos de fortificar la frontera, si lo que me habéis contado del laberinto es cierto no servirá de mucho, pero si Luke no encuentra una forma de orientarse por él y decide lanzar un ataque frontal estaremos listos, es mejor ser precavidos." Apoyó Beckendorf a Clarisse.

"Cabe otra posibilidad, puede que lo del laberinto no sea más que una treta para hacernos desviar recursos hacia una búsqueda, sabe que algo así requerirá la participación activa de Percy, deberíamos de plantearnos la idea de que su objetivo sea dejarnos sin liderazgo, y precisamente ahora no podemos desprendernos de campistas veteranos en vano." Intervino de nuevo Clarisse.

Percy escuchaba atentamente a sus amigos con los ojos cerrados, miles de estrategias y planes distintos pasando por su mente.

"Bien, esto es lo que haremos." Dijo captando la atención de los otros dos campistas. "Charlie, quiero que construyas junto a tus muchachos una empalizada en la frontera, quiero cuatro torres que sirvan como atalaya aquí y aquí." Dijo señalando cuatro puntos repartidos por el borde del campamento. "El árbol de Thalia impedirá que sus efectivos más poderosos puedan entrar al campamento, la empalizada servirá para contener un asalto humano, y las torres como apostadero para nuestros vigías y arqueros."

"Eso no llevará más de un par de días, no con las planchas móviles." Charlie se refería a una idea que se les había ocurrido a Percy y Annabeth el verano anterior, consistía en una serie de planchas de mimbre entrelazado con bronce celestial y acero fácilmente ensamblables, era una idea brillante, con eso se podía fortificar cualquier posición con rapidez y facilidad.

"Son buenas noticias, quiero que estén lo antes posible en posición." Percy le sonrió a su amigo, quién le devolvió la sonrisa. "Clarisse." La líder de Ares se puso firme. "Quiero a la mitad de Ares patrullando la frontera, haz turnos, mientras los demás practicaran el combate en formación junto a todo campista que quiera unirse."

Clarisse asintió, la idea era buena, ella se encargaría de organizarlo todo.

Percy se estiró un poco, llevaban reunidos desde las seis de la tarde y eran casi las once, realmente estaba cansado.

Sin embargo el alboroto en el exterior le quitó el entumecimiento, rápidamente, y espada en mano, salió a ver que sucedía flanqueado de Charlie y Clarisse, apenas pusieron un pie fuera cuando Will Solace llegó corriendo y casi les tira al suelo.

"Will, dime qué demonios está pasando." El tono de Percy dejaba claro que aquello no era una pregunta.

"¡Annabeth y Grover! ¡Lo han encontrado!" Percy, Clarisse y Charlie no necesitaron más, ya entendían que había pasado.

A su alrededor la gente seguía gritando, no había ni un ápice de cordura, era un absoluto caos.

Percy había tenido suficiente, estaban en guerra, era hora de que pasaran a ser un ejército.

"¡SILENCIO!" En cuanto alzó la voz todos se congelaron y le miraron con asombro, e, incluso, algo de temor.

"¡Ya he tenido suficiente! ¡Calmaos de una vez y comportaros! ¡Gritar cosas sin sentido no va ayudar en nada!" La gente miraba a Percy con asombro y algo de vergüenza.