Una perfecta ilusión

Estaba confundido

Jiang Cheng escucho su estúpido celular y lo busco estirando su mano, para su sorpresa no tanteo una mesa, lo que sintió era un torso perfectamente esculpido, completamente desnudo, sus ojos parpadearon viendo la escena que se reproducía ante su vista, mientras su cabeza le daba una terrible jaqueca, su cintura y espalda parecían partirse.

-A Huan -Pronuncio aun adormilado, sin terminar de procesar - ¡A HUAN! – Gritó alarmado y aún más en cuanto sintió el mismo completamente desnudo. El mencionado pestañeo varias veces, lo cierto es que hacía dos horas ya estaba despierto, pero no quiso interrumpir los sueños del otro, así que no se había movido.

- ¿Qué ocurre A-Cheng? – Pregunto algo divertido, no era el mejor mentiroso.

- ¿Por qué demonios me duele la cintura? ¿Qué me hiciste? – Hablo amenazando el cuello del otro hombre. XiChen por su parte sonrió.

-Tu fuiste el que me invito a quedarme, te dije que no me haría responsable – XiChen torcía su boca divertido, mientras Jiang Cheng trataba de hacer fuerza con sus manos, pero esto no le funcionaba, sus manos aun seguían dormidas.

- ¿Qué estas insinuando A Huan? ¿Qué sucedió anoche? – Jiang Cheng recordaba el beso y ya, no habían más recuerdos que eso - ¡Maldición! - no volvería a tomar en su vida.

- Nada que no quisieras, aunque para ser un hombre que solo ha tenido una novia, no actuaste como tal anoche – XiChen movió al joven que lo amenazaba con facilidad y se puso en pie, Jiang Cheng lo observó y este solo tenía calzoncillos, mostrando su perfecto cuerpo, Jiang Cheng si se encontraba completamente desnudo, mientras su maldita cintura seguía doliendo, no podía enderezarse.

-No te creó – Jiang Cheng se volvió a recostar - ¿Prepararas el desayuno? - Jiang Cheng cuestionó, mientras XiChen no sabía exactamente qué estaba pasando por la mente del más joven.

- Así es ¿Quieres algo en especial? Tal vez ¿un desayuno para tu boda? - Jiang Cheng arrojo una almohada contra el hombre que parecía serio.

-No me casare – Jiang Cheng cubrió su cabeza con las cobijas y XiChen asintió sonriendo para llegar a la cocina.

Jiang Cheng se acurruco en la incómoda cama, pero no se sentía mal de estar ahí y aunque su mente jugaba con él, no podía imaginarse que hubiera pasado eso con A Huan. Su celular seguía sonando, pero tampoco se movió de la cama, estaba algo adolorido y no tenía ganas de responder, en algún momento pese al incesante ruido se volvió a quedar dormido.

- ¿No contestaras? – XiChen movió su cabello y Jiang Cheng pestañeo negando con la cabeza, miro que había una bandeja con wafles, un jugo y sonrió.

-Te castigaran por traer comida a la habitación – Jiang Cheng se burló al recordar las reglas que habían en la casa de su amigo, este solo puso una mirada extraña.

- Por ti aceptaría cualquier castigo - XiChen acaricio el rostro del joven y este de nuevo se cohibió, pero no alejo la mano del hombre, era un maldito doble moral, no podía pedirle que no lo tocara, cuando quien sabe que más cosas hizo anoche con él, además su beso, le había gustado, eso no lo iba a admitir en voz alta - ¿Qué planeas hacer?

- ¿Puedo quedarme? – Jiang Cheng cuestiono y XiChen asintió, supuso que en ese lugar nadie lo buscaría, Jiang Cheng se sentó y XiChen acercó la bandeja - A Huan lo que sea que haya pasado ayer, olvídalo – Hablo mientras daba el primer bocado.

- Sabia que dirías algo así, pero aun así, sigue sorprendiéndome – Lan XiChen miro con dudas al menor - ¿Por qué no aceptas lo que sientes?

- ¿Y que se supone que siento? ¿Acaso lo sabes? ¿De verdad quieres saber lo que siento? – Jiang Cheng dejo de un lado la bandeja, XiChen asintió – Bien, te lo diré, siento que en cada persona en la que pude haber confiado, en realidad no me aprecian, siento que viví una mentira por 10 años, que no conozco a la mujer que sería mi esposa y siento que tú no tienes la autoridad moral de decirme que sientes algo por mí, cuando fuiste el primero en irte - Jiang Cheng respiro profundo y tomo un sorbo del jugo.