Lo siento

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-Debo ir a casa de mis padres- Jiang Cheng inspecciona el camino y Lan Huan ajusta su mano sobre la suya en una aceptación.

Al llegar la mansión Jiang parece desolada y sin ningún habitante en ella, lo cual solo hace que Jiang Cheng se sienta aún peor, el mareo y el agotamiento lo quieren vencer y pese al insistente llamado por el intercomunicador, no hay una respuesta del otro lado.

-Lo siento A Cheng – XiChen lo abraza ¿Por qué se siente atrapado, ajeno e ignorante?, esa sensación de que hay algo más.

-A Huan dime que sabes por favor y no me ocultes nada – Suplica – Estoy cansado, no quiero secretos, sé que dije que tenía miedo, pero prefiero oírlo, por favor...

Se corta sus lágrimas caen y se siente mareado, el viaje en avión, eso debe ser, se alienta mientras trata de mantener el equilibrio.

Lan XiChen lo toma desprevenido de los brazos para mantenerlo en pie, pero el color que toma el joven lo preocupa, sin pensarlo mucho decide guiarlo a la casa de sus padres, al menos podrá recostarse antes de todo.

-A Huan ¿Qué le ocurre? – Su madre fue quien le abrió la puerta y le ayudo a acomodarlo en el sofá.

-No estoy seguro – Suspira, mientras va tocando el rostro del menor, no tiene fiebre, pero en algún momento se había desmayado, no era ajeno a esa reacción ya que en Holanda había sido de esa misma forma.

-Pobrecillo – Su madre toma la mano y le sonríe al joven inconsciente – Llévalo a tu habitación a que descanse, llamare un médico.

Lan XiChen obedece en silencio, aunque no sabe si lo mejor es que lo vea un médico, tampoco le gusta la idea de guardar secretos, pero no halla otra forma, tal vez debieron quedarse más tiempo en Holanda, ser egoísta y guardarlo de todo esto, esconderlo y protegerlo. En cuanto llega el medico anuncia que no tiene nada grave y lo mejor es dejarlo descansar así que XiChen se queda en la sala, mientras su madre trata de ordenar todos los acontecimientos.

- ¿Él sabe que sus padres enfrentaran un juicio? ¿Qué tienen medida de aseguramiento preventiva? – Su madre pregunta con una seriedad que para A Huan resulta difícil de imaginar mientras sostiene el teléfono con reproche - ¿Qué ahora es un socio mayoritario de una empresa familiar? ¿Qué tiene más de la mitad de tu patrimonio por el que trabajaste y heredaste? A Huan creo que tu padre y yo no te criamos de esta forma

-Madre...

-Madre nada, Qiren me informo que el joven no sabía nada, ¿exactamente que estás haciendo? Y ¿Cómo es eso que se casaron como si huyeran de la ley?

- ¿Estas molesta por lo que hice? – Pregunta con tono tímido.

- Me molesta que mi hijo sea un mentiroso y hagas cosas bajo cuerda, incluso terminaste vinculado en todo esto, te llego un citatorio.

-Lo sé – Dice vencido – Madame Yu me informo

-Me alegra que al menos tu sepas esto. Lan Huan esto es serio, tu hermano esta furioso – Lan Huan entonces frunció una ceja

- ¿Mi hermano? ¿WangJi? – Pregunta intrigado y su madre asiente - ¿Por qué mi hermano? ¿Por qué no mi padre? – Su madre suspira

- ¿Alguna vez te preguntaste porque tú tienes el 50% de las acciones y no un 20 como tu hermano? – XiChen parpadeo confundido.

- ¿Por qué era el primogénito? – Pregunta asumiendo que esa era la respuesta correcta.

-Porque Qiren te dejo un treinta por ciento de sus acciones ya que él no tenía ningún hijo – Suspira de nuevo – A Huan los Lan son algo tradicionales, es por eso que ni si quiera yo tengo alguna acción a mi nombre.

Una perfecta ilusiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora