◇ 𝐘𝐨𝐮𝐧𝐠 𝐀𝐯𝐞𝐧𝐠𝐞𝐫𝐬 ◇

◇ 14 ◇

Capítulo 14:

  Éʟ

⚠️Contenido Trigger⚠️
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Tony era arrastrado, sujetado de los brazos, sus piernas no tenían fuerza. Su cuerpo dolía como nunca antes, además su visión era muy poca, gracias a la sangre y golpes sobre su rostro.

De repente fue arrojado al suelo y solo pudo quejarse un poco. De pronto se escucharon unos aplausos lentos y cerró sus ojos sabiendo de quien se trataba.

—Bravo, bravo. Anthony Stark, eres una caja llena de sorpresas. Muchas. Sorpresas.

Incluso con la voz ronca, sin fuerza le dijo—Vete al diablo.

Sintió su cabeza hacia atrás, gracias a que fue agarrado de su corto cabello. Junto los dientes ensangrentados por los golpes que recibió de Falcón y el Soldado del invierno.

Vio aquel tipo.

No sabía quien era, no podía recordarlo de ninguna parte así que la idea de que fuera un enemigo suyo era descartado. Pero lo que podía decir de este hombre es que era demasiado listo, arrogante...

Y sediento de la locura del mundo.

Era alto, quizás un poco más alto que el, su cabello era corto, color negro. Traía puesto un traje de marca cara acompañado de una chaqueta larga de cuero color negro, aunque a veces podía ver un rastro de color púrpura en ellos.

Pero eso no era importante, lo que más destacaba de ese hombre, es que sus ojos eran anormales, junto a su piel. Sus ojos literalmente eran negros y en sus pupilas un púrpura intenso, su piel tenía esos rastros morados. Sabía de la existencia del poder y la magia. Pero esto era diferente, lo que tenia este tipo era un avance en sus sistemas, lo que significa, según su teorías, es que en sus feromónas tiene el poder de controlar a la gente.

—Creo que no entendiste, cuando te dije... que ustedes están ante mi control y solo mi poder. Me pertenecen solo a mi y solo a mi, me deben respetar.

Tony gruñó por el dolor causado en las hebras de su cabello.

La  voz ronca de enojo de ese hombre se hizo más intenso—Mi importa un carajo, si le ahorraste tiempo a tu linda novia. La encontraré y tú me dirás donde está.

El magnate con una mirada desafiante entre todos los golpes de su rostro le habló con severidad—Te lo dije. Sobre mi cadáver.

El otro sonrió y mostró la máscara. Sonrió al ver que el Stark contrajo su mirada al ver el artefacto en su mano... pero.

—Antes de hacerlo. Dejaré que te den otra lección,  como esa linda cicatriz que te ganaste—intentó pasar su dedo sobre la cicatriz del Stark en su rostro pero este con asco se alejo de su mano.

Lo soltó bruscamente y se los encargo a los dos hombres que se habían quedado en silencio hasta que tuvieran órdenes.

—No lo maten. Pero necesito que aprenda la lección.

Tony no pudo reaccionar al primer golpe en su rostro. Después otro y otro. Escupió sangre cuando Barnes lo arrojo hacia la pared más próxima. No era justo, no podía defenderse, estaba herido y probablemente no despertaría en bastante rato hasta que el hijo de puta lo volviera a usar como marioneta.

Elevó su mirada y vio a Barnes acercarse.  A un lado vio que Sam sacó una cuchilla.

Fue sujetado del cuello por la mano de Vibranium del soldado. Le faltaba aire, intentaba patearlo pero no podía.

El pánico le invadía, le dijeron que no lo mataran pero, ¿Por qué se sentía que sería sus últimos momento? El miedo era un arma muy letal.

Ja. Fue la risa amarga en su mente. Esto le recordaba a como sus padres fueron asesinados a sangre fría... y justamente por las mismas manos. Que eran otra vez controlados por otros, sin que Barnes pudiera hacer algo al respecto.

Con la poca fuerza en su voz, pudo decirles estas palabras al soldado—Barnes... no... te culpo.

Pudo ver un destello tan fugaz en los ojos del soldado pero luego volvieron a ser esos ojos fríos y vacíos de color púrpura.

Fue entonces que recibió varios golpes en su rostro hasta que este se lleno de sangre, otro golpe más y el último, sintió algo romperse. Gritó fuertemente por el intenso dolor, su brazo... su brazo derecho estaba torcido, no podía evitar las lágrimas en sus ojos, fue liberado del agarre, el terror en su sangre combinados con la necesidad de sobrevivir lo llevaban a hacer el intentó de escapar, pero lastimosamente sus piernas no respondían.

Escupió sangre de nuevo e intento mirarlos, con sus ojos rojizos por los golpes y la sangre. Sólo eran muñecos... no eran ellos. No eran ellos.

Derramó más lágrimas al saber que la sangre en sus manos no sólo era suya, sino la de miles de inocentes que fallecieron en el ataque. También sus manos estaban manchadas de sangre...

Podía recordar todo. ¡Todo! Ese maldito le hizo a hacer cosas impensables. No solo faltaba con controlarlos, de alguna manera también podía estar consciente de sus actos sin tener el poder de liberarse. No sabe como lo hizo en el momento en que pudo salvar a Pepper, quizás había alguna forma, pero necesitaba tiempo para pensar... pero no lo tenía.

Otras lágrimas amargas se derramaron—¿Por... qué...?

Tony perdió la consciencia y los hombres solo se encargaron de cargarlo hasta una celda. Romanoff apareció otra vez, tenía leve golpes en su rostro y la marca de las manos de Steve en su cuello. Ella tenía a su lado algunos médicos que también eran controlados y se encargaron rápidamente de las heridas del Stark.

El Stark perdía sangre, pero no era letal. Aún tenía tiempo.