Capítulo 22: Cambios.

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Capítulo 22.

~Cambios.

«Harry»

🌈

Era una tarde de verano, calurosa y húmeda, como siempre solía ser. Me había despertado con un dolor en mi trasero y la cabeza en otro lado, estaba algo confundido, ví mis muñecas y en ellas habían marcas rosaceas cubriendo la piel de mis muñecas,  sonreí y sentí la necesidad de ver más de mi cuerpo pero el espejo aún estaba tapado, no lograba verme al espejo como antes. Con tranquilidad, pero quería ver como estaba mi cuerpo.

Tome un suspiro y me acerqué a espejo de cuerpo completo que estaba en la habitación cubierto de un manto negro haciendo así no poder ver el reflejo. Mis manos se aferraron a la tela y sin rechistar decidí quitarla, retrocedí unos centímetros y me ví en el gran espejo suspiré hondo y comencé a quitarme lo que tenía puesto hasta quedar en bragas, una lágrima se escapo de mis ojos esmeralda y comencé a verme aún más, me dí la vuelta y vi unas cuantas estrías posarse en la blanda piel de mis muslos, las toqué y luego aprente un poco. Retrocedí un poco más para ver mis caderas, eran estrechas y definidas, un sollozo salio cuando me ví todo completo, rellenito y con muchas curvas.

No me fijé que alguien estaba en la entrada de la habitación, yo seguía viendo cada parte de mi cuerpo, viendo cada parte que había cambiado. Mis mejillas estaban un poco más delgadas, mi estatura aumento un poco y tenía un poco más de grasa corporal, me quede unos minutos viéndome con la cabeza ladeada.

Eres muy hermoso ¿cierto? - Volteé hacía donde provenía la voz y me fije en la unica persona que estaba ahí, Louis.

No lo sé, Lou. Aún no me acostumbro bien ¿sabes? Es complicado - Decía entré hipidos - Es como ver a otra persona, tenía algo de tiempo sin verme a mi mismo - 

Claro que es complicado amor, amarse a uno mismo no es tan fácil como lo hacen ver - Sentí sus manos en mis mejillas, conecté mi mirada con la de él, dos colores diferentes haciéndose uno mismo.

Ya me dí cuenta, Lou. Yo solo espero verme como lo hacía antes, sin imperfecciones o defectos, sin asco y pena de mi mismo - Mi voz se quebró y Louis me dio un abrazo reconfortante, no quería separarme de él nunca. Su esencia a menta y tabaco se me hacía adictiva y reconfortante.

Algún día te verás como yo lo hago, Hazz. Y te juro que no vas a querer despreciarte nunca más - Un beso se colo por mi sien he hice en busca de más contacto como un gatito, nos acostamos en la cama y más caricias se fueron pasando por toda la tarde.

{...} Louis.

Era de noche, Harry y yo nos encontrabamos en la cocina, picando verduras y sonriendonos, aún no sabía de que forma podía decirle que no podría ir conmigo a Londres esperé a que la conversación llegara pero eso nunca pasó. Estaba en un dilema, porque en estos momentos eran donde Harry me necesitaba más, le habían dado una nueva receta de medicamentos y aún no se acostumbraba a los efectos secundarios de ellos, estaba progresando con la terapia y si todo iba bien en las ultimas semanas ya podría dejar su programa de alimentación.

Eran muchas cosas y tenía miedo de que algo pasara mientras no estaba ¿que tal sí Harry vuelve a dejar de comer?  ¿O si vuelve a donde estaba hace meses? Aún no estaba listo para estar solo y eso me angustiaba cada día más, ya Anne había regresado de sus vacaciones y podría dejar a Harry con ella ese no era un problema, Anne siempre recibiría a Harry con los brazos abiertos. Solo que tal vez Harry no podría tenerle esa misma confianza a Anne que tiene conmigo, de contarle como se siente en realidad lo sé porque yo también fuí adolescente y sabía muy bien como ocultar lo que pasaba por mi mente.

Traté de buscar fuerzas donde no las tenía y decidí hablar - Harold - Ya comencé, no iba a parar.

Dime, Lou - Dijo volteandome a ver l esos ojos tan tiernos que tenía.

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