Tras la abrupta finalización de la llamada, el caos se apoderó del grupo.
Nam-joon y Jin no paraban de tratar de comunicarse con alguno de los chicos, mientras Yoon-gi buscaba cualquier medio para tranquilizar al peli-azul, mismo que, envuelto en temblores y palabras incoherentes, solo podía intentar una y otra vez enlazase nuevamente con su Alfa, más obteniendo el mismo resultado.
La otra parte seguía sin contestar.
Sin ser consientes realmente de lo que ocurría a su alrededor, los cuatro Killer's atravesaron el gigantesco edificio con pasos rápidos, llegando a los coches que se encontraban detenidos de manera descuidada en el primer piso del estacionamiento, entrando y arrancando con velocidad mientras el líder hablaba por teléfono con Jackson, dejando que Jin mantuviera una conversación con el comandante de la policía de Corea, realizando a su vez, transacciones sin perder la comunicación.
Por su parte, Suga se veía rodeado de un torbellino de emociones en el vehículo que compartía con el Omega y el cual seguía de cerca a Nam-joon.
Su preocupación por los chicos, el miedo a que algo hubiese ocurrido... la tristeza al ver al Omega a su lado derramando lágrimas mientras los temblores no cesaban, era algo que estaba poniendo a prueba toda su resistencia y cordura.
-Suga...- chilló de forma aguda el menor, haciendo que el peli-plata quitase una mano del volante para acariciar la pierna de Tae, en un intento de calmarlo- No puedo enlazarme a él... No puedo
Viendo el sufrimiento del menor, el Alfa no pudo evitar entrelazar su mano con la del chico, subiéndola hasta sus labios para depositar un casto beso en el dorso, escuchando los constantes sollozos que inundaban el deportivo negro.
-Él está bien... Sé que está bien- aseguró el Alfa sin apartar la vista de la carretera, acelerando aún más cuando sentía que el tiempo comenzaba a agotarse- Tranquilo, Tae. Los vamos a encontrar... Estarán bien...
Buscando que el menor calmara su respiración agitada, Yoon-gi liberó una cantidad sutil de feromonas, mismas que sabía que podían relajar al chico, al menos hasta que pudiese respirar con un poco más de normalidad y sin caer nuevamente en un ataque de pánico.
Viendo que, a los segundos, su táctica había funcionado, Suga se concentró nuevamente en conducir, tomando la misma velocidad que Nam-joon y creando rutas alternas para llegar en primeras al edificio que deseaban.
Sin embargo, para cuando la distancia se había reducido a una sola vuelta, el terror se adueñó nuevamente de ellos, presenciando como un par de pisos de la parte superior del corporativo, se encontraban colapsados, llenos de humo y rastros de fuego, consecuencia de una indudable explosión.
-Carajo, chicos... ¿Dónde están?
***
Dos horas antes
Manejando detrás de la sombra del auto de Nam-joon, Jeon había recibido la alerta de que alguien ingresó a la empresa, cerrando todas las vías de acceso y tratando de abrir los archivos y cuentas bancarias desde los ordenadores centrales.
Teniendo la idea de quien podría ser aquel intruso, el grupo había optado por separarse, cayendo en cuenta que lo mejor sería que Ho-seok y Jimin fuesen los que se dirigieran a la empresa, pero uniéndose casi al instante Jeon, mismo que sabía que, por más capaz que fuera Jimin, el hecho de que un Omega estuviese en un ciclo de celo, lo hacía más vulnerable y susceptible ante ciertas situaciones.
-Cuida a Tae. Ha estado más sensible de lo normal- comentó Hope hacia Suga mientras sacaban varias armas de la cajuela de uno de los coches, para colocarlas poco después entre su ropa- No lo demuestra mucho, pero sé que está asustado
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🄱🅁🄾🄺🄴🄽 🅁🅄🄻🄴🅂 🄸🄸 Ⓛⓐ Ⓕⓘⓔⓢⓣⓐ
FanfictionHabían jurado tantas cosas tras tanto dolor, que lo único que esperaban a partir de aquello, era obtener libertad en su retorcido y escabroso mundo. Disfrutar y embriagarse en la continua fiesta de adrenalina que era su vida... pero nunca lograron p...